Ocho a?os de c¨¢rcel por la violaci¨®n m¨²ltiple de una joven de 19 a?os en Valencia

La Audiencia de Valencia ha condenado a tres hombres por la violaci¨®n m¨²ltiple de una joven de 19 a?os. La Secci¨®n Segunda de la Audiencia impone a dos de ellos penas de ocho a?os de c¨¢rcel y condena al tercero a cinco a?os de prisi¨®n tras rechazar que las relaciones sexuales fueron consentidas.

Los condenados, que entonces ten¨ªan entre 19 y 24 a?os y antecedentes penales, se encontraron con la v¨ªctima en la discoteca Oasis de Riba-roja, donde ella trabajaba como relaciones p¨²blicas, la noche del 2 al 3 de junio de 2012. Uno la conoc¨ªa porque hab¨ªan salido juntos brevemente tiempo atr¨¢s. Despu¨¦s de hablar un rato, y sin que ella lo supiera, introdujeron en su bebida una "sustancia no concretada" que le hizo "perder el sentido de la voluntad", subraya el fallo.

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El producto no fue detectado en el an¨¢lisis de orina que le hicieron al d¨ªa siguiente. El tribunal considera que ello "no resulta trascendente" dado que hab¨ªan pasado al menos 12 horas desde que la sustancia le fue suministrada, y destaca que el test tampoco reflej¨® el consumo de alcohol, pese a que nadie ha discutido que bebi¨®.

La v¨ªctima declar¨® en el juicio que desde que la drogaron hasta la tarde del d¨ªa siguiente apenas recuerda lo que sucedi¨®. Solo consigue recuperar "flashes"; "me sent¨ªa como una marioneta". Una amiga suya testific¨® que la joven bebi¨® esa noche un cubata de cazalla, lima y fresa, en la que los condenados le metieron algo, porque los vio trastear con la copa y re¨ªrse. La amiga a?adi¨® que tir¨® el segundo cubata de la v¨ªctima cuando le quedaba la mitad al ver el estado en que se encontraba. "No se ten¨ªa en pie. Parec¨ªa que se hubiera bebido la discoteca entera".

Aprovech¨¢ndose de su estado, los hombres convencieron a la joven de que los acompa?ara. La subieron a un coche y la llevaron a su apartamento, situado en el barrio de Orriols, en Valencia, al que llegaron a las 8.09 de la ma?ana, como recogi¨® una c¨¢mara de seguridad. All¨ª la violaron vaginal, oral y analmente.

La v¨ªctima asegur¨®, por las secuencias fragmentadas que recuerda, que le hablaban "de forma despectiva". Y que, a pesar de que al d¨ªa siguiente comprob¨® que le hab¨ªan arrancado las extensiones del pelo, no es consciente de haber experimentado dolor.

A las 16.58 horas del 3 de junio dos de los acusados la llevaron a casa de sus padres. La mujer asegur¨® que decidi¨® hacerse "la loca" y no mencionar la violaci¨®n para que no le hiciesen "da?o". Ten¨ªa las medias y el vestido rotos, y no hab¨ªa podido encontrar el m¨®vil, el bolso ni los zapatos. Sali¨® del piso de los condenados con unas "zapatillas de estar por casa". Despu¨¦s de pasar un tiempo caminando arriba y abajo por el pasillo del hogar paterno, lo que gener¨® la preocupaci¨®n de su madre, le cont¨® que la hab¨ªan violado. La madre se la llev¨® a comisar¨ªa y denunciaron el caso.

Los tres hombres ¡ªque antes de 2012 hab¨ªan sido condenados, uno de ellos por robo, otro por hurto y el tercero por lesiones y violencia de g¨¦nero¡ª alegaron en el juicio que las relaciones fueron "totalmente consentidas y era ella la que llevaba la iniciativa", "la que propon¨ªa". El tribunal concluye, sin embargo, que los abusos sexuales continuados se cometieron en la modalidad que describe el apartado segundo del art¨ªculo 181 del C¨®digo Penal: "Anulando la voluntad de la v¨ªctima mediante el uso de f¨¢rmacos, drogas o cualquier otra sustancia natural o qu¨ªmica id¨®nea a tal efecto".

"S¨ª ha de ser inequ¨ªvocamente s¨ª"

"No puede aceptarse el consentimiento en la relaci¨®n m¨¢s que cuando existe una expresa aceptaci¨®n de la relaci¨®n por parte de ambos, m¨¢s all¨¢ incluso de que pudiera haber duda razonable sobre la negativa t¨¢cita. No se trata tanto de aceptar el eslogan no es no, sino de asumir la consecuencia de que s¨ª ha de ser inequ¨ªvocamente s¨ª", establece el fallo, contra el que cabe recurso de casaci¨®n ante el Tribunal Supremo.

"Mediar el consentimiento", prosiguen los magistrados Jos¨¦ Mar¨ªa Tom¨¢s T¨ªo, Mar¨ªa Dolores Hern¨¢ndez y Vicente Jos¨¦ Mart¨ªnez, "equivale a la prestaci¨®n real y efectiva del mismo", sin que quepa "presunci¨®n alguna de su concurrencia, ni siquiera por actos externos con apariencia de tales, cuyo significado insinuante no atribuye licencia para alcanzar conductas como las descritas y menos a¨²n ante la evidencia de las limitaciones derivadas de su desorientaci¨®n".