Rajoy toma las riendas de la negociaci¨®n de los Presupuestos
El presidente afronta un mes clave de negociaciones para la estabilidad de la legislatura
Mariano Rajoy toma las riendas de la negociaci¨®n de los Presupuestos desde esta semana. El l¨ªder del PP tiene hasta finales de abril para convencer a Andoni Ortuzar e I?igo Urkullu de que el PNV se una a PP, Ciudadanos, Foro, UPN y CC para tumbar las enmiendas a la totalidad del proyecto. Para atraer al presidente de NC, Rom¨¢n Rodr¨ªguez, tiene hasta mayo, cuando necesitar¨¢ 176 votos contra las enmiendas parciales. Culminar un pacto con siete partidos asegurar¨ªa la legislatura e impulsar¨ªa al PP en las elecciones de 2019. Pero no todo est¨¢ en manos de Rajoy: mientras los independentistas no formen Gobierno en Catalu?a, se mantendr¨¢n el 155 y el veto del PNV a negociar.
¡°El Gobierno apela a la responsabilidad de todas las fuerzas pol¨ªticas para que defiendan el inter¨¦s general de los ciudadanos, sean ¨²tiles a la sociedad y, de manera compartida apoyen estos Presupuestos¡±. Esta petici¨®n del portavoz del Gobierno, ??igo M¨¦ndez de Vigo, tras el Consejo de Ministros extraordinario del martes, tendr¨¢ su traducci¨®n en el trabajo personal que emprender¨¢ ahora Mariano Rajoy para que los Presupuestos sean compartidos. No se parte de cero, porque el presidente ya ha tenido contactos sin publicidad con representantes del m¨¢s alto nivel de los partidos a los que necesita para sacar adelante las cuentas de 2018. La vicepresidenta del Gobierno, Soraya S¨¢enz de Santamar¨ªa, tambi¨¦n ha estado y contin¨²a implicada en conseguir los apoyos necesarios. Y la agenda del Ejecutivo empieza a gravitar alrededor de unas negociaciones fundamentales para asegurar la estabilidad de la legislatura.
El martes, el ministro de Hacienda, Crist¨®bal Montoro, explicar¨¢ exhaustivamente el proyecto tras entreg¨¢rselo a la presidenta del Congreso, Ana Pastor. El mi¨¦rcoles, Rajoy recibir¨¢ en La Moncloa a una delegaci¨®n de Las Kellys, el colectivo de camareras de piso que reivindica una mejora de sus condiciones de trabajo, todo un gui?o a Nueva Canarias. Y durante la semana es previsible que el gabinete presidencial reciba una llamada de Rom¨¢n Rodr¨ªguez, el presidente de los nacionalistas canarios para resolver los compromisos pol¨ªticos pendientes del acuerdo sobre los Presupuestos de 2017 ¡ªestatuto de Canarias, r¨¦gimen econ¨®mico y fiscal o sistema electoral¡ª como paso previo a iniciar la negociaci¨®n sobre los de 2018.
Aunque convencer al PNV es m¨¢s urgente que lograr el apoyo de NC, tambi¨¦n requiere de un mayor margen de tiempo. Tras la convulsi¨®n de la semana pasada por el encarcelamiento de dirigentes independentistas catalanes y la detenci¨®n de Carles Puigdemont, para los nacionalistas vascos es ahora mismo imposible el m¨¢s m¨ªnimo acercamiento al PP. Tambi¨¦n era imposible para los dirigentes del PNV llegar al Aberri Eguna de ayer en plenas negociaciones con el Gobierno. E imposible es, finalmente, adoptar un brusco cambio de posici¨®n cuando a¨²n queda un mes para hablar.
