Un foro de modelo bolivariano har¨ªa la Constituci¨®n catalana

La Generalitat de Catalu?a propone, en su retocado borrador de la Ley de Transitoriedad Jur¨ªdica (LTJ) al que ha tenido acceso EL PA?S, activar un proceso ¡°participativo de base ciudadana¡± para redactar y aprobar la hipot¨¦tica Constituci¨®n de la Rep¨²blica catalana. Antes, sin embargo, la ley proclama ya esa Rep¨²blica y se erige en ¡°norma suprema¡± mientras no haya una Constituci¨®n. Desde la supuesta celebraci¨®n del refer¨¦ndum por la independencia, el 1 de octubre, durante seis meses se plantear¨¢ un debate asambleario y social, al que seguir¨ªan unas elecciones constituyentes para refinar esas ideas y redactar una Constituci¨®n. Si esa norma fuese ratificada por la ¡°Asamblea constituyente¡± se convocar¨ªa otro refer¨¦ndum y nuevas elecciones.

El corregido texto de la Ley de Transitoriedad Jur¨ªdica (esa especie de preconstituci¨®n catalana) ha sido redactado ahora en coordinaci¨®n por Marta Rovira, secretaria general y n¨²mero dosde ERC y portavoz de Junts pel S¨ª en el Parlament catal¨¢n, y por Jordi Turull, presidente del Grupo Parlamentario de Junts pel S¨ª y miembro de la direcci¨®n del PDeCAT. El documento contiene algunos matices sobre el proyecto que EL PA?S ya avanz¨® el pasado 22 de mayo con la intenci¨®n de buscar m¨¢s apoyos pol¨ªticos entre los dirigentes y bases de En Com¨² Podem y un cap¨ªtulo entero nuevo (el t¨ªtulo VII) sobre c¨®mo se desarrollar¨ªa el llamado proceso constituyente.

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El objetivo de los dos partidos socios en el Gobierno de la Generalitat es presentar a mediados de este mes de julio el nuevo documento, que deber¨ªa servir de hoja de ruta para el proceso independentista. El calendario soberanista avanza hacia el 1-O sin un sustento jur¨ªdico, sin urnas ni soluci¨®n sobre los colegios electorales o el recuento y con una oposici¨®n f¨¦rrea del Ejecutivo central, que se niega a cualquier acuerdo o negociaci¨®n sobre una consulta ilegal que no se contempla en la Constituci¨®n espa?ola.

La nueva ley expr¨¦s de ruptura de Catalu?a con Espa?a contiene siete t¨ªtulos y 71 art¨ªculos. En su desarrollo se suprime el punto segundo de la anterior disposici¨®n final segunda sobre la entrada en vigor de esa norma que establec¨ªa: ¡°Si el Estado espa?ol impidiera de manera efectiva la celebraci¨®n del refer¨¦ndum, esta ley entrar¨¢ en vigor de manera completa e inmediata cuando el Parlamento constate este impedimento¡±. Ahora se ha preferido obviar ese choque.

El nuevo proyecto normativo para consumar la independencia de Catalu?a olvida el amplio apartado anterior sobre el refer¨¦ndum soberanista, con todos sus detalles y aspectos, para regular en su lugar un calificado como ¡°proceso constituyente¡± de car¨¢cter muy asambleario y con tintes similares a los propuestos por decreto presidencial el pasado mayo por el presidente Nicol¨¢s Maduro para Venezuela. Ese decreto de Maduro para convocar el 30 de julio una Asamblea Nacional constituyente, con la elecci¨®n de 540 nuevos diputados, muchos teledirigidos desde ¨¢mbitos sectoriales y territoriales progubernamentales, ha sido recurrido ante el Tribunal Supremo y ha desembocado en una enorme crispaci¨®n y oposici¨®n en las calles venezolanas. Los mandatarios catalanes sostienen que su modelo es m¨¢s similar al implantado con las reformas constitucionales en Islandia tras la crisis bancaria.

