Espa?a mandar¨¢ la operaci¨®n de la UE contra las mafias de la imigraci¨®n
El buque Cantabria embarcar¨¢ el Estado Mayor de la misi¨®n europea en el Mediterr¨¢neo
Espa?a mandar¨¢ por vez primera la Operaci¨®n Sophia de la UE dedicada a la lucha contra las mafias que trafican con inmigrantes en el Mediterr¨¢neo, seg¨²n fuentes diplom¨¢ticas y militares. Lo har¨¢ entre septiembre y diciembre de este a?o a petici¨®n de Italia, que viene mandando la operaci¨®n desde su puesta en marcha en 2015. La Armada tiene previsto enviar el buque Cantabria con un Estado Mayor embarcado al mando de un almirante espa?ol.
Italia ha pedido a los 25 pa¨ªses que participan en la Operaci¨®n Eunavfor Med Sophia que aporten un buque de mando para poder relevar a los suyos y Espa?a es el ¨²nico pa¨ªs que ha dado un paso al frente ante este reto.
Espa?a, que es el segundo mayor contribuyente a la operaci¨®n tras Italia, viene participando con una fragata, actualmente la Canarias, y un avi¨®n de patrulla mar¨ªtima, estacionado en la base a¨¦rea de Sigonella (Sicilia), con un coste de 67 millones de euros en 2016.
La intenci¨®n del Ministerio de Defensa es mantener el contingente de 254 militares que aporta en la actualidad (38 del destacamento Grappa del Ej¨¦rcito del Aire; 207 de la tripulaci¨®n de la Canarias y nueve en cuarteles generales), pero cambiando la fragata por el Buque de Aprovisionamiento en Combate (BAC) Cantabria, con un Estado Mayor multinacional embarcado.
Cr¨ªticas del enviado de la ONU para Libia
Martin Kobler, enviado especial de la ONU para Libia, lanz¨® el pasado martes duras cr¨ªticas a la actuaci¨®n de la UE: ¡°He visto muchos v¨ªdeos donde los guardacostas libios empujan a gente fuera de los barcos, d¨¢ndoles patadas y dej¨¢ndolos ahogarse. Es gente entrenada por la Uni¨®n Europea, que puede evitarlo¡±. Kobler pidi¨® a los europeos que acompa?en a los guardacostas libios en sus patrullas, para evitar abusos, y advirti¨® de que los centros de detenci¨®n de inmigrantes en Libia, financiados por la UE, est¨¢n ¡°fuera de la legalidad¡±.
El diplom¨¢tico alem¨¢n pidi¨® ante la Comisi¨®n de Asuntos Exteriores del Parlamento Europeo que haya personal internacional en esos campos las 24 horas para ¡°garantizar que los guardas [libios] no se llevan las medicinas¡±. ¡°Mientras no haya supervisi¨®n internacional para hacer que el sistema funcione, yo desaconsejar¨ªa que siguieran con esas ideas¡±, advirti¨® a los eurodiputados. / Europa Press
Aunque el mando en la mar lo ostentar¨¢ un marino espa?ol, el m¨¢ximo jefe de la operaci¨®n seguir¨¢ siendo el almirante italiano Enrico Credendino, que dirige el cuartel general en Roma.
Desde su puesta en marcha en 2015, los cinco barcos y seis aviones europeos de la operaci¨®n Eunavfor Med Sophia han rescatado a m¨¢s de 36.000 personas, han neutralizado 440 embarcaciones dedicadas al tr¨¢fico de personas y han detenido a 109 traficantes, pero no han podido evitar que el Mediterr¨¢neo central sustituya al Egeo como principal ruta de llegada a Europa de inmigrantes y refugiados.
Entre enero y abril de este a?o un total de 37.200 personas arribaron a las costas italianas, un 33% m¨¢s que en el mismo periodo de 2016, seg¨²n Frontex, la agencia europea de fronteras. Se estima que 1.600 perdieron la vida en el intento.
Fuentes diplom¨¢ticas reconocen el impacto limitado de la Operaci¨®n Sophia para frenar el flujo de inmigrantes irregulares. Lo atribuyen a que la misi¨®n ni siquiera ha conseguido hasta ahora completar la segunda fase de las cuatro que figuraban en su plan de operaciones.
Para poder actuar en aguas territoriales libias, la UE deber¨ªa contar con una petici¨®n de las autoridades libias o una resoluci¨®n del Consejo de Seguridad de la ONU. Como el Gobierno de Tr¨ªpoli, el ¨²nico reconocido internacionalmente, apenas controla una peque?a porci¨®n del pa¨ªs, la UE no espera contar a medio plazo con dicha autorizaci¨®n y mucho menos con la posibilidad de acceder a las costas libias para incautar las barcazas dedicadas al tr¨¢fico de inmigrantes antes de que se echen al mar.
Aunque los buques de la UE puede abordar y destruir las embarcaciones , solo pueden hacerlo una vez que estas consiguen salir de las 12 millas de las aguas territoriales libias. Para los inmigrantes son una tabla de salvaci¨®n, pues en sus precarios botes nunca conseguir¨ªan cruzar el Mediterr¨¢neo, pero a las mafias que viven de este lucrativo negocio apenas les perjudica.
La alternativa es acelerar el entrenamiento de la guardia costera libia, para que sea esta la que se encargue de impedir la salida de los inmigrantes desde sus costas. Hasta ahora, la UE ha formado a unos 130 oficiales libios a bordo de buques que participan en la Operaci¨®n Sophia, pero el plan es ampliar el n¨²mero de alumnos realizando la instrucci¨®n en tierra, en Italia y Espa?a. La extensi¨®n de este programa tropieza con los recelos de los pa¨ªses europeos que, ante el caos reinante en Libia, no se f¨ªan de que sus alumnos no acaben engrosando las milicias que se disputan el control del pa¨ªs.
La UE tiene sobre la mesa dos propuestas para mejorar la eficacia de la Operaci¨®n Sophia: la creaci¨®n de un observatorio europeo del tr¨¢fico de personas, con una base compartida de datos de traficantes, y la tipificaci¨®n del delito de tr¨¢fico de personas como crimen contra la humanidad, para que sus autores puedan ser perseguidos en cualquier pa¨ªs y no solo en aquellos que se vean directamente afectados por la acci¨®n de las mafias.
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