Lagunas y contradicciones de una investigaci¨®n
Las primeras indagaciones han puesto en evidencia debilidades de coordinaci¨®n
Dos semanas despu¨¦s de los atentados de Barcelona y Cambrils (Tarragona), que dejaron 22 muertos ¡ªincluidos seis de los terroristas¡ª y un centenar de heridos, la investigaci¨®n sobre el caso ha logrado indentificar ya a los diez presuntos miembros de la c¨¦lula ¡ªotros dos inicialmente se?alados fueron puestos en libertad sin cargos por el juez Fernando Andreu¡ª, determinar su implicaci¨®n y enviar a prisi¨®n a los dos terroristas supervivientes.
En estos d¨ªas, sin embargo, se han abierto tambi¨¦n m¨²ltiples interrogantes que han dejado al descubierto lagunas en las labores de informaci¨®n, prevenci¨®n y coordinaci¨®n policial. Unas debilidades que el actual clima de crispaci¨®n por el refer¨¦ndum ilegal de independencia en Catalu?a ¡ªprevisto para el pr¨®ximo 1 de octubre¡ª han llevado al primer plano del enfrentamiento pol¨ªtico.
Los que sigue es un resumen de algunos de los principales puntos sobre los que queda pendiente aportar luz y adoptar medidas:
Un im¨¢n radicalizado
De Abdelbaki es Satty, nacido en 1973 en Marruecos, se sabe que mantuvo v¨ªnculos con una c¨¦lula que desde Vilanova i la Geltr¨² (Barcelona) mandaba terroristas a Siria y que fue desmantelada en 2006 con la Operaci¨®n Chacal (aunque en 2011 todos los acusados fueron absueltos por el Tribunal Supremo). Tambi¨¦n que, pese a ser investigado inicialmente ¡ªy su tel¨¦fono pinchado¡ª, su participaci¨®n en esos hechos qued¨® decartada y ni siquiera lleg¨® a ser imputado. Existe igualmente una nota interna de la polic¨ªa que le relaciona de forma vaga con algunos implicados en el 11-M.
En los cuatro a?os siguientes, Es Satty parece entrar en un submundo de marginalidad y peque?a delincuencia. En 2010 es condenado a cuatro a?os de c¨¢rcel por traficar con hach¨ªs, pena que cumple en Castell¨®n. Tras salir de prisi¨®n, viaja en m¨¢s de una ocasi¨®n a Marruecos, se investiga si lo hizo a Austria y est¨¢ confirmado que pas¨® tres meses en B¨¦lgica a principios de 2016. Todo ello antes de recalar en Ripoll (Girona) convertido en im¨¢n.
?Cu¨¢ndo se radicaliz¨® Es Satty? ?Lo estaba ya en 2006 y supo esconderlo? ?O, como otros yihadistas, su radicalizaci¨®n empez¨® tras a?os de marginalidad y prisi¨®n? Si ya lo estaba en 2006, ?c¨®mo pudo ser que ning¨²n servicio de informaci¨®n o inteligencia lo identificara? ?Segu¨ªa ordenes de alguien? ?Cu¨¢l era su relaci¨®n con el Estado Isl¨¢mico (ISIS)? Y otra duda a despejar: ?Ten¨ªan Polic¨ªa Nacional, Guardia Civil o el CNI m¨¢s informaci¨®n de Es Satty que no ha trascendido?
La pregunta de B¨¦lgica
El aparente desconocimiento sobre la vida del im¨¢n tras salir de la c¨¢rcel en 2014 se interrumpe en el primer trimestre de 2016. Es Satty llega a Vildevoord, cuna del yihadismo belga, y despierta sospechas por su actitud entre la propia comunidad musulmana, que alerta a las autoridades. Un polic¨ªa local especialista en la lucha contra la radicalizaci¨®n pide informaci¨®n sobre Es Satty ¡ªseg¨²n los Mossos, por ¡°v¨ªa informal¡±¡ª a un sargento de la polic¨ªa auton¨®mica catalana al que conoce. Otras fuentes policiales califican ese contacto de ¡°bilateral¡± o ¡°de confianza, usado para agilizar tr¨¢mites y basado en el conocimiento mutuo¡±. El mosso contesta por correo electr¨®nico al agente belga m¨¢s de un mes despu¨¦s, en marzo de 2016, y le dice que Es Satty est¨¢ en Ripoll y que no tiene antecedentes de inter¨¦s.
