La Fiscal¨ªa considera delito leve de amenazas el escrache ultra ante la casa de M¨®nica Oltra

La Fiscal¨ªa ve delito en el escrache protagonizado por un grupo de ultras ante la casa de la vicepresidenta del Gobierno valenciano, M¨®nica Oltra, que tuvo lugar el 18 de octubre. El ministerio p¨²blico descarta que se trate de un delito de amenazas grave o de des¨®rdenes p¨²blicos, como hab¨ªa denunciado la Abogac¨ªa de la Generalitat. Pero s¨ª cree que los hechos constituyen un delito leve de amenazas, que est¨¢ penado con entre uno y tres meses de multa y acarrea antecedentes penales.

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Entre otros motivos porque al congregarse frente a su vivienda mientras cenaba con sus hijos, los ultras enviaron "a la v¨ªctima el mensaje de que sabe donde viven tanto ella como sus familiares m¨¢s pr¨®ximos" y porque el partido que promovi¨® la acci¨®n, Espa?a 2000, defiende "posturas xen¨®fobas y racistas", razona la fiscal.

El decreto firmado por Teresa Gisbert, fiscal jefe de la Fiscal¨ªa Provincial de Valencia, remite a los Juzgados de Ll¨ªria las diligencias instruidas por la fiscal Macarena Correro, de la secci¨®n de Tutela penal de la igualdad y contra la discriminaci¨®n, y solicita la celebraci¨®n de juicio oral.

Los hechos se produjeron hacia las 21.30 de la noche de un mi¨¦rcoles. Durante 10 minutos, los ultras gritaron a la vicepresidenta utilizando un sistema de megafon¨ªa, desplegaron una bandera de Espa?a e hicieron sonar la canci¨®n Que viva Espa?a. Todos, salvo Jos¨¦ Luis Roberto, presidente de Espa?a 2000 y due?o de la empresa Levantina de Seguridad, llevaban puestas caretas de la pel¨ªcula de terror Scream, se?ala la fiscal en su relato de los hechos.

La denuncia recalca que los ultras grabaron y retransmitieron su acci¨®n en directo a trav¨¦s de la p¨¢gina en Facebook del partido pol¨ªtico. Entre otras manifestaciones, dijeron estar all¨ª "contra estos independentistas que quieren romper la unidad de Espa?a". "La actuaci¨®n termin¨® tras aparecer varias personas [allegadas a Oltra] que procedieron a grabar con sus tel¨¦fonos m¨®viles a las personas y veh¨ªculos que se encontraban en el lugar de los hechos", prosigue la fiscal.

Los hechos no alcanzan la categor¨ªa del delito de amenazas recogido en el art¨ªculo 172 del C¨®digo Penal porque este exige que la conducta se realice "de forma insistente y reiterada", "alterando con ello de forma grave el desarrollo de la vida cotidiana de la persona que lo sufre".

Intenci¨®n intimidatoria

La fiscal s¨ª considera, en cambio, que la actuaci¨®n excedi¨® "el ¨¢mbito de la libertad de expresi¨®n" y tuvo "una intenci¨®n claramente intimidatoria". El ministerio p¨²blico llega a tal conclusi¨®n por el hecho de que fueran a su vivienda, ubicada en una zona residencial, a una hora en la que era previsible que se hallara con su familia en vez hacer sus manifestaciones ante su despacho de la Generalitat o "en cualquiera de los actos p¨²blicos en los que participa, bien como vicepresidenta del Consell o bien como miembro del partido pol¨ªtico Comprom¨ªs".

Tambi¨¦n como consecuencia de la "escenograf¨ªa elegida", con los "rostros ocultos y portando m¨¢scaras de una conocida pel¨ªcula de terror".

El hecho de que el ¨²nico que no iba tapado fuera el l¨ªder de Espa?a 2000 constituye, seg¨²n el ministerio p¨²blico, un "dato para nada improvisado", dado el car¨¢cter racista del partido, que difunde lemas como "los espa?oles primero" y aboga en su programa electoral por la "abolici¨®n de la ley de inmigraci¨®n y el derecho de preferencia nacional". La fiscal considera que los denunciados "ten¨ªan clar¨ªsimo que quer¨ªan que la se?ora Oltra y su familia supieran quienes eran quienes se congregaban en la puerta de su casa. La propia se?ora Oltra as¨ª lo manifest¨® al se?alar que se sinti¨® intimidada porque estaban sus hijos, ya que proceden de fuera de Espa?a y 'estas personas son racistas", se?ala la denuncia aludiendo a que los hijos de la vicepresidenta fueron adoptados en el extranjero.