Investidura en Catalu?a
Rajoy intentar¨¢ acompasar las negociaciones de las cuentas a la evoluci¨®n de los acontecimientos en Catalu?a. La fallida votaci¨®n para investir a Jordi Turull como president ha puesto en marcha el descuento de dos meses tras el que ser¨¢ obligatorio convocar elecciones si no hay nuevo Govern. El Ejecutivo trabaja con la hip¨®tesis de que eso apremiar¨¢ a los independentistas a elegir a un presidente ¡°efectivo¡±. Una vez constituido su gobierno, Rajoy no demorar¨¢ ni un segundo el levantamiento del art¨ªculo 155 y Catalu?a recuperar¨¢ su autogobierno. Seg¨²n el planteamiento gubernamental, el PNV ya no tendr¨¢ razones para negarse a negociar unos Presupuestos cargados de partidas beneficiosas para el Pa¨ªs Vasco.
Entonces, Rajoy hablar¨¢ personalmente con el lehendakari, ??igo Urkullu y con el presidente del PNV, Andoni Ortuzar. La vicepresidenta S¨¢enz de Santamar¨ªa; el ministro de Hacienda, Crist¨®bal Montoro; y el portavoz parlamentario, Rafael Hernando, tambi¨¦n tendr¨¢n un papel protagonista. Sus interlocutores en el PNV ser¨¢n el portavoz del Gobierno vasco, Josu Erkoreka, y el del Congreso, Aitor Esteban.
No obstante, desde el partido vasco se advierte de que la pol¨ªtica nacional complicar¨ªa extraordinariamente las negociaciones incluso tras el fin del 155. Ciudadanos fiscalizar¨¢ cualquier concesi¨®n del Gobierno a los nacionalistas vascos, argumentan desde el PNV, y eso limita la capacidad de acci¨®n del PP. De hecho, S¨¢enz de Santamar¨ªa y Erkoreka llevan semanas sin concretar una cita para abordar si es posible iniciar la trasferencias de competencias que piden los nacionalistas para completar el estatuto vasco. Ambas partes separan las dos negociaciones, pero que ninguna haya comenzado sirve como term¨®metro de las dificultades a las que se enfrenta Rajoy para culminar con ¨¦xito su proyecto.
El presidente quiere creer que es posible sacar adelante los Presupuestos, aunque sabe que un chispazo en Catalu?a puede echar por tierra la operaci¨®n, acrecentar la debilidad intr¨ªnseca que supone su minor¨ªa parlamentaria y poner en peligro la duraci¨®n de la legislatura.
El pacto para las cuentas no acerca al presidente y a Rivera
Mariano Rajoy y Albert Rivera no han hablado mucho sobre los Presupuestos, apenas "una o dos conversaciones telef¨®nicas", seg¨²n fuentes gubernamentales. Sus equipos s¨ª.
Por parte del Ejecutivo, Alberto Nadal, el Secretario de Estado de Presupuestos, ha llevado el peso de unas negociaciones en las que ha estado implicado el ministro de Hacienda, Crist¨®bal Montoro. Y por parte de Ciudadanos han asumido el grueso del trabajo, el catedr¨¢tico de la London School of Economics, Luis Garicano, y el diputado Francisco de la Torre. En todo caso, el nuevo acuerdo no ha supuesto un acercamiento entre los dos l¨ªderes, distanciados por su dispar forma de entender la pol¨ªtica y por su inter¨¦s en seducir al mismo electorado.
De hecho, la negociaci¨®n de las cuentas ha profundizado la desconfianza entre los dos partidos. La direcci¨®n del PP vio con suspicacia que Ciudadanos anunciara hace meses un preacuerdo para los presupuestos y que luego a?adiera nuevas demandas, como la equiparaci¨®n de salarios de las fuerzas de seguridad.
Al tiempo, la formaci¨®n de Rivera critic¨® con dureza que el PP tardara meses en lograr que la senadora Pilar Barreiro pasara al grupo mixto, pese a que el pacto de investidura entre los dos partidos recoge la separaci¨®n de los imputados.
Finalmente, el Gobierno juzg¨® con severidad que Rivera anunciara el lunes 26 que se hab¨ªa alcanzado un acuerdo, y que este inclu¨ªa una subida media del 2% para las pensiones. Un d¨ªa despu¨¦s, Montoro quiso demostrar que los Presupuestos los elabora el Gobierno y no Ciudadanos: desmintiendo a Rivera, anunci¨® que las pensiones subir¨ªan un 3% de media.
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