Cuando despert¨®, el presidente todav¨ªa estaba all¨ª
La moci¨®n de censura ha reforzado al Gobierno como el ¨²nico posible (de momento) y a Podemos como la m¨¢s firme oposici¨®n
El dinosaurio es un popular y celebrado microrrelato del escritor Augusto Monterroso, publicado en 1959. Se considera una obra maestra en espa?ol, a pesar de su brevedad: ?Cuando despert¨®, el dinosaurio todav¨ªa estaba all¨ª?. El cuento tambi¨¦n ha sido utilizado en contextos pol¨ªticos, como, por ejemplo, en M¨¦xico. El PRI se mantuvo en el poder por m¨¢s de siete d¨¦cadas y se le comparaba, por su antig¨¹edad, con un dinosaurio, haciendo referencias constantes al cuento de Monterroso.
La sorpresa de esta sesi¨®n ha sido Irene Montero. Correosa, tenaz, implacable, la portavoz se ha caracterizado por una vehemencia que, muchas veces, ha conseguido el involuntario efecto contrario
Algo parecido est¨¢ pasando con Mariano Rajoy y la moci¨®n de censura presentada por Podemos. Tras un relato implacable, exhaustivo e incisivo de Irene Montero y Pablo Iglesias, el presidente sigue ah¨ª, aparentemente imperturbable.
Pero esta moci¨®n no ha sido un tr¨¢mite, aunque el previsible desenlace no ha restado inter¨¦s, al contrario. Tampoco ha sido una sesi¨®n bochornosa y vergonzante (como la moci¨®n en la Asamblea de la Comunidad de Madrid). El debate ha sido duro, seco, fuerte. Una sesi¨®n de alta intensidad parlamentaria. No ha sido muy brillante, pero s¨ª muy interesante.
El cuerpo a cuerpo entre Rajoy e Iglesias ha diluido al resto. Los dos salen muy beneficiados. Fortalecidos. Hay dos ganadores en esta moci¨®n, a pesar del resultado. Esta es la primera victoria de Iglesias. La segunda es obligar a escuchar al PP ¡ªy a toda Espa?a¡ª una contundente descripci¨®n de la lista de casos de corrupci¨®n de dicha formaci¨®n. Esta letan¨ªa judicial, casi declamada con efectividad por Montero, es una gran semilla parlamentaria y una carga de profundidad sin paliativos, justo el mismo d¨ªa en que conoc¨ªamos que el Gobierno espa?ol solo cumple con tres de los 26 compromisos que asumi¨® en la Cumbre Anticorrupci¨®n de Londres 2016, seg¨²n el informe que present¨® este martes Transparencia Internacional Espa?a.
Y la tercera ¡ªquiz¨¢ el aut¨¦ntico objetivo de la moci¨®n¡ª es presentar a Podemos como la opocisi¨®n real al PP. Una oposici¨®n clara, n¨ªtida, sin concesiones, en ausencia del l¨ªder del PSOE en el hemiciclo y en pleno proceso de recomposici¨®n socialista. Podemos ha crecido, madurado. Y ha preparado con precisi¨®n opositora sus intervenciones y sus acompa?amientos. Desde las instrucciones a sus parlamentarios sobre c¨®mo vestirse y comportarse, hasta la combativa y experimentada coreograf¨ªa digital de apoyo a las intervenciones de sus l¨ªderes.
La sorpresa parlamentaria de esta sesi¨®n ha sido Irene Montero. Correosa, tenaz, implacable, la portavoz se ha caracterizado por una vehemencia que, muchas veces, ha conseguido el involuntario efecto contrario. Su intensidad ha impedido ¡ªen algunos casos¡ª la fuerza demoledora de sus datos y argumentos. Pero Montero ha demostrado una personalidad parlamentaria y una seguridad que desactiva y desacredita los innumerables comentarios machistas y mis¨®ginos que recibe.
La moci¨®n de censura ha reforzado al Gobierno como el ¨²nico posible (de momento) y a Podemos como la m¨¢s firme oposici¨®n. Cuando sus se?or¨ªas despertaron tras dos d¨ªas de debate intenso, el presidente todav¨ªa segu¨ªa all¨ª. Esta es la realidad, aunque durante ese par de d¨ªas se han visto otras posibilidades. Y esa es la semilla de esta moci¨®n. No anticipa nada, pero prepara una percepci¨®n.
Los expertos y cr¨ªticos literarios afirman que la palabra clave del cuento de siete palabras de Monterroso es ?todav¨ªa?. Un concepto disuasivo y esperanzador, al mismo tiempo. Permanece invariable, pero se anticipa ¡ªo se espera¡ª un final diferente. Una presencia temporal, acotada, limitada por un todav¨ªa sugerente y polis¨¦mico.
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