Vista a posteriori, esa comunicaci¨®n es uno de los escasos cabos que hubiera podido poner el foco en las actividades del im¨¢n de Ripoll. En primer lugar, habr¨ªa que saber si hay m¨¢s de un correo electr¨®nico y su contenido. Y despu¨¦s plantearse si, por ejemplo, la polic¨ªa belga debi¨® enviar su petici¨®n por cauces formales para darle m¨¢s entidad. ?Habr¨ªa puesto a alguien sobre la pista? ?Pudo el agente de Informaci¨®n de los Mossos, teniendo en cuenta que Es Satty ya era im¨¢n y la petici¨®n ven¨ªa de un polic¨ªa antirradicalizaci¨®n, ampliar sus indagaciones, incluso compartiendo la informaci¨®n con la Polic¨ªa Nacional o la Guardia Civil? ?Revela todo ello lagunas en las labores de inteligencia, informaci¨®n y coordinaci¨®n policial de las que deben extraerse lecciones?
La pandilla de Ripoll
Ripoll es una localidad de apenas 10.000 habitantes situada en las boscosas estribaciones del Pirineo de Girona. All¨ª crecieron los nueve j¨®venes ¡ªentre 17 y 28 a?os¡ª reclutados por Es Satty. All¨ª los radicaliz¨® a escondidas y desde all¨ª el grupo eligi¨® una localidad situada en la otra punta de Catalu?a, Alcanar ¡ªen Tarragona, a 300 kil¨®metros¡ª, para convertir una casa ocupada en su centro de operaciones.
Pese a que los Mossos visitaron en varias ocasiones la mezquita, Es Satty tuvo gran habilidad para captar en secreto a los j¨®venes y transmitirles una forma de actuar marcada por la discreci¨®n. Ni siquiera sus familiares conoc¨ªan su fanatizaci¨®n, seg¨²n han asegurado estos d¨ªas.
Un im¨¢n (con antecedentes) llegado de B¨¦lgica, 10 j¨®venes, centenares de bombonas de butano, 500 litros de acetona, una casa okupada... Nada alert¨® a nadie. El asunto es complejo e involucra a varias ¨¢reas de actuaci¨®n ¡ªpol¨ªticas de proximidad, de asuntos religiosos, inteligencia, informaci¨®n, vigilancia...¡ª, pero abre un abanico de preguntas: ?Por qu¨¦ el im¨¢n despert¨® sospechas en B¨¦lgica y no en Espa?a? ?Por qu¨¦ no se ha desarrollado el Plan Nacional contra la Radicalizaci¨®n Violenta de 2015 que coordina precisamente todas esas acciones? ?Disponen los cuerpos policiales de suficientes recursos? Fuentes de la Generalitat han admitido que Ripoll era considerada una ¡°zona fr¨ªa¡± en el radicalismo isl¨¢mico.
El aviso de la CIA
El 25 de mayo de este a?o, los Mossos recibieron un aviso de una fuente de inteligencia que les alertaba de la posible comisi¨®n de un atentado yihadista este verano en La Rambla de Barcelona. Ese mismo aviso lo recibieron los organismos de la lucha antiterrorista del Gobierno central, que aseguran que proven¨ªa de la CIA, la agencia de espionaje de EE?UU. La noticia fue publicada por El Peri¨®dico de Catalunya tras el atentado del 17 de agosto en La Rambla, y responsables de la Generalitat y de los Mossos la desmintieron repetidas veces. Esta semana se vieron obligados a confirmar que s¨ª hab¨ªan recibido el aviso, aunque sostuvieron que no proven¨ªa de la CIA y alegaron que ni ellos ni el CNI le dieron credibilidad.
La reacci¨®n a los ataques teroristas en otros pa¨ªses
Dos datos podr¨ªan resumir la reacci¨®n de Estados Unidos tras el 11-S de 2001. Walmart vendi¨® 116.000 banderas nacionales ese d¨ªa y, al siguiente, 250.000, cuando las ventas habituales estaban de 6.000 a 10.000 diarias.
