S¨¢nchez repensar¨¢ la estrategia tras el resultado en Andaluc¨ªa

El resultado de las elecciones andaluzas iba a ser ajeno a la decisi¨®n que adoptara el presidente del Gobierno, Pedro S¨¢nchez, sobre la fecha de las elecciones generales. Este fue el mensaje que transmiti¨® Moncloa y la direcci¨®n federal del PSOE hasta horas antes de que los andaluces acudieran a votar. De forma abrupta y traum¨¢tica, por lo inesperado, el PSOE se prepara para salir del poder en Andaluc¨ªa y el secretario general se ve impelido a repensar su estrategia, tras su convencimiento de que la noche electoral del 2 de diciembre no le iba a obligar a hacerlo.

Tal aseveraci¨®n, nada impostada, muy rotunda y formulada con convicci¨®n, ven¨ªa dada por la certidumbre de que el retroceso del PSOE andaluz nunca pondr¨ªa en peligro un Gobierno socialista apoyado desde fuera por Adelante Andaluc¨ªa. En los d¨ªas de campa?a, incluso la direcci¨®n socialista sosten¨ªa que la opci¨®n ideal ser¨ªa la repetici¨®n de la f¨®rmula de gobierno con Ciudadanos. Era una enso?aci¨®n. Lo real era empezar a pensar en gobernar con el concurso de la izquierda, con mucha dificultad, con forcejeos continuos, con advertencias constantes de la l¨ªder andaluza de Podemos, Teresa Rodr¨ªguez, pero con Susana D¨ªaz en el palacio de San Telmo.

M¨¢s informaci¨®n

El PSOE se hunde, la izquierda pierde la mayor¨ªa y Vox irrumpe con 12 diputados

La extrema derecha logra su primer gran ¨¦xito electoral en democracia

Susana D¨ªaz lleva al PSOE andaluz a su peor resultado

El PP se declara euf¨®rico y dispuesto a pactar con Vox

Rivera: ¡°Vamos a echar al PSOE de la Junta¡±

¡°El tren de las victorias socialistas tiene su primera parada en Andaluc¨ªa y la segunda, en las municipales y auton¨®micas de mayo¡±, fue el vaticinio de S¨¢nchez en uno de los dos actos de campa?a que protagoniz¨® con Susana D¨ªaz. La ¡°mayor¨ªa rotunda¡± a la que la presidenta de la Junta, el presidente del Gobierno y otros dirigentes socialistas han apelado durante la campa?a no se dio. ¡°Es importante que el domingo la victoria de los socialistas andaluces sea un gran mensaje para el resto de Espa?a¡±, incidi¨® esta semana la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo.

En plena euforia en las sedes del PP, Ciudadanos y Vox, se invocaba el cambio. Pero no solo en Andaluc¨ªa, sino en el resto de Espa?a. Nada de esto detectaron las encuestas ni los l¨ªderes socialistas. Tampoco Moncloa. Acaso en las ¨²ltimas horas empez¨® a hablarse de la subida de Vox pero nunca en la perspectiva de que Susana D¨ªaz se quedara sin una mayor¨ªa para gobernar.

La confianza de que Andaluc¨ªa sirviera de est¨ªmulo de las citas electorales de 2019 se top¨® con un resultado que, pese a las se?ales de alarma y advertencias de cierta apat¨ªa en las filas socialistas realizadas por alcaldes y secretarios de agrupaciones a lo largo de la ¨²ltima semana, nadie en el partido vio venir y costaba creer.

La presencia del presidente del Gobierno y secretario general del PSOE en la campa?a ¡ªseg¨²n la portavoz del comit¨¦ de acci¨®n electoral, Esther Pe?a, ser¨ªa ¡°intensa¡±¡ª se limit¨® a sendos actos en Chiclana (C¨¢diz) y Marbella (M¨¢laga). Susana D¨ªaz, por su parte, hizo una campa?a completamente andaluza. Todo fueron cr¨ªticas a los l¨ªderes del PP y Ciudadanos, Pablo Casado y Albert Rivera, respectivamente, por recorrer Andaluc¨ªa con mensajes contra Pedro S¨¢nchez y la gesti¨®n del Gobierno de la naci¨®n.

En el PSOE y en el Gobierno quisieron ver que esa estrategia ser¨ªa contraproducente porque los andaluces lo considerar¨ªan una falta de respeto. A Ciudadanos le ha ido muy bien, y no as¨ª al PP que, no obstante, hizo anoche abstracci¨®n de la p¨¦rdida de casi 300.000 votos en relaci¨®n a las elecciones de 2015. Pero mucho m¨¢s ha perdido el PSOE andaluz cuyo suelo se ha roto de manera estrepitosa al caer en m¨¢s de 400.000 papeletas.

?Hasta qu¨¦ punto el secretario general del PSOE y presidente del Gobierno puede declararse ajeno a este resultado electoral? S¨¢nchez no pensaba involucrarse demasiado en el an¨¢lisis del resultado electoral al estimar que no tendr¨ªa tantas variables relevantes como para perturbar la marcha del Gobierno de la naci¨®n. La realidad ha deparado sin embargo un retroceso de gran calibre en el apoyo socialista y, adem¨¢s, los l¨ªderes del PP, Ciudadanos, y toda la campa?a de Vox se han concentrado en ataques a la pol¨ªtica gubernamental espa?ola. El planteamiento inicial de S¨¢nchez puede variar ahora sustancialmente

Pedro S¨¢nchez tiene que calibrar, lo reconozca o no, si debe extraer alguna consecuencia del resultado electoral de Andaluc¨ªa. El primer examen en las urnas al proyecto socialista desde la ca¨ªda de Mariano Rajoy se qued¨® muy lejos de cumplir las expectativas del partido en el Gobierno, el ¨²nico que ha gobernado Andaluc¨ªa desde la restauraci¨®n de la democracia. El efecto Moncloa por la llegada al Gobierno, que diferentes l¨ªderes territoriales del PSOE traduc¨ªan en un impacto positivo de dos a tres puntos en las elecciones auton¨®micas, no se produjo.

El gobierno andaluz est¨¢ perdido pero S¨¢nchez, a trav¨¦s del secretario de Organizaci¨®n y ministro de Fomento, Jos¨¦ Luis ?balos, pone las luces hacia las generales y pregunta al PP y a Ciudadanos si van a integrar como propios los votos de la extrema derecha. Pregunta ret¨®rica porque oficiosamente reconocen que s¨ª. Ese ser¨¢ el meollo de la campa?a electoral de los socialistas para las generales.