J¨®venes de La L¨ªnea tienden una emboscada a la Polic¨ªa
Los ataques de los 'empleados' del narco a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado pasan de ser encontronazos a estar planificados
Los agentes de la comisar¨ªa de Polic¨ªa de La L¨ªnea (C¨¢diz), cre¨ªan que ya se las sab¨ªan todas. Llevan a?os persiguiendo solos a miles de los j¨®venes que trabajan para los poderosos narcotraficantes del Campo de Gibraltar, tanto en el hach¨ªs como en el tabaco. "Ya sabemos que juegan al despiste, que cuando van a alijar en un sitio nos llaman para que acudamos a otro; tambi¨¦n que si les cortamos el paso cuando van con la mercanc¨ªa no dudar¨¢n en embestir nuestros veh¨ªculos con sus potentes coches robados; y que si pueden proteger a uno de esos narcotraficantes que les da de comer lo van hacer, incluso sac¨¢ndolo del hospital mientras est¨¢ custodiado por la polic¨ªa, pero lo que no esper¨¢bamos es que nos hicieran una emboscada". Lo cuenta un agente y sucedi¨® esta madrugada.?
Una llamada sobre un posible alijo de tabaco,?una colla (argot con el que se conoce a los grupos que participan en un alijo) estaba pr¨®xima a desembarcar tabaco en la playa. El aviso puso en marcha a un veh¨ªculo policial camuflado que se acerc¨® a patrullar la zona se?alada. Al llegar al punto concreto, vieron como ard¨ªa una barricada en el Barrio de Bernab¨¦, dentro de la barriada de San Bernardo, junto a ese endiablado conglomerado de calles y casas bajas pegado a la playa conocido como La Atunara, y convertido en fortaleza para los narcos y guarder¨ªa para sus mercanc¨ªas il¨ªcitas. Fueron recibidos a ladrillazos por "una veintena de personas", con bengalas y c¨®cteles molotov, seg¨²n fuentes de la comisar¨ªa de La L¨ªnea. A pesar de que pidieron refuerzos inmediatamene, dos agentes resultaron heridos con lesiones de diversa consideraci¨®n y varios veh¨ªculos sufrieron da?os. Solo hubo un detenido, menor de edad.
Un c¨®ctel molotov cay¨® justo en la trayectoria del veh¨ªculo, que se detuvo en seco. Los agentes avisaron a otro coche patrulla. Llov¨ªan las piedras. Cay¨® otra botella llena de gasolina. El alumbrado p¨²blico se apag¨® y, entre 15 y 20 j¨®venes, se perdieron en la oscuridad.
Es la ¨²ltima escena de la escalada de violencia a la que se enfrentan las fuerzas de seguridad que luchan cotidianamente contra el narcotr¨¢fico en el Campo de Gibraltar. Es una declaraci¨®n de guerra, tras la detenci¨®n la semana pasada de uno de los reyes del narco, el mayor de los hermanos Casta?a, Antonio Tej¨®n Casta?o. El narcotr¨¢fico es desde hace a?os una forma de vida para muchas familias y muchos j¨®venes linenses. Unos vapuleados por la crisis y sin alternativa laboral posible, y otros sin perspectivas de futuro: todos trabajando en el narcotr¨¢fico y en pie de guerra.?
El largo tiempo en que los narcos han estado campando a sus anchas en esta zona del sur de Espa?a, les ha rodeado de un aura de impunidad, se han ganado el respeto y hasta la admiraci¨®n de los muchos a los que "han ayudado". La polic¨ªa calcula que 3.000 personas trabajan directamente para los narcotraficantes. La muerte de un ni?o en un incidente con una narcolancha hace un mes puso el foco y los refuerzos policiales en la zona. Y el descabezamiento del reinado de Los Casta?a ha calentado los ¨¢nimos y han pasado al ataque.