El informe final de la comisi¨®n de investigaci¨®n que examin¨® los fallos de inteligencia, publicado en 2004, se convirti¨® en un superventas. A los tres d¨ªas, el 14 de septiembre, el Congreso dio luz verde con una aplastante mayor¨ªa a la autorizaci¨®n del uso militar en la guerra contra el terrorismo y a la invasi¨®n de Afganist¨¢n.
La primera reacci¨®n pol¨ªtica que hubo en Berl¨ªn despu¨¦s del atentado terrorista del tunecino Anis Amri, el 19 de diciembre de 2016, en un mercadillo navide?o y que dejo un saldo de 12 muertes, sucedi¨® dos d¨ªas despu¨¦s, frente a la sede del Gobierno. Un millar de personas se congregaron para lanzar consignas contra la canciller Angela Merkel, a quien hicieron responsable indirecta de la matanza a causa de su generosa pol¨ªtica de asilo. ¡°Merkel tiene las manos manchadas de sangre¡±, gritaron.
B¨¦lgica puso en marcha, en un clima de consenso, una comisi¨®n de investigaci¨®n parlamentaria sobre los ataques contra el metro y el aeropuerto de Bruselas poco despu¨¦s del atentado, que caus¨® 32 muertos y centenares de heridos. Se entrevist¨® a m¨¢s de 140 pol¨ªticos, mandos policiales y judiciales, l¨ªderes religiosos o v¨ªctimas en 50 sesiones.
En Francia se cre¨® una comisi¨®n parlamentaria (la tercera) liderada por un diputado socialista y otro conservador tras los atentados de Par¨ªs (enero y noviembre) de 2015.?/ AMANDA MARS / ANA CARBAJOSA / ?LVARO S?NCHEZ / SILVIA AYUSO.
No est¨¢ claro que otra actitud ante ese aviso hubiera podido evitar el atentado ¡ªentre otras cosas, porque este fue improvisado a ¨²ltima hora por los terroristas, cuyo plan era otro¡ª, pero las versiones contradictorias de los Mossos han dado lugar a una bronca pol¨ªtica. Adem¨¢s, queda por dilucidar si realmente nadie dio relevancia a un aviso que s¨ª la ten¨ªa.
Alcanar, el centro de mando
Eran las 23.17 del 16 de agosto cuando una enorme explosi¨®n, audible a una decena de kil¨®metros, demoli¨® el chal¨¦ F9 de la urbanizaci¨®n Montecarlo de Alcanar. Hubo dos muertos ¡ªentre ellos el im¨¢n, aunque uno de los cuerpos no se hall¨® hasta muchas horas despu¨¦s¡ª y un herido grave. Las primeras 26 bombonas de butano halladas y el olor a acetona llevaron a los agentes a pensar en un laboratorio de droga.
Junto a la casa tambi¨¦n hab¨ªa una moto de Mohamed Hychamy y un Peugeot 306 de El Houssaine Abouyaaqou, ambos domicilados en Ripoll. Con todos estos elementos, ?hab¨ªa razones para actuar m¨¢s r¨¢pido y destinar m¨¢s agentes a investigar el caso? Una nota interna de la Guardia Civil (GEDEX de Tarragona) se?ala las veces que llamaron a los Mossos para informarse de lo ocurrido. ¡°Les dicen que nada y no les dejan investigar¡±, aseguran.
Los Mossos d'Esquadra han ofrecido informaciones contradictorias. El mayor de los Mossos, Josep LLu¨ªs Trapero, asegur¨® el pasado lunes que l guardia civil no ofreci¨® ayuda que ¡°alguien se la hab¨ªa inventado¡±. Tres d¨ªas antes, sin embargo, el inspector Albert Oliva, portavoz de los Mossos, hab¨ªa afirmado que la polic¨ªa catalana hab¨ªa declinado la inspecci¨®n por parte de la Guardia Civil porque era innecesaria.
Seg¨²n los expertos, existe un protocolo de inspecci¨®n ocular para polic¨ªa cient¨ªfica y TEDAX que se basa en la adopci¨®n de medidas en funci¨®n de lo encontrado. Una primera pregunta es por qu¨¦ nadie interrog¨® al herido en el hospital. Seg¨²n el protocolo, ¡°si se sospecha que puede tratarse de un laboratorio de drogas, debe avisarse al grupo de estupefacientes para que lo haga y, en su caso, lo detenga¡±, explica un alto mando de la polic¨ªa cient¨ªfica. ?Se interrog¨® a los vecinos acerca de los moradores? ?Se busc¨® al propietario de la casa? ?Alguien comprob¨® las matr¨ªculas de los veh¨ªculos apostados a la puerta?
