Unas elecciones generales m¨¢s inciertas de lo que parece

Las elecciones llegan cuando las encuestas dan ventaja a la derecha. Seg¨²n el promedio de sondeos de EL PA?S, el PSOE marchar¨ªa primero rondando el 24% de votos y le seguir¨ªan PP (21%), Ciudadanos (18%), Unidos Podemos (15%) y Vox (11%). Este es el primer escenario: un resultado as¨ª dar¨ªa la victoria al bloque de PP, Vox y Ciudadanos. Sin embargo, su ventaja es m¨¢s estrecha de lo que puede parecer a primera vista.

Las encuestas dicen que la mayor¨ªa de derechas es el resultado m¨¢s probable, pero no muy probable. PP, Ciudadanos y Vox obtendr¨ªan alrededor de 177 esca?os, que es una suma precaria: los sondeos dicen que esa mayor¨ªa tiene sus opciones al 50 por ciento y que es casi tan probable que ocurra como que no ocurra.

?Qu¨¦ c¨¢lculos habr¨¢n hecho en Moncloa para decidirse a convocar las elecciones el 28 de abril? Confiar¨¢n en reactivar al electorado de izquierdas aprovechando el clima de polarizaci¨®n y presentando a Vox como la amenaza a combatir yendo a votar. Y quiz¨¢s est¨¦n contando, tambi¨¦n, con un ¡°efecto urnas¡± que movilice a los suyos y equilibre la mayor activaci¨®n que se observa a su derecha. A menudo, es m¨¢s f¨¢cil estar desmotivado delante de un encuestador (y decirle que est¨¢s indeciso o que no puedes contestarle justo ahora) que quedarte en casa cuando realmente eres llamado a votar.

Por eso no es descabellado que la izquierda piense en remontar. La mayor¨ªa de PP, Vox y Ciudadanos es muy justa en esca?os, a pesar de que el viento sopla a su favor: las encuestas les dan un 49% de votos, que es una cifra con pocos precedentes. En 2016 el centro-derecha y la derecha se qued¨® en el 46% de votos y en 2015 en el 43%. En realidad esa mitad del electorado solo se acerc¨® al 49% de votos en 2011, despu¨¦s de siete a?os de Gobierno socialista y en plena crisis, cuando la suma de PP y UPyD obtuvo un 49,3% de votos.

Escenario 2: sube la izquierda

En realidad, basta un error normal en las encuestas para cambiar las mayor¨ªas viables. Imaginemos, por ejemplo, que efectivamente se produce una reactivaci¨®n de la izquierda y que PSOE y Unidos Podemos consiguen batir las encuestas actuales en 3,2 puntos.

En ese escenario, la suma de PP, Vox y Ciudadanos perder¨ªa probablemente la mayor¨ªa y se abrir¨ªan dos alternativas alrededor del PSOE. El partido del gobierno sumar¨ªa m¨¢s de 176 esca?os con Unidos Podemos y todos (o algunos) de los partidos perif¨¦ricos (ERC, PDeCat, PNV, etc¨¦tera). Adem¨¢s, la suma de PSOE y Ciudadanos podr¨ªa alcanzar tambi¨¦n la mayor¨ªa, siempre que ambos partidos mantuviesen la fuerza relativa que exhiben dentro de sus bloques.

No es un escenario arbitrario. Esos 3,2 puntos de desviaci¨®n respecto de las encuestas actuales se corresponden con el error medio de los sondeos en Espa?a a 60 d¨ªas de unas elecciones, seg¨²n un an¨¢lisis de todas las generales desde 1986. Y ese es solo el error medio; no ser¨ªa raro que las encuestas se desviasen m¨¢s a¨²n del resultado final.

Escenario 3: sube la derecha

Un ascenso de la derecha parece menos probable porque tiene en su contra el argumento de la ¡°regresi¨®n a la media¡± (en 2015 y 2016 la derecha tuvo un resultado peor de lo que apuntan ahora las encuestas y eso hace m¨¢s f¨¢cil que retrocedan en lugar de que sigan subiendo). Pero eso no es una garant¨ªa. Las encuestas podr¨ªan estar qued¨¢ndose cortas con la fuerza de la derecha, o como pas¨® en Andaluc¨ªa, minusvalorar la desactivaci¨®n de la izquierda.

