?Un Stonehenge en Toledo?

Stonehenge es uno de los monumentos m¨¢s enigm¨¢ticos del mundo. De forma circular, fue construido con grandes rocas hace 5.000 a?os, a finales del Neol¨ªtico, en el actual condado de Wiltshire, al sur de Inglaterra. Cinco milenios despu¨¦s, los cient¨ªficos siguen sin ponerse de acuerdo. Unos piensan que sirvi¨® como enterramiento, otros lo reconocen como templo religioso y hay quienes lo consideran un observatorio astron¨®mico. A miles de kil¨®metros, en Totan¨¦s, los arque¨®logos de Cota 667 creen haber encontrado una estructura similar que data de la misma ¨¦poca. Un hallazgo que puede cambiar la vida de esta peque?a localidad toledana.

Las piedras, dispuestas en circunferencia, emergen de la tierra de La Dehesilla, una finca particular. Sus 107 hect¨¢reas est¨¢n divididas por una carretera secundaria, la que conecta Totan¨¦s con Pulgar. En su margen derecha hay tres hect¨¢reas repletas de piedras, est¨¦riles para la agricultura. Ildefonso Guti¨¦rrez se crio entre ellas. Naci¨® hace 63 a?os en esta parcela arrendada por su padre que antes gestionaron su abuelo y su bisabuelo. ¡°Era una zona que no se pod¨ªa labrar y que los d¨ªas de lluvia serv¨ªa como refugio de caza¡±, explica este ganadero, que creci¨® pensando que aquella estructura ten¨ªa alg¨²n significado.

Guti¨¦rrez se convirti¨® en 2011 en el alcalde de Totan¨¦s, un municipio de apenas 380 habitantes situado en la comarca de los Montes de Toledo, en una llanura surcada por barrancos y arroyos que desembocan en el r¨ªo Tajo. ¡°Nos encontramos en una encrucijada de caminos. Tenemos cierta historia, pero nadie le ha dado importancia¡±, explica el regidor. El 7 de abril cumpli¨® uno de sus sue?os: inaugurar un museo paleontol¨®gico y arqueol¨®gico. En sus vitrinas se exponen arados romanos y f¨®siles, entre ellos trilobites de un yacimiento cercano al pueblo.

Hace dos a?os los miembros de Cota 667, un grupo formado por arque¨®logos e investigadores, visitaron Totan¨¦s para estudiar el verraco esculpido en granito de origen vet¨®n que preside la Plaza Mayor. El alcalde aprovech¨® para sugerirles un paseo por el campo con la intenci¨®n de mostrarles las piedras que le hab¨ªan intrigado desde que era un ni?o. Al ver su disposici¨®n, uno de los integrantes de la expedici¨®n afirm¨® que se trataba de un cr¨®mlech, un monumento megal¨ªtico formado por decenas de menhires. ¡°Estamos muy ilusionados. Al pueblo le va a beneficiar¡±, reconoce Guti¨¦rrez. Una alegr¨ªa que comparte con Teresa Send¨ªn, de 78 a?os y propietaria de la finca: ¡°Me qued¨¦ perpleja. Nunca me hab¨ªa fijado en las piedras¡±.

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¡°Es un descubrimiento muy importante porque se tratar¨ªa del ¨²nico cr¨®mlech de la meseta¡±, indica Mar¨ªa Quejigo, arque¨®loga de Cota 667. En la pen¨ªnsula Ib¨¦rica solo hay algo parecido en Oiartzun, Gipuzkoa, y en la regi¨®n de ?vora, en el sur de Portugal. Quejigo relata que su grupo est¨¢ trabajando ya en el hallazgo, que tendr¨¢n que excavar. ¡°No hay dudas de que es una estructura antr¨®pica, pero nos enfrentamos al problema de que pudo ser construido por el hombre en el siglo XVIII, por ejemplo¡±. Por eso es necesario datar las piedras, que esta investigadora enmarca entre 5.000 y 2.500 a?os antes de Cristo, un momento en el que las comunidades dejan de ser n¨®madas y se convierten en sedentarias.

Quejigo explica que deber¨¢n realizar diferentes pruebas, como la del magnet¨®metro, un instrumento capaz de localizar metales bajo el suelo. ¡°Encontrarlos nos ayudar¨ªa a datar la estructura y a conocer si la usaron como lugar de culto¡±, indica la investigadora. Tambi¨¦n se efectuar¨¢ un estudio palinol¨®gico, del polen, para determinar qu¨¦ tipo de vegetaci¨®n hab¨ªa en el lugar en el momento que se levant¨® la estructura, y otro carpol¨®gico, para detectar semillas y hallar restos de pr¨¢cticas rituales, como la quema de ofrendas vegetales. Elena Guti¨¦rrez, concejal de Cultura, considera que el hallazgo puede paliar la p¨¦rdida de demograf¨ªa y evitar la desaparici¨®n de Totan¨¦s, cuyos vecinos se dedican principalmente a la agricultura. ¡°Si se confirma, el cr¨®mlech puede atraer turismo, crear empleo y darnos vida¡±.