Un posible cambio y seis incertidumbres

El mapa electoral en Catalu?a que refleja el sondeo preelectoral de Metroscopia dibuja una distribuci¨®n doblemente sim¨¦trica entre los bloques soberanista (46% de los votos) y constitucionalista (id¨¦ntico 46% de los votos) y dentro de cada bloque una relaci¨®n de dos a uno entre ERC y JxCAT en el primero, y entre Ciudadanos Y PSC, en el segundo. En ambos casos, dos partidos con menor apoyo (CUP y PP) servir¨ªan para completar, casi en los m¨¢rgenes, cada uno de los bloques. Un modelo,pues, de tres partidos en los dos espacios: un partido l¨ªder, con menos del 30% de los votos (ERC y Ciudadanos), un partido mediano en posici¨®n subalterna (PSC y JXCAT) con el 14-15% de los votos y a 10 puntos del dominante y un partido de acompa?amiento (PP y CUP) con menos del 10%.

Este modelo de ¡°empate pol¨ªtico¡± entre los dos bloques concede a los Comunes una funci¨®n de arbitraje. Ello implica una variaci¨®n sustancial con respecto al modelo anterior que otorg¨® esa potestad a la CUP. Se pasar¨ªa as¨ª de un ¨¢rbitro situado dentro del ¨¢mbito soberanista a otro que actuar¨ªa desde fuera de ambos espacios y con conexiones bidireccionales: hacia el PSC por un lado, hacia ERC por el otro.

A partir de los datos del sondeo las elecciones del 21-D se presentan repletas de incertidumbres que constituyen para los distintos electorados un cuadro de incentivos sumamente atractivo y complejo.

La primera de ellas es cu¨¢l de los dos bloques, el soberanista y el constitucionalista, obtendr¨¢ mayor¨ªa en votos el 21-D. La ¨²nica gran certeza es que el bloque soberanista dispondr¨¢ de m¨¢s esca?os que el constitucionalista en virtud de la sobrerrepresentaci¨®n que la ley electoral le otorga sobre todo en Girona y Lleida.

La segunda incertidumbre es saber si el bloque soberanista (hoy con 72 diputados) superar¨¢ finalmente la mitad m¨¢s uno de los esca?os (68) que suponen la mayor¨ªa aritm¨¦tica en el Parlament.

La tercera incertidumbre es con cu¨¢ntos esca?os podr¨ªan estar en condiciones de ejercer los Comunes su funci¨®n arbitral: tuvieron 11 en 2015. En este momento se les estiman 8.

La cuarta incertidumbre es qu¨¦ distancia separar¨¢ a ERC y JxCAT dentro del espacio soberanista: de ella depender¨¢ la hegemon¨ªa en el posproc¨¦s y el complicado futuro de la antigua Convergencia.

La quinta incertidumbre es c¨®mo quedar¨ªan fijadas las posiciones en el espacio constitucionalista entre Ciudadanos y el PSC. Ambas formaciones parecen hallarse en fase ascendente (el PSC puede ganar 3 diputados y Ciudadanos hasta 10) pero la diferencia puede ensancharse de los actuales 9 a 16, concediendo a Ciudadanos un liderazgo pol¨ªtico m¨¢s rotundo.

Y queda a¨²n una sexta y ¨²ltima incertidumbre: qui¨¦n ser¨¢ el ganador aritm¨¦tico en votos, algo impensable meses atr¨¢s pero real hoy porque la distancia en voto estimado entre ERC y Ciudadanos apenas es de un punto porcentual (26,5%/25.3%). El logro y el peligro de ese sorpasso constituyen un sutil incentivo para los electorados en ambos espacios: incentivar el voto hacia ERC dentro del espacio soberanista para evitarlo, incentivar el voto a Ciudadanos en el espacio constitucionalista para que, finalmente, se produzca, con la carga simb¨®lica que ello conllevar¨ªa.