La defensa de Junqueras, Romeva y Forn admite que cometieron desobediencia, pero niega la rebeli¨®n
El abogado del exvicepresidente de la Generalitat denuncia deficiencias en las pruebas de las acusaciones
Tras 51 sesiones, 422 testigos y muchas horas de pruebas periciales y documentales, en el? juicio del proc¨¦s parec¨ªa estar todo dicho. Pero los informes definitivos de las acusaciones y las defensas han brindado un asalto final menos previsible de lo esperado. Los fiscales exprimieron la semana pasada las cuatro horas que le dio el tribunal para apuntalar el delito de rebeli¨®n y este martes le toc¨® el turno a los abogados de los principales acusados. Las defensas dejaron atr¨¢s los discursos ideol¨®gicos a los que se aferraban al inicio de la causa y pusieron sobre la mesa sus contraargumentos jur¨ªdicos. Solo hicieron una concesi¨®n, con coste casi nulo para los procesados: asumir el delito de desobediencia de forma expl¨ªcita, un delito que no conlleva penas de c¨¢rcel.
Los abogados de los l¨ªderes independentistas han tenido una semana para estudiar los informes de las acusaciones y la han aprovechado. Algunos admit¨ªan este martes que ten¨ªan el escrito de conclusiones pr¨¢cticamente escrito desde hace d¨ªas, pero ese documento previo acab¨® en la papelera el martes pasado, tras escuchar las cuatro horas de informe de la Fiscal¨ªa. Un informe que acus¨® a los l¨ªderes independentistas de cometer ¡°una rebeli¨®n diferente¡± (sin violencia armada) y que elev¨® el proc¨¦s a de ¡°golpe de Estado¡±.
Las defensas que, salvo alguna excepci¨®n, arrancaron el juicio alegando argumentos m¨¢s pol¨ªticos que jur¨ªdicos, creyeron encontrar en el informe de la Fiscal¨ªa varias lagunas, acusaciones que consideran no probadas y que les abren rendijas con las que no contaban para cuestionar la acusaci¨®n.
Los cuatro meses del juicio han servido para que los l¨ªderes independentistas, como mal menor, admitan sin reparos que incurrieron en uno o varios delitos de desobediencia al incumplir reiteradamente resoluciones del Tribunal Constitucional. ¡°Se est¨¢ confundiendo la desobediencia con la rebeli¨®n¡±, afirm¨® Andreu Van den Eynde, que defiende al exvicepresidente de la Generalitat Oriol Junqueras y el exconsejero de Exteriores Ra¨¹l Romeva. M¨¢s expl¨ªcito fue Javier Melero, el abogado del exconsejero del Interior Joaquim Forn. ¡°La trinchera de la desobediencia la cedo con gusto. Si la desobediencia puede derivarse de participar en un Gobierno en el que se dice que si hace falta se desobedecer¨¢n las resoluciones del Tribunal Constitucional, contra eso no puedo hacer nada¡±.
Ya en las intervenciones iniciales del juicio, muchos de los discursos de los propios acusados llevaban impl¨ªcitos la asunci¨®n del delito de desobediencia. Pero ayer esa asunci¨®n velada se hizo expl¨ªcita como estrategia com¨²n de defensa. Es una concesi¨®n que tiene escaso coste para los procesados porque este es el ¨²nico de los delitos que se les atribuye que no acarrea penas de c¨¢rcel, solo de inhabilitaci¨®n. Y, a cambio, deja r¨¦dito pol¨ªtico: en el discurso independentista, la desobediencia a las resoluciones del Tribunal Constitucional encaminadas a frenar el refer¨¦ndum no solo se asume, sino que se reivindica.
Hecha esta concesi¨®n, los abogados de Junqueras y Romeva (Andreu Van den Eynde), de Forn (Javier Melero), del exl¨ªder de la ANC Jordi S¨¤nchez y de los exconsejeros Jordi Turull y Josep Rull (Jordi Pina) intentaron desmontar el escrito de la Fiscal¨ªa. Sus discursos resultaron complementarios para tocar lo que las defensas consideran los puntos d¨¦biles de la acusaci¨®n, sobre todo los relativos a los delitos de rebeli¨®n .
Los letrados sostienen que la rebeli¨®n exige una violencia ¡°id¨®nea¡± capaz de hacer claudicar al Estado y eso, aseguran, ni ocurri¨® ni estuvo cerca de ocurrir. En este punto, los abogados se basan en la propia reacci¨®n del Gobierno central, que no decret¨® el Estado de sitio. Van den Eynde sostuvo que la Fiscal¨ªa no tiene una sola prueba que vincule a Junqueras y a Romeva con los actos de violencia en los que puede sustentarse la rebeli¨®n, mientras que el abogado de Forn intent¨® hacer ver que ni la Generalitat se crey¨® la declaraci¨®n de independencia del 27 de octubre.
¡°No se arr¨ªa la bandera, no se comunica nada al cuerpo diplom¨¢tico. Soy consciente de que a alguien puede molestarle esta versi¨®n de los hechos. Pero esto es lo que ocurri¨®¡± afirm¨® Melero, un penalista muy alejado de las tesis independentistas y que ayer us¨® las contradicciones del secesionismo en su propio beneficio y, por extensi¨®n, en el del resto de acusados: ¡°S¨¦ que molesta en determinados c¨ªrculos, pero el 155 fue acatado de inmediato, funcion¨® perfectamente. Todo el mundo se adapt¨®¡±.
El abogado Pina centr¨® su defensa en cuestionar los pilares de la acusaci¨®n. Rechaz¨® que los l¨ªderes independentistas hayan incurrido en rebeli¨®n porque, asegur¨®, no se le puede atribuir a ellos los dos elementos que definen ese delito: el alzamiento p¨²blico y la violencia. ¡°La violencia en un delito que tiene las penas que tiene este, ?de verdad que tiene que ser la violencia que nos proclama el Ministerio Fiscal? ?Escupitajos, un lanzamiento valla, unas patadas? ?Esa es la violencia necesaria para doblegar al Estado?¡±, se pregunt¨®. ¡°Y lo m¨¢s grave: ?aunque sea cierto cabe atribu¨ªrselo a estos se?ores?¡±, dijo se?alando a los acusados. Unos acusados que, si se cumple el horario, tendr¨¢n la ocasi¨®n de dirigirse este mi¨¦rcoles por ¨²ltima vez al tribunal para intentar convencerles de su inocencia.
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