Pasaron 17 horas hasta la siguiente explosi¨®n, casi simult¨¢nea al atropello masivo perpetrado por Younes Abouyaaqoub en La Rambla. Caus¨® un enorme hongo de polvo visible a kil¨®metros. Los Mossos informaron de que fue una chispa provocada por ¡°una m¨¢quina retroexcavadora¡± que estaba removiendo los escombros, que incendi¨® una bolsa de gas enterrada, la que caus¨® la explosi¨®n. Ocho heridos.
El atropello de La Rambla
La casa Alcanar pas¨® de ser un potencial laboratorio de drogas a un enclave terrorista en cuesti¨®n de minutos. La documentaci¨®n encontrada en la furgoneta que arras¨® La Rambla, el pasaporte del melillense Mohamed Houli Chemlal, el herido grave de la primera explosi¨®n y que entonces ya s¨ª fue detenido, conecto los hechos. Al mismo tiempo en Alcanar aparec¨ªan restos de otro cuerpo, un centenar de bombonas m¨¢s, un libro verde con el nombre del im¨¢n a modo de manual yihadista, un manuscrito y unos billetes de avi¨®n a su nombre con destino Bruselas, adem¨¢s de agua oxigenada, pulsadores, fundas de almohada, torniller¨ªa¡ ¡°Estaban preparando un atentado mayor que se ha evitado con la explosi¨®n¡±, explic¨® Josep LLu¨ªs Trapero a las once de la noche en su primera comparecencia. Este afirm¨® horas antes del ataque de Cambrils que no se esperaban nuevos atentados, lo que parece indicar que a esa hora los Mossos a¨²n no sab¨ªan que hab¨ªa cinco terroristas huidos sin identificar.
La preparaci¨®n de Cambrils
Uno de ellos, Mohamed Hichamy ¡ªel due?o de la moto de Alcanar¡ª, hab¨ªa sufrido a primera hora de la tarde un accidente en el kil¨®metro 265 de la autopista AP-7, tras el que huy¨® a pie hasta un ¨¢rea de servicio, en la que esper¨® a sus compinches. En las siguientes horas, el grupo visit¨® hasta en cuatro ocasiones la gasolinera, pas¨® varias horas en un restaurante abandonado en Riudecanyes y compr¨® cinco cuchillos y un hacha en una tienda de Cambrils. No fueron identificados por cuerpo de seguridad alguno.
Disparar a matar
Los cinco terroristas que perpetraron el atentado de Cambrils fueron abatidos por los Mossos d¡¯Esquadra, cuatro de ellos por un mismo agente. ¡°Fue una actuaci¨®n ejemplar. En aquel momento, en una zona urbana, con el atropello de Barcelona fresco y portando cinturones sospechosos [que luego resultaron ser falsos], era la ¨²nica alternativa¡±, explican fuentes de la investigaci¨®n presentes en la zona.
La muerte de Younes Abouyaaqoub, el autor del atropello de La Rambla, cuatro d¨ªas m¨¢s tarde en Subirats ha sido interpretada de forma distinta por los expertos. Tras cuatro d¨ªas huyendo, solo, hab¨ªa ido a la zona a buscar lo que pensaba que pod¨ªa ser su ¨²ltima oportunidad. Llam¨® a la ventana de una casa de un supuesto conocido pero el nuevo inquilino coment¨® el suceso a un vecino y este alert¨® a la polic¨ªa. Abouyaaqoub trat¨® de ocultarse en un vi?edo, donde fue descubierto. Se abri¨® la camisa, mostr¨® otro cintur¨®n y grit¨® ?Allahu akba!.
¡°En un espacio abierto, sin riesgo para terceras personas, hay f¨®rmulas para contener a un hombre desarmado sin poner a los agentes en riesgo y hab¨ªa el precedente de los cinturones falsos¡±, explica una fuentev policial. ¡°La muerte de Abouyaaqoub ha dejado a los investigadores sin una posible fuente de informaci¨®n de gran importancia¡±, dice otra fuente de la lucha antoterrorista.
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