Espa?a acepta la petici¨®n de tropas para Afganist¨¢n

El Gobierno espa?ol est¨¢ dispuesto a realizar un gesto ante el llamamiento que EE UU ha hecho a todos sus aliados para que aumenten sus tropas en Afganist¨¢n ante la incapacidad del Ejecutivo de Kabul para controlar el pa¨ªs. Espa?a ya ha decidido prorrogar en 2018 la bater¨ªa de misiles Patriot que tiene desplegada en Turqu¨ªa, cerca de la frontera con Siria y, adem¨¢s, est¨¢ considerando el env¨ªo de unos 30 militares al cuartel general de la OTAN en Kabul, seg¨²n fuentes de Defensa.

El Gobierno contempla con recelo la posibilidad de reabrir el cap¨ªtulo de la presencia militar espa?ola en Afganist¨¢n, que dio por cerrada en octubre de 2015, tras haber gastado 3.700 millones de euros y haber dejado la vida de 99 militares y dos int¨¦rpretes. Pero tampoco quiere mostrarse insolidario ante la petici¨®n que Washington, bilateralmente y a trav¨¦s de la OTAN, ha hecho a sus aliados para que acudan en auxilio del Gobierno de Kabul. Por eso, se propone realizar un gesto que muestre su compromiso con la seguridad aliada pero no hipoteque a las Fuerzas Armadas en un escenario que no forma parte de sus prioridades. De momento, ha decidido prorrogar el destacamento de misiles Patriot, con 140 militares, desplegado desde 2015 en Adana (Turqu¨ªa). Su misi¨®n conclu¨ªa en diciembre, pero Espa?a est¨¢ dispuesta a mantenerla en 2018 ante la falta pa¨ªses voluntarios a relevar en esta misi¨®n a espa?oles e italianos.

Adem¨¢s, Defensa est¨¢ analizando aumentar el peque?o contingente militar que dej¨® en Kabul tras el repliegue de las tropas. La autorizaci¨®n vigente es de 30 efectivos, m¨¢s sus correspondientes apoyos, pero solo ocho est¨¢n adscritos al cuartel general de la OTAN, por lo que Defensa considera que tiene margen para enviar varias decenas de militares sin necesidad de tramitar una nueva autorizaci¨®n. Lo que se descarta es un retorno masivo de tropas o su despliegue fuera de la capital, como suced¨ªa cuando estaban destacados en Herat o Qala-i-Naw.

En la conferencia de generaci¨®n de fuerzas celebrada en junio, Espa?a ya comunic¨® a sus socios de la OTAN que estaba considerando una aportaci¨®n suplementaria a la misi¨®n en Afganist¨¢n, aunque sin concretarla. En realidad, fueron muy pocos pa¨ªses los que concretaron y la mayor¨ªa con cifras muy bajas, como Alemania, que aumentar¨¢ con menos de 40 efectivos. Uno de los que m¨¢s tropas puso sobre la mesa, seg¨²n las fuentes consultadas, fue Portugal, que enviar¨¢ 130 militares para hacerse cargo de la seguridad del aeropuerto de Kabul.

La indefinici¨®n empieza por el promotor de la iniciativa, EE UU, que a¨²n no ha revelado el alcance de su refuerzo. El Pent¨¢gono maneja desde hace meses un aumento de entre 3.000 y 5.000 militares, pero ha pospuesto cualquier anuncio a la aprobaci¨®n de su nueva estrategia para la zona. Otros aliados de peso que en su d¨ªa se retiraron de Afganist¨¢n, como Francia y Canad¨¢, no han dado se?al alguna de que se planteen regresar.