¡°Est¨¢ premeditado, pensado y orquestado. Son t¨¦cnicas de guerrilla, propias de la kale borroka que buscan matar, aparte de amedrentar, esto ya es otra cosa¡±, dice uno de los polic¨ªas de La L¨ªnea, que llevan a?os denunciando falta de medios humanos y materiales.
Los polic¨ªas sospechan que incluso fueron los alborotadores los que provocaron el apag¨®n del alumbrado p¨²blico de esa zona. ¡°Lo cortaron los atacantes, seguro, para huir con impunidad¡±, apuntan. Solo pudieron divisar a uno de los atacantes. Tras una persecuci¨®n a pie, lograron detener a un joven de 15 a?os que ofreci¨® ¡°una gran resistencia¡±.
Fue necesaria la intervenci¨®n de varios equipos de la Unidad de Prevenci¨®n y Reacci¨®n (UPR) para dispersar a los atacantes. Igualmente consiguieron intervenir un arsenal de ocho c¨®cteles molotov, diversas piedras de gran tama?o y una bengala. ¡°Las botellas estaban rellenadas con un producto espeso con la idea de que se te adhiera a la piel y al cuerpo. Suerte que no lleg¨® a alcanzar el interior de alg¨²n veh¨ªculo o a un compa?ero¡±, cuenta otro agente.
Dos son los m¨®viles que este polic¨ªa encuentra al suceso de esta madrugada: ¡°Entiendo que esto forma parte de la escalada de violencia a la que no se le pone freno porque hay poca respuesta por parte del sistema. Entonces dicen, ¡®?por qu¨¦ no hacerlo? Adem¨¢s, ¨²ltimamente los decomisos han aumentado y est¨¢n m¨¢s cabreados¡±.
Este martes el Sindicato Unificado de la Polic¨ªa (SUP), mayoritario en el cuerpo, ha vuelto a exigir un incremento de la seguridad en la zona con refuerzos de medios y agentes que no terminan de llegar. ¡°Unos y otros pol¨ªticos ¡ªen referencia del anterior ministro de Interior y al nuevo, Fernando Grande-Marlaska¡ª prometen medidas contundentes pero no se ve nada. Necesitamos respuestas ya".
"Gracias a los narcos les damos de comer a nuestros hijos"
Mientras que los traficantes emboscan a la polic¨ªa con c¨®cteles molotov, el c¨ªrculo m¨¢s cercano de Antonio Tej¨®n manifiesta airadamente su enfado por el trato que recibe el mayor narco del hach¨ªs de Espa?a en la c¨¢rcel. En un comunicado que circula en redes sociales como Facebook, personas de su c¨ªrculo se quejan porque el supuesto narco est¨¦ en una prisi¨®n de m¨¢xima seguridad en C¨®rdoba, cuando "no ha matado, no ha violado y nadie ha muerto por su culpa". "No conoc¨¦is lo que ha tenido que pasar para llegar a d¨®nde est¨¢, una persona humilde, sin aires de nada", contin¨²a el comunicado. Y a?ade: "No ten¨ªa nada suyo y gracias a ¨¦l, en La L¨ªnea de la Concepci¨®n, el culo del mundo, la mayor¨ªa de familias de este asqueroso pueblo ten¨ªa para darle de comer a sus hijos". Adem¨¢s, un usuario de una web de recogida de firmas que se identifica como Zaraida L¨®pez, la mujer de Tej¨®n, ha iniciado una campa?a que ya suma m¨¢s de 500 firmantes en la que pide que "tenga el mismo trato que los dem¨¢s presos".
Las reacciones de defensa de los narcos, se suman a los graffitis y pintadas en las calles de La L¨ªnea, a los tatuajes de narcolanchas en la piel de algunos de los j¨®venes que se dedican a mover la droga, a esas camisetas del equipo de f¨²tbol de la l¨ªnea tuneadas con la foto de otra narcolancha y con el eslogan de "Orgullo Linense". Y ahora tambi¨¦n con v¨ªdeos de raperos que reivindican esa forma de vida ante el abandono de estos pueblos y sus gentes por parte del Estado.
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