Una candidata nada convencional que reivindica su cresta frente a los insultos
Leonor S¨¢nchez, aspirante al Ayuntamiento de ?vila por la coalici¨®n IU-Equo, contesta a los comentarios ofensivos en redes sociales: "Ni soy de ETA ni he quemado iglesias"
No han sido problemas con Hacienda ni actuaciones il¨ªcitas de su pasado. Los insultos que ha recibido Leonor S¨¢nchez, candidata por la coalici¨®n IU-Equo al Ayuntamiento de ?vila, se han debido a su est¨¦tica. La han tachado de "casposa" o de "delincuente" y han cuestionado su val¨ªa simplemente por su peinado, una fosforita cresta roja. Bajo la foto del cartel electoral de los pr¨®ximos comicios, el 26 de mayo, decenas de comentarios y memes colgados en foros o redes sociales han aludido despectivamente a su apariencia. Un peri¨®dico digital incluso public¨® una noticia enfrent¨¢ndola a la aspirante a la alcald¨ªa de Podemos, Pilar Baeza, que cumpli¨® condena por asesinato. El texto hablaba de una competici¨®n ¡°por ver qui¨¦n presenta al candidato m¨¢s extravagante¡±.
Esta situaci¨®n no ha afectado a la protagonista. Leonor S¨¢nchez, nacida en B¨¦jar (Salamanca) en 1984 y residente ¡°toda la vida¡± en ?vila, cree que ¡°hace falta much¨ªsimo m¨¢s que la opini¨®n de un pu?ado de personas llenas de bilis¡± para hundirse. La n¨²mero tres de esta lista pol¨ªtica responde por tel¨¦fono en pleno traj¨ªn de campa?a. ¡°Llevo toda la vida escuchando este tipo de apreciaciones¡±, defiende. Desde joven, S¨¢nchez luce un atuendo acorde a sus gustos musicales. Esto nunca ha pasado desapercibido en esta capital de provincia de menos de 60.000 habitantes y que encadena 28 a?os de mandato del Partido Popular. ¡°No hay nada nuevo: todo ya me lo han llamado miles de veces¡±, concede.
S¨¢nchez s¨ª que se ha sorprendido por el alcance de la pol¨¦mica. ¡°Me enter¨¦ porque me mandaron algunos amigos por WhatsApp varias capturas en las que me hab¨ªan sustituido del cartel por un gallo¡±, recuerda, ¡°y me hizo gracia¡±. Formada en el colegio Pur¨ªsima Concepci¨®n de ?vila, la candidata inici¨® posteriormente unos estudios de Pol¨ªticas y termin¨® un grado medio. ¡°Dej¨¦ la carrera porque mis inquietudes cambiaron. Soy educadora e int¨¦rprete ambiental¡±, apunta, ¡°y tambi¨¦n artesana de accesorios elaborados con resina y escritora aficionada. No necesito inventarme titulaciones: sobra academicismo y ganas de aparentar¡±. Adem¨¢s, S¨¢nchez se ha presentado como ¡°activista en favor de las personas desfavorecidas¡±. Algo que lleva tiempo haciendo en diferentes iniciativas locales como el Centro Social Autogestionado La Casa Abril, donde se imparten talleres y se recoge ropa o comida. ¡°Pero no tengo ning¨²n cargo, no la gestiono, como se ha dicho¡±, matiza, ¡°el inmueble se dirige de forma horizontal, en asambleas, y es apartidista¡±.
La inquietud por cambiar las cosas en ?vila y el ¡°despertar¡± que vio en manifestaciones como la del D¨ªa de la Mujer, el 8 de marzo, la empujaron a postularse pol¨ªticamente. ¡°Compart¨ªa los valores de Equo y en noviembre me un¨ª al partido. Intentamos hacer listas conjuntas con otras formaciones que llevaban programas parecidos, como Podemos o Trato Ciudadano, pero al final solo sali¨® la coalici¨®n con Izquierda Unida¡±, explica. Ante las acusaciones de cobrar una paga o de eludir h¨¢bitos de higiene, S¨¢nchez es tajante: ¡°No me est¨¢n pagando 3.000 euros ni lo har¨¢n si llego a ser concejal. No tengo piojos, me ducho y no tomo drogas¡±, advierte. "Ni soy de ETA ¡ªque se disolvi¨® definitivamente en 2018, superadlo¡ª ni he quemado iglesias", asegura en referencia a? conversaciones virtuales de las que ha sido objeto.
Considera S¨¢nchez que este debate no es nuevo y que ya ocurri¨® con?Alberto Rodr¨ªguez, diputado de Podemos con rastas en el pelo:?¡°Me allan¨® el terreno¡±, bromea. Ya entonces hubo voces contra este?look?y hasta una veterana como Celia Villalobos afirm¨® que no le importaba tal peinado ¡°siempre que est¨¦ limpio y no me peguen un piojo¡±. ¡°Se han hecho estas valoraciones desde medios pseudoperiod¨ªsticos y de poca calidad humana. Creo que en realidad no se escandalizan por una cresta, sino por las ideas que hay detr¨¢s¡±, reflexiona desde la ¡°guasa¡± con que se est¨¢ tomando esta fama repentina. ¡°Es parte de la libertad de expresi¨®n¡±, indica, a pesar de que hay sentencias que rozan lo condenable: ¡°Parece que con el auge de Vox y la extrema derecha -¡ªque siempre ha estado ah¨ª¡ª se ha perdido un poco la verg¨¹enza¡±.
S¨¢nchez asegura que en privado lo que m¨¢s ha tenido han sido apoyos y buenas palabras por parte de todos los grupos. Muchos tambi¨¦n la han respaldado p¨²blicamente, tildando de clasistas o de ignorantes a los part¨ªcipes en los insultos. ¡°Lo mejor de todo es que todav¨ªa no he hecho nada, ni bueno ni malo¡±, esgrime S¨¢nchez, que zanja la controversia con una de las m¨¢ximas que ha aprendido: ¡°La est¨¦tica se puede cambiar en unos minutos; los prejuicios, no¡±.
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