El Congreso aprueba regular la eutanasia con el rechazo del PP
Ciudadanos cambia la abstenci¨®n por el voto favorable a la toma en consideraci¨®n a ¨²ltima hora
El Congreso ha respaldado este martes la toma en consideraci¨®n de una proposici¨®n de ley del PSOE para regular la eutanasia como un nuevo derecho individual y efectivo que se convierta en una prestaci¨®n en la cartera de servicios comunes del Sistema Nacional de Salud. La propuesta socialista ser¨¢ respaldada por Unidos Podemos, Ciudadanos, ERC, PNV, PDeCAT, Comprom¨ªs y EH Bildu. El PP no la apoya: ¡°Nos quedaremos solos, pero no nos importa¡±, ha justificado la portavoz popular Pilar Cort¨¦s en el debate. Los mayores de edad con una enfermedad grave e incurable y los discapacitados graves cr¨®nicos podr¨¢n recibir ayuda del sistema p¨²blico para morir cuando la iniciativa supere los tr¨¢mites parlamentarios habituales, con su discusi¨®n en comisi¨®n y la incorporaci¨®n de enmiendas correspondientes.
Con mucha voluntad pol¨ªtica, la ley podr¨ªa entrar en vigor antes de acabar la legislatura, pero el PP no comparte este entusiasmo, como ha constatado el debate, y Ciudadanos alberga muchas reticencias. Estas reservas ya afloraron el pasado 10 de mayo en la C¨¢mara cuando el Congreso admiti¨® a tr¨¢mite una iniciativa proveniente del Parlament de Catalu?a para modificar el C¨®digo Penal y exonerar de responsabilidad a quienes asistan al suicidio del enfermo terminal que lo haya solicitado libremente. El C¨®digo Penal castiga en su articulo 143 la cooperaci¨®n necesaria para el suicidio y la eutanasia se considera homicidio.Ciudadanos, que ha cambiado a ¨²ltima hora la abstenci¨®n por el voto afirmativo, prefiere su propio proyecto, que se est¨¢ debatiendo en ponencia, una ley de dignidad al final de la vida, una norma b¨¢sica sobre los derechos a la informaci¨®n anticipada, al testamento vital en el momento del diagn¨®stico, a decidir el tratamiento y a los cuidados paliativos, a la sedaci¨®n y a la intimidad.
La portavoz socialista, Adriana Lastra, ha defendido que su partido ha optado por el modelo m¨¢s garantista de los vigentes en pa¨ªses como Holanda, B¨¦lgica o Luxemburgo, y ha empleado mucho tiempo de trabajo para lograr un texto legislativo capaz de concitar el apoyo de todos los pol¨ªticos, pero tambi¨¦n de profesionales de la sanidad y la sociedad. El proyecto, realizado en contacto con asociaciones, sanitarios y expertos, incluye marco jur¨ªdico y sanitario de garant¨ªas y la posibilidad de que se pueda llevar a cabo en el propio domicilio o en hospitales p¨²blicos y privados. Para ello, ser¨¢ necesario despenalizar la eutanasia en el C¨®digo Penal. Lastra ha instado a los partidos a apoyar la iniciativa: ¡°Regulemos la ¨²ltima libertad, el ¨²ltimo derecho¡±.
?n lo p¨²blico y lo privado
Con la iniciativa del PSOE, que es de aplicaci¨®n en el ¨¢mbito p¨²blico y privado, el paciente podr¨¢? lograr el suministro de una sustancia que ponga fin a su vida si se cumplen los supuestos de discapacidad grave cr¨®nica o enfermedad grave e incurable. Pero ser¨¢ necesaria la concurrencia de dos m¨¦dicos que valoraran el caso: el que lo atiende habitualmente y otro externo que avale que las condiciones de sufrimiento insoportable para el paciente. La ¨²ltima palabra la tendr¨¢ el paciente.
Seg¨²n la proposici¨®n, los solicitantes deben tener nacionalidad espa?ola (o residencia legal en Espa?a) y disponer de la informaci¨®n que exista sobre su proceso, las diferentes alternativas y posibilidades de actuaci¨®n, incluida la de acceder a cuidados paliativos. Deber¨¢n haber formulado la solicitud de manera voluntaria por escrito y firmarla en presencia de un profesional sanitario que lo rubricar¨¢. Habr¨¢ un periodo de 17 d¨ªas para que la petici¨®n sea analizada por otro m¨¦dico y finalmente se pondr¨¢ en conocimiento de la Comisi¨®n de Evaluaci¨®n y Control. El proceso no puede durar menos de 32 d¨ªas.
La portavoz del PP, Pilar Cort¨¦s, ha considerado que este martes ¡°es un d¨ªa triste¡±. ¡°Hablar de eutanasia es hablar de fracaso; reconocer una derrota pol¨ªtica, profesional, m¨¦dica¡±, ha argumentado. Cort¨¦s ha calificado de ¡°fracaso de la sociedad¡± que la pol¨ªtica no sepa ¡°ofrecer otra soluci¨®n que morir¡±. Y ha alertado de que la norma de los socialistas ¡°con el paso del tiempo va a convertir la excepcionalidad en habitualidad¡±. Es decir, ¡°la eutanasia ganar¨¢ terreno a los paliativos¡± y ser¨¢ percibida como ¡°una soluci¨®n m¨¢s barata¡±. En ese sentido, ha apuntado que en Holanda se producen mil casos al a?o de eutanasias involuntarias.
