Un migrante muerto en un nuevo salto masivo a la valla de Melilla
Dos centenares de personas logran acceder a la ciudad aut¨®noma a trav¨¦s de los Pinos de Rostrogordo, la zona m¨¢s alta de la localidad
Un inmigrante subsahariano ha muerto este domingo y otros 26 resultaron heridos tras un nuevo salto masivo a la valla que separa Melilla de Marruecos, seg¨²n confirm¨® la delegada del Gobierno, Sabrina Moh. El Ejecutivo ha destacado que tambi¨¦n nueve guardias civiles sufrieron lesiones y que 223 personas consiguieron entrar en la ciudad, de un grupo de hasta 300 que intent¨® atravesar el per¨ªmetro fronterizo por la zona de Rostrogordo. ¡°Siempre apostaremos por una soluci¨®n coordinada y europea ante el reto migratorio¡±, ha asegurado este domingo Pedro S¨¢nchez.
El salto se produjo sobre las nueve de la ma?ana, a plena luz del d¨ªa y sin violencia, por uno de los puntos m¨¢s altos de la ciudad aut¨®noma, usado como zona de ocio y de acampada por los melillenses. Un testigo que conduc¨ªa por la zona en ese momento asegura haber visto a efectivos de emergencias intentando reanimar a la v¨ªctima, aunque fue in¨²til. A falta de la autopsia, la delegaci¨®n del Gobierno inform¨® de que el joven muri¨® debido a un fallo cardiorespiratorio. Otros tres inmigrantes, heridos de distinta consideraci¨®n, se encontraban junto al cuerpo.
¡°Hoy, 200 personas han accedido irregularmente a Melilla y una ha fallecido. El Gobierno siempre apostar¨¢ por una soluci¨®n coordinada y europea ante el reto migratorio. Mi solidaridad y reconocimiento a la profesionalidad de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y a los servicios que trabajan en nuestras fronteras¡±, ha escrito en Twitter el presidente del Gobierno, Pedro S¨¢nchez. Seg¨²n precisaron posteriormente fuentes policiales, 223 sin papeles entraron a la ciudad y tres permanecen hospitalizados.
Una hora despu¨¦s del salto, sobre las diez, el grupo bajaba ya desde Rostrogordo hacia el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI). Lo hac¨ªa a pie, guiado por una patrulla de la Polic¨ªa y acompa?ado por varias ambulancias, seg¨²n relataron a EL PA?S vecinos del barrio cercano de El Poblado, que presenciaron la caravana. ¡°Algunos iban destrozados¡±, comenta el due?o de un local de ultramarinos, que ofreci¨® a algunos de los inmigrantes botellas de agua: ¡°Uno llevaba la musculatura del brazo descolgada, totalmente desgarrada¡±.
Un grupo de posibles rezagados protagoniz¨® un segundo intento de salto horas despu¨¦s por la misma zona, sobre las 14.30. Pero solo uno logr¨® entrar. Al lugar se desplazaron varias patrullas de la Guardia Civil, que lo detuvieron, antes de conducirlo al CETI, junto al resto.
Sin signos de violencia
Los 223 inmigrantes fueron trasladados en un primer momento al CETI. All¨ª, se efectuaron las primeras filiaciones, antes de ser trasladados a la comisar¨ªa de la Polic¨ªa Nacional. Los migrantes bajaron de los furgones en pareja. Algunos, con las manos atadas por bridas. Entre 10 y 15 podr¨ªan ser menores, seg¨²n fuentes policiales. M¨¢s tarde, fueron devueltos al CETI, donde una abogada de oficio les ofrec¨ªa asistencia.
Los heridos fueron trasladados al Hospital Comarcal, donde se activ¨® un dispositivo especial de Urgencias para atender a los 26 lesionados: 19 de ellos, con diversos cortes y fracturas. Seis agentes de la Guardia Civil tambi¨¦n presentaron leves rasgu?os por garfios ¡ªque usan los sin papeles para saltar la frontera¡ª y peque?os golpes. Doce militares marroqu¨ªes tambi¨¦n resultaron heridos al intentar frenar el salto desde Nador y algunos fueron trasladados al hospital de esta ciudad marroqu¨ª, seg¨²n precisan fuentes militares, informa Francisco Peregil.
Esta es la segunda entrada masiva que se produce en Melilla en 2018, tras el acceso el pasado enero de 209 personas, lo que ilustra el descenso de los saltos, en favor de las salidas en pateras desde puntos cercanos a la ciudad aut¨®noma, como Alhucemas y Nador. Adem¨¢s, seg¨²n fuentes de la Guardia Civil, hasta ahora, los inmigrantes subsaharianos y marroqu¨ªes solo hab¨ªan protagonizado peque?as incursiones en solitario o en grupos peque?os.
En Ceuta, otros dos migrantes fueron encontrados muertos en las inmediaciones de la valla el pasado abril. Al menos uno de ellos hab¨ªa fallecido a causa de un paro card¨ªaco, como parece haber sido el caso del joven muerto este domigo, que no presentaba signos visibles de violencia, seg¨²n fuentes policiales. Los migrantes que esperan en las inmediaciones de la valla, en Marruecos, malviven en condiciones lamentables. A menudo, sin agua y sin comida durante d¨ªas, lo que agrava su condici¨®n f¨ªsica.
Temor de una devoluci¨®n masiva y expr¨¦s
Varias ONG han mostrador su preocupaci¨®n ante la posibilidad de que, en los pr¨®ximos d¨ªas, se produzca la devoluci¨®n expr¨¦s de las personas que accedieron a la ciudad. El pasado agosto, el Gobierno expuls¨® de forma extraordinaria a Marruecos a 116 subsaharianos que hab¨ªan protagonizado un salto con violencia en Ceuta. Una devoluci¨®n que supuso la reactivaci¨®n de un acuerdo con Rabat firmado en 1992, al que Madrid raramente recurr¨ªa cuando se produc¨ªan saltos de las vallas. S¨ª lo ha estado utilizando de forma m¨¢s habitual para devolver a Marruecos a inmigrantes de terceros pa¨ªses que llegan en patera a los pe?ones e islas de soberan¨ªa espa?ola que salpican la costa marroqu¨ª.
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