En el proceso constituyente ideado por Junts Pel S¨ª para Catalu?a se prev¨¦ que, una vez celebrado el refer¨¦ndum del pr¨®ximo 1 de octubre y si su resultado fuese favorable a la pregunta independentista, la Generalitat activar¨ªa una fase ¡°de base ciudadana, transversal, participativa y vinculante, con el objetivo de redactar y aprobar la Constituci¨®n de la Rep¨²blica¡±. Esa etapa se subdivide luego en tres fases sucesivas: ¡°Una primera, de proceso participativo; una segunda, de elecciones constituyentes y de elaboraci¨®n de una propuesta de Constituci¨®n por parte de la Asamblea constituyente; y una tercera, de ratificaci¨®n de la Constituci¨®n por medio de un refer¨¦ndum¡±.

Los ponentes de la norma independentista se?alan que el actual Parlamento catal¨¢n deber¨ªa amparar esas diferentes fases participativas para que tuvieran lugar esas deliberaciones por sectores y territorios en los siguientes seis meses tras conocerse el resultado de la consulta del 1-O. Tras esas discusiones ciudadanas se convocar¨ªa un ¡°Foro Social constituyente formado por representantes de la sociedad civil y de los partidos pol¨ªticos¡±. El articulado de la ley establece que ese foro debatir¨ªa y formular¨ªa ¡°un conjunto de preguntas sobre los principios y cuestiones generales de la futura Constituci¨®n¡± que tendr¨ªan que ser resueltas por los participantes en esos debates. Esas conclusiones se consideran ¡°un mandato que vincula pol¨ªticamente la Asamblea constituyente, la cual los articula jur¨ªdicamente y, si hace falta, los armoniza y sistematiza¡±. No se explica c¨®mo.

Terminado ese proceso asambleario, el proclamado nuevo presidente de la Rep¨²blica de Catalu?a disolver¨ªa ese Parlamento y convocar¨ªa unas elecciones para elegir por ¡°el r¨¦gimen electoral ordinario¡± una Asamblea constituyente con el mismo n¨²mero de miembros (135) que el actual Parlamento catal¨¢n, que quedar¨ªa disuelto. Esa Asamblea constituyente dispondr¨ªa ¡°de plenos poderes para redactar una propuesta de Constituci¨®n, la cual se tiene que aprobar por mayor¨ªa de 3/5 de los miembros del pleno en votaci¨®n final sobre el conjunto del texto¡±. Si no se lograse esa mayor¨ªa, en la segunda votaci¨®n ser¨ªa suficiente con la mayor¨ªa absoluta y, si en ese caso tampoco se consiguiese, se continuar¨ªa discutiendo y votando hasta alcanzarla.

La norma especifica que ¡°ninguna de las decisiones de la Asamblea constituyente, en ejercicio del poder constituyente, ser¨¢n susceptibles de control, suspensi¨®n o impugnaci¨®n por ning¨²n otro poder, juzgado o tribunal¡±. La Asamblea citada se regir¨ªa por lo marcado en esa ley o en su defecto por el reglamento del actual Parlamento catal¨¢n y asumir¨ªa el resto de sus ¡°funciones, facultades y obligaciones, incluida la elecci¨®n del presidente de la Rep¨²blica¡± de Catalu?a.

Norma suprema

La ley que dibuja el camino para elaborar un remedo de Constituci¨®n para Catalu?a se autoconcede el rango de ¡°norma suprema¡± hasta llegar al momento de disponer de esa Constituci¨®n y fija tambi¨¦n un intenso calendario de elecciones y nuevas consultas hasta llegar a su meta.

Sus autores precisan que una vez que la Asamblea constituyente aprobase la propuesta de la nueva Constituci¨®n catalana se deber¨ªa de someter a ratificaci¨®n a trav¨¦s de un nuevo refer¨¦ndum, que se celebrar¨ªa de acuerdo a esa ley y a la legislaci¨®n de consultas referendatarias. Si ese boceto de Constituci¨®n fuese refrendado por los ciudadanos se volver¨ªa a disolver la llamada Asamblea constituyente y se proceder¨ªa a se?alar otra fecha para llamar a las urnas y promover otras elecciones ¡°para la conformaci¨®n del nuevo sistema institucional establecido por la Constituci¨®n¡± catalana. Hasta que se formasen esas instituciones de la Rep¨²blica de Catalu?a la diputaci¨®n permanente de esa Asamblea constituyente fiscalizar¨ªa ¡°la creaci¨®n del nuevo entramado institucional¡± y asumir¨ªa ¡°las funciones, facultades y obligaciones del Parlamento¡±.