Ciudadanos, que ha virado en ¨²ltimo momento y que tiene la Ley de Dignidad al Final de la Vida en su tr¨¢mite final, ha insistido en que su iniciativa ¡°es mejor y m¨¢s amplia¡±. ¡°Aun as¨ª, votaremos a favor¡±, ha se?alado su portavoz, Francisco Igea, quien ha criticado varios aspectos de la iniciativa socialista sobre los que tratar¨¢n de incidir cuando se discuta en comisi¨®n.
Tanto Unidos Podemos, ERC, PDeCAT, PNV, Comprom¨ªs como Bildu, han brindado su apoyo a la iniciativa en t¨¦rminos amplios, aunque manifestando su intenci¨®n de influir en ella durante el tr¨¢mite para limar algunas discrepancias y despejar dudas. El grupo confederal ha querido reconocer en el texto socialista buena parte de una proposici¨®n suya que no prosper¨® en la C¨¢mara y ha defendido que el principio rector de la ley debe ser la libertad. Por su parte, ERC ha instado a "ampliar al m¨¢ximo posible su aprobaci¨®n en el trabajo parlamentario" para que acabe siendo "una ley con una amplia mayor¨ªa".
El PNV, a trav¨¦s de Joseba Agirrretxea, ha juzgado "oportuno y necesario" abordar la regulaci¨®n de la eutanasia con "f¨¦rreos anclajes" sanitarios, jur¨ªdicos de libertad y responsabilidad. Agirretxea ha considerado "fr¨ªvolo" que se insin¨²e que quienes apoyan esta iniciativa se sit¨²en en "las ant¨ªpodas de la lucha por la vida": "?Qu¨¦ bello es querer vivir y poder hacerlo, y qu¨¦ malo querer vivir y no poder hacerlo, pero lo m¨¢s grave es querer morir por no poder vivir? y no poder hacerlo!", ha sentenciado. La asociaci¨®n Derecho a Morir Dignamente hab¨ªa solicitado a todos los grupos parlamentarios que apoyaran la toma en consideraci¨®n de la proposici¨®n.
La proposici¨®n del PSOE tambi¨¦n prev¨¦ que los profesionales sanitarios directamente implicados en la prestaci¨®n de ayuda para morir tengan el derecho de ejercer la objeci¨®n de conciencia. La negativa a realizar la prestaci¨®n por razones de conciencia deber¨¢ manifestarse anticipadamente y por escrito y se crear¨¢ un registro con la informaci¨®n necesaria para que la Administraci¨®n sanitaria pueda garantizar una adecuada gesti¨®n de la prestaci¨®n.
Claves de la iniciativa
La eutanasia. Un equipo m¨¦dico administra f¨¢rmacos a una persona que est¨¢ en estado de sufrimiento grave y sin retorno para quitarle la vida. Lo permiten Holanda, B¨¦lgica, Luxemburgo, Canad¨¢ y partes de EE UU.
Legislaci¨®n actual. El C¨®digo Penal castiga en su articulo 143 la cooperaci¨®n necesaria para el suicidio. La eutanasia se considera homicidio.
Los supuestos. Podr¨¢n beneficiarse de la ley las personas que padezcan "una enfermedad grave e incurable" o una "discapacidad grave cr¨®nica" si no se espera que su situaci¨®n mejore y les causa gran sufrimiento f¨ªsico o ps¨ªquico. Es, por tanto, un planteamiento m¨¢s abierto que el de leyes como la holandesa y la belga, y podr¨ªa haberse aplicado en casos como el de Ram¨®n Sampedro, el tetrapl¨¦jico que se suicid¨® en 1998 porque no soportaba su situaci¨®n de dependencia absoluta, aunque no estaba terminal.
Suicidio asistido. La proposici¨®n incorpora tambi¨¦n la regulaci¨®n del suicidio m¨¦dicamente asistido. Es decir, el profesional facilitar¨¢ al paciente la sustancia con la que quitarse la vida, pero ser¨¢ este el que la ingerir¨¢ por sus medios. Ahora esa cooperaci¨®n necesaria con el suicidio est¨¢ castigada en el C¨®digo Penal.
Plazos. Las solicitudes deber¨¢n hacerse dos veces con 15 d¨ªas de diferencia. Con ello se da un plazo para que el afectado medite su decisi¨®n.
Objeci¨®n de conciencia. Los profesionales sanitarios directamente implicados en la prestaci¨®n de ayuda para morir tendr¨¢n el derecho de ejercer la objeci¨®n de conciencia. La negativa a realizar la prestaci¨®n por razones de conciencia deber¨¢ manifestarse anticipadamente y por escrito y las Administraciones sanitarias auton¨®micas crear¨¢n un registro con la informaci¨®n necesaria para que la Administraci¨®n Sanitaria pueda garantizar una adecuada gesti¨®n de la prestaci¨®n.
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