¡°El sistema ya no funciona bien, hay que ajustarlo¡±

Hay muy pocos servidores p¨²blicos en Espa?a que sepan m¨¢s del Estado de las Autonom¨ªas creado a partir de la Constituci¨®n de 1978 que el catedr¨¢tico de 73 a?os Eliseo Aja, director desde hace 30 del Foro que ausculta el funcionamiento de este modelo auton¨®mico. Aja fue, adem¨¢s, el primer presidente del Consejo de Garant¨ªas Estatutarias de la Generalitat de Catalu?a, un ¨®rgano creado en 2009 por el presidente socialista Jos¨¦ Montilla, equivalente al Tribunal Constitucional y pensado para velar porque las leyes que aprueba el Parlament catal¨¢n se adapten a la Carta Magna y al Estatuto de Autonom¨ªa. Fue relevado en 2017.

La VIII octava edici¨®n del Foro de las Autonom¨ªas present¨® el jueves en el Senado, en una jornada de debate y confraternizaci¨®n, su balance entre sus m¨¢s de 30 expertos miembros, que es mucho m¨¢s que una foto fija de c¨®mo estamos como pa¨ªs y qu¨¦ nos espera. Las autonom¨ªas, que son las que financian este proyecto con el consorcio de algunas universidades, les pidieron a los especialistas que este a?o pusieran parte de su foco en el fen¨®meno de la despoblaci¨®n y el de los Menas,menores extranjeros no acompa?ados.

Pregunta: ?Cu¨¢l es el balance del Foro de las Autonom¨ªas tras estos 30 a?os?

Respuesta: Las reglas de la Constituci¨®n estaban pensadas para un bipartidismo imperfecto, que ha permitido gobiernos del PSOE y PP con apoyos de los nacionalistas, pero hemos pasado a un pentapartidismo imperfecto que sigue necesitando a los nacionalistas y que ha conllevado que no se aprueben leyes, ni presupuestos. Hay m¨¢s partidos pero no se producen gobiernos de coalici¨®n ni pactos de investidura y habr¨ªa que adaptar el sistema para favorecerlos como en los pa¨ªses de centro europa.

P: ?C¨®mo hemos cambiado?

R: Tras la Constituci¨®n, los estatutos de Catalu?a, Euskadi, Andaluc¨ªa y Galicia se llega con los 80 r¨¢pidamente a una etapa de mucha ilusi¨®n y reconversi¨®n del estado centralista en otro descentralizado que acaba en 2001 con los ¨²ltimos traspasos de Sanidad. A partir de ah¨ª las autonom¨ªas comienzan a gobernar y vienen los problemas, y cuando llega la crisis econ¨®mica deja sin financiaci¨®n el sistema construido. La crisis de Catalu?a no surge por el factor ¨²nico del Estatuto de 2006 y la sentencia del Constitucional en 2010, eso es un cuento chino.

P: ?Nos hemos pasado con el Estado de las Autonom¨ªas?

R: No, pero no funciona bien, porque no lo construimos bien. Todos los conflictos de competencias acaban en el Constitucional, que no es su funci¨®n. No tenemos en cada land o autonom¨ªa una Constituci¨®n sino un estatuto y los estatutos son tan leyes org¨¢nicas como por ejemplo la de Educaci¨®n y eso provoca como se?ala el catedr¨¢tico Javier Garc¨ªa Roca 17 sistemas competenciales. Adem¨¢s, no existe colaboraci¨®n entre las autonom¨ªas porque no hay ¨®rganos que promuevan esa colaboraci¨®n, porque las comisiones bilaterales dependen de lo que decida el ministro de turno y el Senado no cumple esa funci¨®n.

P: ?Qu¨¦ habr¨ªa que hacer ahora para funcionar mejor?

R: Ajustar las piezas. Ya hay ejemplos concretos de sistemas viables que funcionan como el federal alem¨¢n, austriaco, suizo o de Estados Unidos. Alemania ha aplicado 60 reformas a su Constituci¨®n. Y deber¨ªamos a?adir el principio b¨¢sico de lealtad federal, que significa que cualquiera de los miembros debe respetar a todos los dem¨¢s de la federaci¨®n y debe tener un ¡®comportamiento amistoso¡¯. Nadie deber¨ªa hablar mal del sistema espa?ol y deber¨ªa haber una visi¨®n global integrada y no 17, cada una por su cuenta.

P: ?Y c¨®mo se ajustan ahora las piezas que fallan del sistema?

R: No hay otro camino que la reforma de la Constituci¨®n. El Estatuto catal¨¢n pretendi¨® reformar cosas de la Constituci¨®n y una soluci¨®n seria para Catalu?a tiene que ser aceptada por todas las autonom¨ªas.

P: ?C¨®mo se trabaja eso?

R: Lo primero deber¨ªa ser crear un lenguaje com¨²n, porque hay una falta total de comunicaci¨®n entre los Gobiernos. Las instituciones no tienen libertad de expresi¨®n, son los ciudadanos. Y luego, sobre todo, atender al principio de lealtad de todos y no utilizar, por parte del Estado, m¨¦todos extraordinarios como la intervenci¨®n de la autonom¨ªa a trav¨¦s del art¨ªculo 155 que solo tiene sentido en situaciones excepcionales.