El siguiente gr¨¢fico muestra un escenario donde la suma de PP, Cs y Vox mejora sus sondeos actuales en 3,2 puntos. En ese caso, la mayor¨ªa de los tres partidos de la derecha ser¨ªa mucho m¨¢s probable y aumentar¨ªan las opciones para un acuerdo entre PP y Ciudadanos que excluyese a Vox y se apoyase, quiz¨¢s, en Coalici¨®n Canaria y el PNV.

Estos tres escenarios reflejan la incertidumbre de unas elecciones que se acaban de convocar. Demuestran que desviaciones normales de los sondeos, en sentido estad¨ªstico, pueden abrir y cerrar posibles mayor¨ªas. Y solo hemos jugado con los votos de los bloques. Cambios en los apoyos de cada partido ¡ªpor ejemplo, si Unidos Podemos creciese a costa del PSOE o si el PP se hundiese en beneficio de Vox¡ª, tambi¨¦n tienen efectos determinantes sobre las mayor¨ªas y los posibles gobiernos.

Metodolog¨ªa. Estos n¨²meros son un ejercicio de aproximaci¨®n. Primero, porque la encuestas siempre lo son; segundo, porque no han parado de moverse en el ¨²ltimo a?o; y tercero, porque la convocatoria electoral podr¨ªa cambiar la din¨¢mica electoral.

Promedio de encuestas. El promedio tienen en cuenta decenas de sondeos para mejorar su precisi¨®n. Los datos han sido recopilados en su mayor¨ªa en Wikipedia. En el caso del CIS se incluyen una estimaci¨®n propia a partir de sus datos en brutos. El promedio est¨¢ ponderado para dar distinto peso a cada encuesta seg¨²n tres factores: el tama?o de la muestra, la casa encuestadora y la fecha. Ahora mismo ese promedio arroja los siguientes resultados: PSOE 24% de votos, PP 21%, Ciudadanos 18%, Unidos Podemos 15% y Vox 11%.

Estimaci¨®n de esca?os. El c¨¢lculo de diputados consiste en tres pasos: 1) tomamos el promedio de encuestas a nivel nacional, 2) distribuimos el total de votos sobre cada provincia, tomando como referencia los resultados electorales de 2016, y 3) calculamos los esca?os en cada provincia aplicando el m¨¦todo D¡¯Hondt. El voto de PP, PSOE, Ciudadanos Unidos Podemos y el resto de partidos lo proyectamos sobre cada provincia tomando el resultado de 2016 como referencia. La ¨²nica excepci¨®n es Vox, por ser un partido pr¨¢cticamente nuevo. En su caso usamos los datos de transferencias desde el resto de partidos. Sabemos por encuestas (del CIS, Celeste-tel, Metroscopia e IMOP) que alrededor del 60% de los votantes de Vox vienen del PP, un 18% de Ciudadanos, un 3% del PSOE, un 4,5% de Podemos y un 15% de la abstenci¨®n. Estimamos el voto de Vox en cada provincia a partir del voto de esos partidos en 2016, asumiendo que los flujos son iguales en todas.

El error de las encuestas en Espa?a. El error absoluto medio (MAE) de los promedios de encuestas en Espa?a ha rondado los 2 puntos por partido (seg¨²n una base de datos que hemos construido con todas las elecciones generales desde 1986). Pero esos errores dependen de dos cosas: del tama?o del partido y de la cercan¨ªa de las elecciones. Para tener en cuenta esos factores hemos recurrido a la base de datos de Jennings y Wlezien, recientemente publicada en Nature. Hemos analizado los errores de m¨¢s de 4.100 encuestas en 241 elecciones de 19 pa¨ªses occidentales. As¨ª hemos construido un modelo sencillo que estima el error MAE del promedio de votos estimado por las encuestas para cada partido, teniendo en cuenta: i) su tama?o (es m¨¢s f¨¢cil estimar un partido que ronda el 5% de votos que uno que supera el 30%), y ii) los d¨ªas que faltan hasta las elecciones (porque las encuestas mejoran al final). De acuerdo con ese modelo, el error medio esperado para un partido con el 20% de votos es de 2,3 puntos la ¨²ltima semana y de 3,2 puntos cuando todav¨ªa quedan 60 d¨ªas para la votaci¨®n. El margen de error (al 95% de confianza) supera los 5 puntos la ¨²ltima semana y casi alcanza los 8 cuando quedan 60 d¨ªas.