Antonio Hern¨¢ndez-Gil: ¡°El respeto al derecho no basta para regular la convivencia¡±
El catedr¨¢tico de Derecho Civil de la UNED recibe el XXIII Premio Pelayo a juristas de prestigio
Antonio Hern¨¢ndez-Gil ?lvarez-Cienfuegos (Burgos, 1953), abogado y catedr¨¢tico de Derecho Civil de la Universidad Nacional de Educaci¨®n a Distancia, ha afirmado este martes en su discurso de aceptaci¨®n del XXIII Premio Pelayo a juristas de reconocido prestigio que ¡°el respeto al derecho, necesario hasta para cambiarlo, no basta para regular la convivencia¡± y ha se?alado que los juristas les corresponde ser ¡°cart¨®grafos¡± del ¡°atlas de un mundo dif¨ªcil¡± de las reformas institucionales ¡°antes de que sea demasiado tarde¡±.
Cuarenta a?os despu¨¦s de la aprobaci¨®n de la Constituci¨®n, Espa?a se enfrenta a retos no menos graves que los que afrontaba la sociedad de la Transici¨®n, ha afirmado Hern¨¢ndez-Gil. ¡°La desigualdad no solo ha aumentado, sino que est¨¢ cristalizando, haci¨¦ndose irreversible para demasiadas personas; la corrupci¨®n en la vida p¨²blica y privada; la insuficiencia del marco auton¨®mico; la desafecci¨®n de unos ciudadanos que se desentienden del v¨ªnculo que deb¨ªa unirlos a sus representantes p¨²blicos; la incapacidad de articular una respuesta concertada y m¨ªnimamente humana a los problemas de la migraci¨®n y sus causas¡ Para todo debe haber una respuesta desde el derecho¡±, ha reclamado.
El galardonado, hijo del expresidente del Supremo Antonio Hern¨¢ndez-Gil, a quien ha definido como ¡°uno de los padres olvidados de la Constituci¨®n¡±, ha se?alado que reformar la Carta Magna, ¡°ser¨¢ m¨¢s f¨¢cil que imprimirla de nuevo en el ideario de la parte de m¨¢s reticente de una ciudadan¨ªa que, por olvido, ignorancia o desafecci¨®n sincera, no se identifica con ella¡±. Mientras se logra un consenso id¨®neo para reformar la norma fundamental, ha recordado, ¡°el ordenamiento jur¨ªdico que preside tiene que observarse y hacerse observar, aunque no sea suficiente¡±.
Con la vista puesta en el desaf¨ªo independentista catal¨¢n, aunque sin citarlo, el catedr¨¢tico y abogado ha citado a Salvador Espr¨ªu, y ha manifestado que, en todo lo que no es derecho, todo pasa por ¡°hacer seguros los puentes del di¨¢logo e intentar comprender y amar las diversas razones y las hablas de Sefarad¡±. Actualmente, ha se?alado, ¡°hay m¨¢s palabras que sabios, m¨¢s ruido que m¨²sica, m¨¢s reivindicaciones locales que valores e integraci¨®n europea, m¨¢s ambiciones de poder que ideas¡±.
Hern¨¢ndez Gil, miembro de la Real Academia de Jurisprudencia y Legislaci¨®n, ejerce la abogac¨ªa desde 1974 en materias civiles y mercantiles y entre 2007 y 2012 fue decano del Colegio de Abogados de Madrid. La fiscal del Tribunal Supremo Consuelo Madrigal ha realizado la semblanza del galardonado, de quien ha destacado su rigor t¨¦cnico y su formaci¨®n jur¨ªdica original.
Madrigal ha recordado c¨®mo, siendo estudiante de Derecho, mientras sus compa?eros decoraban sus habitaciones con posters de los Rolling Stones, Bob Dylan o el Che Guevara, su cuarto estaba presidido por la fotograf¨ªa de un se?or muy serio con traje y corbata. ¡°Pensaba que se tratar¨ªa de un t¨ªo o un abuelo, pero era [Hans] Kelsen¡±, jurista y fil¨®sofo austriaco, autor de la Teor¨ªa General del Estado (1925), ha recordado Madrigal. Hern¨¢ndez-Gil se licenci¨® con 20 a?os con premio nacional de fin de carrera y premio extraordinario de doctorado.
Fiscales como Mariano Fern¨¢ndez Bermejo, Javier Moscoso, Eduardo Torres Dulce o Juan Ortiz ?rculo, o magistrados como Jacobo L¨®pez Varjas de Quiroga o C¨¢ndido Conde Pumpido han escuchado la semblanza pronunciada por Madrigal, que ha abarcado los ensayos, los art¨ªculos o la sensibilidad art¨ªstica, como m¨²sico, del premiado.
El premio, dotado con 30.000 euros, ha tenido como presidente del jurado a Landelino Lavilla, consejero permanente de Estado. Entre los galardonados de ediciones anteriores figuran, entre otros el ex fiscal general del Estado, Eduardo Torres-Dulce, el consejero de Estado Fernando Ledesma, o los fallecidos catedr¨¢ticos Francisco Rubio Llorente o Gregorio Peces-Barba.
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