Interior restringe los ensayos con presos tras el pol¨¦mico experimento con electrodos

Instituciones Penitenciarias da un nuevo paso para extremar el control sobre los experimentos que se hacen con presos. Su m¨¢ximo responsable, ?ngel Luis Ortiz, dict¨® el martes una instrucci¨®n interna, a la que ha tenido acceso EL PA?S, en el que fija los nuevos requisitos que deber¨¢ cumplir cualquier investigaci¨®n con la poblaci¨®n reclusa. La medida se toma despu¨¦s de que, el pasado mayo, Prisiones pusiera punto final por irregularidades a un experimento con electrodos en internos violentos que hab¨ªa provocado la queja del Defensor del Pueblo.

El nuevo protocolo del departamento dependiente del Ministerio del Interior sustituye a la instrucci¨®n interna que estaba en vigor desde 2005 y que hab¨ªa permitido que en 2016 ¡ªcuando gobernaba el PP¡ª se iniciara en las c¨¢rceles de Huelva y C¨®rdoba un experimento en el que se somet¨ªa a reclusos a estimulaci¨®n el¨¦ctrica cerebral para estudiar su agresividad.

En total, 41 presos, 15 de ellos condenados por homicidio, se sometieron a un ensayo en el que les colocaron electrodos en la cabeza y, durante media hora, recibido una leve corriente de 1,5 miliamperios con el fin de activar su corteza prefrontal, un ¨¢rea del cerebro potencialmente relacionada con la agresividad. El experimento hab¨ªa tenido tres fases y los investigadores ¡ªcoordinados por los psic¨®logos Andr¨¦s Molero, de la Universidad de Huelva, y Guadalupe Nathzidy Rivera, de la Universidad Aut¨®noma de Baja California¡ª hab¨ªan solicitado a comienzos de este a?o permiso para una cuarta.

Tras salir entonces a la luz p¨²blica las caracter¨ªsticas de la prueba, Prisiones decidi¨®, primero, suspender provisionalmente la autorizaci¨®n y, en mayo, ¡°de forma definitiva¡±. Uno de los argumentos que esgrimi¨® entonces Instituciones Penitenciarias fueron supuestas irregularidades en la informaci¨®n que se facilit¨® a los reclusos que se sometieron al ensayo. Entre ellas, que no se les inform¨® de manera suficiente sobre la ¡°efectividad y seguridad¡± de la prueba ni sus posibles ¡°consecuencias a largo plazo no previstas o conocidas¡±.

El Defensor del Pueblo tambi¨¦n mostr¨® entonces en un informe ¡°su preocupaci¨®n¡± por aquel estudio cient¨ªfico precisamente por ¡°las dudas sobre el otorgamiento verdaderamente libre del consentimiento dado por los internos¡±. En concreto, Instituciones Penitenciarias detect¨® en aquel experimento varias irregularidades referidas a los documentos que los presos firmaron como muestra de que participaban voluntariamente y que, seg¨²n el informe que elabor¨® entonces, no cumpl¨ªan los requisitos m¨ªnimos dadas las caracter¨ªsticas de las pruebas a las que se iban a someter.

La nueva instrucci¨®n, que entrar¨¢ en vigor a mediados de agosto, incide, precisamente, en la informaci¨®n que se facilitar¨¢ a los reclusos para que estos decidan si intervienen o no en el mismo. ¡°La voluntariedad de la participaci¨®n de los internos en estas investigaciones habr¨¢ de quedar constatada documentalmente, por el procedimiento del consentimiento informado¡±, recalca el documento interno. Este a?ade que, adem¨¢s, se debe informar al recluso de ¡°las caracter¨ªsticas del estudio¡±. Tambi¨¦n de que su participaci¨®n en el mismo no llevar¨¢ aparejado ning¨²n tipo de beneficio penitenciario.

¡°Beneficio objetivo¡±

Prisiones hace ahora adem¨¢s hincapi¨¦ en que para que un estudio cient¨ªfico con presos sea autorizado este debe suponer ¡°un beneficio objetivo y medible para los internos y para la Administraci¨®n Penitenciaria, adem¨¢s de un avance en el estado cient¨ªfico de la espec¨ªfica cuesti¨®n que el estudio a aborde¡±. Para ello, los responsables del experimento deber¨¢n detallar, no solo la metodolog¨ªa que se va a seguir, sino tambi¨¦n ¡°los innovadores resultados que se esperan alcanzar¡±.

La nueva instrucci¨®n exige que los investigadores expliquen si los estudios que se quieren llevar a cabo se ha realizado ¡°con la poblaci¨®n libre y las espec¨ªficas circunstancias en que ¨¦stos se han llevado a cabo¡±.

De no ser as¨ª, a partir de ahora la solicitud deber¨¢ fundamentar el porqu¨¦ ¡°se ha escogido a la poblaci¨®n penitenciaria como ¨²nica muestra de referencia¡±, adem¨¢s de garantizar ¡°con medidas concretas que la investigaci¨®n se va a llevar a cabo en las mismas condiciones de igualdad¡± que se aplicar¨ªa a otras personas en situaci¨®n de libertad¡±. Hasta ahora, no se exig¨ªa que se explicara por qu¨¦ se hab¨ªa con reclusos y no con otro tipo de poblaci¨®n.