Casado resucita a Mayor Oreja

Lo que empez¨® como una pol¨¦mica sobre el di¨¢logo con el independentismo catal¨¢n y sus formas ha derivado en la asunci¨®n por parte del presidente del PP, Pablo Casado, de las tesis radicales de Jaime Mayor Oreja: ¡°La agenda que vivimos en Catalu?a es la de ETA, es decir, la agenda del nacionalismo que se al¨ªa con la izquierda acomplejada y apaciguada¡±.

Mayor, puente entre el PP y Vox, sigue sosteniendo, hoy, que el presidente Zapatero pact¨® en 2004 con ETA la agenda rupturista de la unidad de Espa?a, presente hoy en Catalu?a. Y este disparate pol¨ªtico ¡ªla mezcolanza de Catalu?a, Euskadi, una ETA disuelta, nacionalismos dispares e izquierdos con unos saltos vertiginosos en el tiempo¡ª que Mariano Rajoy, como presidente del Gobierno, no asumi¨®, Casado lo ha incorporado a su discurso. Tambi¨¦n Casado ha copiado de la oposici¨®n radical del PP a Zapatero la llamada a la movilizaci¨®n callejera como arma de desgaste gubernamental con el se?uelo del riesgo de ruptura de la unidad de Espa?a por ¡°la complicidad de la izquierda con el independentismo¡±. Hoy como entonces existe una tremenda desproporci¨®n entre la respuesta y los hechos denunciados: la figura de un relator para unas conversaciones rotas sin empezar.

El PP, entre 2005 y 2007 promovi¨® o apoy¨® una docena de manifestaciones callejeras, la mayor¨ªa contra las conversaciones del Gobierno con ETA bajo la acusaci¨®n de que negociaban el derecho a la autodeterminaci¨®n para Euskadi y su anexi¨®n de Navarra. En aquellas conversaciones, Gobierno y ETA hablaron de esos asuntos entre otros muchos, pero no hubo acuerdo como confirman las actas y la prueba definitiva es que ETA ha desaparecido mientras Navarra sigue existiendo y Euskadi ni ha ejercido el derecho a la autodeterminaci¨®n ni se espera. El efecto electoral de aquella docena de manifestaciones contra el Gobierno fue nulo para el PP. Zapatero mejor¨® sus resultados en las siguientes elecciones generales. Pas¨® del 42,59% de los votos y 164 diputados en 2004 a 43,87% y 169 diputados en 2008. Las encuestas sosten¨ªan entonces, como hoy, que la mayor¨ªa de los espa?oles prefieren el di¨¢logo y la convivencia como instrumentos para resolver los problemas y no la crispaci¨®n.

El trazo grueso no le funcion¨® al PP y Rajoy aprendi¨® la lecci¨®n. En su segunda legislatura en la oposici¨®n pr¨¢cticamente desaparecieron las movilizaciones callejeras contra el Gobierno. Rajoy, que habl¨® con el Gobierno cuando ETA declar¨® el cese definitivo del terrorismo en octubre de 2011, mantuvo una actitud prudente. Sin embargo, Mayor vaticin¨® que ETA regresar¨ªa al terrorismo tras las elecciones. Mayor se equivoc¨® y lejos de reconocer su error garrafal esgrimi¨® la tesis que Rajoy no asumi¨® y que acaba de abrazar Casado: que el proyecto de ETA se reaviva en Catalu?a con la complicidad socialista.