El proceso para trasladar a Franco fuera del Valle de los Ca¨ªdos

El Gobierno est¨¢ decidido a actuar en el Valle de los Ca¨ªdos y trasladar los restos de Franco, pero quiere hacerlo con el mayor consenso y garant¨ªas jur¨ªdicas posibles sin dilatarlo demasiado en el tiempo. Estos son los pasos e inconvenientes que pueden surgir en el proceso.

Las criptas laterales, donde fueron enterradas m¨¢s de 33.800 personas, son un ¡°cementerio p¨²blico especial¡± donde el Estado es competente para actuar. Pero la bas¨ªlica, donde se encuentran las tumbas de Franco y Primo de Rivera, es un cementerio religioso, por lo que el primer paso para el traslado de los restos del dictador es hablar con la Iglesia.

El abogado Eduardo Ranz, que ha logrado las resoluciones favorables para exhumar en las criptas donde hay republicanos enterrados en contra del deseo de sus familias, sugiere que podr¨ªa incluso solicitarse la implicaci¨®n de la Casa del Rey y explica que si la Iglesia no diera su consentimiento ¡ªLa Raz¨®n adelant¨® que el arzobispo de Madrid no tiene inter¨¦s en oponerse¡ª habr¨ªa un recurso legal. Se tratar¨ªa de dejar sin efecto el decreto ley del 23 de agosto de 1957 que atribu¨ªa la administraci¨®n del lugar a la Fundaci¨®n de la Santa Cruz del Valle de los Ca¨ªdos, cuyos fines eran ¡°rogar a Dios por las almas de los muertos en la Cruzada¡±.? La ley de 1982, reguladora del Patrimonio Nacional, permitir¨ªa dejar ese decreto de 1957 sin efecto, a?ade el abogado. La disposici¨®n tercera de dicha norma establece en su disposici¨®n final tercera que: "se autoriza al Gobierno para, mediante Real Decreto, regular las materias objeto del Decreto-ley de 23 de agosto de 1957 con las finalidades siguientes:

- adecuar la Fundaci¨®n a los preceptos de la ley de patrimonio y establecer un nuevo r¨¦gimen jur¨ªdico de sus bienes, disponiendo, cuando proceda, su integraci¨®n en el Patrimonio del Estado.

- proveer, especialmente al r¨¦gimen jur¨ªdico de los bienes que deban quedar sometidos a la legislaci¨®n aplicable sobre cementerios y sepulturas".

La fundaci¨®n a la que el decreto de 1957 atribu¨ªa la administraci¨®n del Valle carece de patrimonio (sus bienes son de dominio p¨²blico), en la pr¨¢ctica sus rentas son las transferencias de los Presupuestos del Estado y sus dotaciones se han adquirido directamente por Patrimonio Nacional.

El siguiente paso, a?ade Ranz, ser¨ªa constituir "una comisi¨®n gestora en cuyo patronato est¨¦n representados el CSIC, Aranzadi [antrop¨®logos forenses], expertos jur¨ªdicos y pol¨ªticos para, en un plazo de tres a seis meses, desarrollar la resignificaci¨®n completa del monumento¡±. Esta comisi¨®n se diferenciar¨ªa del comit¨¦ de expertos nombrado por el Gobierno de Zapatero en 2011 en que tendr¨ªa capacidad ejecutiva" para actuar.

Desde el punto de vista t¨¦cnico, el forense Francisco Etxeberria, que ha examinado los restos de Miguel de Cervantes, Salvador Allende y Pablo Neruda y participado en centenar de exhumaciones,? asegura que trasladar los restos de Franco, sepultado bajo una losa de granito de 1.500 kilos, no presenta, en principio, grandes complicaciones. ¡°No har¨ªa falta la intervenci¨®n de un forense. Bastar¨ªa con los servicios funerarios¡±.

S¨ª resulta compleja la exhumaci¨®n e identificaci¨®n de los restos inhumados en las criptas laterales, donde est¨¢n los familiares de republicanos enterrados sin su consentimiento. Los forenses enviados en distintos momentos para comprobar el estado de los restos comprobaron que las filtraciones de agua hab¨ªan deshecho muchas de las cajas de madera donde fueron inhumados los cuerpos y los huesos se hab¨ªan apilado y mezclado de forma que tratar de identificarlos individualmente ser¨ªa de ¡°una complejidad extrema¡±. Etxeberria, no obstante, cree que hay que intentarlo. El pasado abril, despu¨¦s de un tira y afloja administrativo entre las familias y Patrimonio Nacional, se realizaron los trabajos preliminares de exhumaci¨®n en los columbarios donde varias familias creen que fueron enterrados sus seres queridos, como la de Manuel Lape?a, de 94 a?os, que considera un insulto que su padre est¨¦ en el mismo lugar que su verdugo.