Un preso que estuvo 1.711 d¨ªas encarcelado por el 11-S reclama 1,8 millones a la justicia espa?ola

Farid Halali, alias Shakur, uno de los hombres que m¨¢s atenci¨®n despert¨® en los servicios de informaci¨®n de todo el mundo, en especial de la CIA y el FBI norteamericanos, reclama a la justicia espa?ola una indemnizaci¨®n de 1,8 millones de euros tras haber pasado 1.711 d¨ªas en la c¨¢rcel y acabar siendo declarado inocente.

En 2001, semanas antes del 11-S, el marroqu¨ª hab¨ªa telefoneado al salafista sirio espa?ol Imad Eddin Barakat, Abu Dahdah, y en una cr¨ªptica conversaci¨®n le comunic¨® que ¡°hab¨ªan entrado en el campo de la aviaci¨®n¡± y que ¡°hab¨ªan degollado el p¨¢jaro¡±. Polic¨ªas y fiscales espa?oles interpretaron que esta persona hab¨ªa tenido alguna relaci¨®n o conocimiento de los ataques contra las Torres Gemelas de Nueva York que causaron 3.000 muertos.

Una frase: "Hemos entrado en el campo de la aviaci¨®n y degollado el p¨¢jaro" origin¨® el caso

El Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) acaba de reconocer que ha habido un funcionamiento anormal de la Administraci¨®n de la Justicia en este caso y da la raz¨®n al marroqu¨ª. El Ministerio de Justicia deber¨¢ ahora acordar la cantidad con la que se indemniza a Farid Hilali en concepto de responsabilidad patrimonial del Estado.

Barakat, el receptor de la llamada, era un pez muy gordo para los servicios de inteligencia. Por orden del juez Baltasar Garz¨®n su tel¨¦fono llevaba meses intervenido y, tras el atentado en EE UU, se descubri¨® que sus datos personales estaban anotados en la agenda de uno de los miembros del comando yihadista que viv¨ªa en Hamburgo (Alemania) con el l¨ªder del comando terrorista suicida, el egipcio Mohamed Atta.

Durante a?os fue un misterio saber qui¨¦n estaba detr¨¢s del alias Skakur, del hombre que supuestamente hab¨ªa anunciado por tel¨¦fono el atentado m¨¢s grave perpetrado contra EE UU desde Pearl Harbor. Hasta que a?os despu¨¦s se le identific¨® como Farid Halali, un marroqu¨ª detenido en Reino Unido en 2003 por inmigraci¨®n ilegal. Garz¨®n dict¨® en 2004 una orden de detenci¨®n y pidi¨® su extradici¨®n a Espa?a por estos hechos. La prensa internacional, incluyendo EL PA?S, se hizo eco de la noticia.

El Consejo General del Poder Judicial reconoce que hubo funcionamiento anormal de la Justicia

Halali permaneci¨® preso en Londres durante 1.320 d¨ªas hasta que fue extraditado a Espa?a e ingres¨® en la prisi¨®n de Soto del Real en febrero de 2008. En esas fechas el Juzgado Central de Instrucci¨®n n¨²mero cinco decret¨® prisi¨®n provisional incondicional y sin fianza porque, aleg¨®, ¡°los hechos pueden ser constitutivos de m¨²ltiples delitos de conspiraci¨®n para asesinatos terroristas a trav¨¦s de la organizaci¨®n terrorista Al Qaeda¡±. Un a?o despu¨¦s fue puesto en libertad bajo fianza con la obligaci¨®n de comparecer cada d¨ªa ante la Audiencia Nacional.

En suelo espa?ol Halali estuvo preso otros 391 d¨ªas. Nada m¨¢s salir en libertad fue detenido y se le inco¨® un expediente de expulsi¨®n. El sumario concluy¨® en mayo de 2012 y en octubre de ese mismo a?o la Secci¨®n Tercera de la Audiencia Nacional estim¨® su recurso y dict¨® auto de sobreseimiento libre que no fue recurrido por la fiscal¨ªa. Los jueces estimaron que no hab¨ªa pruebas de que Halali tuviera conocimiento de los atentados del 11-S. Es decir, que el delito por el que hab¨ªa estado preso tanto tiempo nunca se produjo. No existi¨®.

La defensa de Halali reclama ahora al Estado, a trav¨¦s del Consejo General del Poder Judicial, 1,8 millones de euros por la prisi¨®n indebida y los padecimientos de la causa. Esgrime que el caso judicial dur¨® ocho a?os y medio, de los cuales cuatro a?os, ocho meses y 10 d¨ªas estuvo privado de libertad. Durante tres a?os y ocho meses tuvo que comparecer ante el Juzgado, se le prohibi¨® salir del pa¨ªs y no pudo obtener permiso de residencia y trabajo. Esto le impidi¨® conseguir una ocupaci¨®n laboral o subsidios.

¡°Esta situaci¨®n no solo le confin¨® en un limbo legal, sino que le acarre¨® tanto a ¨¦l como a su esposa, una angustia justificada ante la posibilidad de ser deportado a Marruecos, donde [m¨¢s tarde] ser¨ªa internado en prisi¨®n y sometido a torturas por el simple hecho de haber sido imputado como terrorista¡±, se?ala el escrito de reclamaci¨®n dirigido al Ministerio de Justicia y al CGPJ.

Imad Eddin Barakat, considerado como uno de los fundadores de Al Qaeda en Espa?a, fue condenado a 12 a?os de prisi¨®n por pertenencia a organizaci¨®n terrorista, pero el Tribunal Supremo anul¨® la condena por conspiraci¨®n para cometer el 11-S. Sobre la frase de ¡°que hab¨ªan degollado al p¨¢jaro¡± el alto tribunal sentenci¨® que ¡°solamente por v¨ªa de deducci¨®n no puede obtenerse la conclusi¨®n alcanzada por los jueces¡±. Barakat cumpli¨® integra su condena.