Mar¨ªa Chivite, la mujer que resarci¨® al socialismo navarro
La dirigente ha logrado lo que Ferraz vet¨® en 2007 al PSN cuando lo dirig¨ªa su t¨ªo Carlos: gobernar en coalici¨®n con los nacionalistas en la comunidad
Mar¨ªa Chivite llega a la presidencia de Navarra con una fragil mayor¨ªa. Su legislatura ser¨¢ un campo de minas en el que cada paso en falso tendr¨¢ consecuencias m¨¢s all¨¢ de la comunidad foral. Observada por la oposici¨®n de derechas, por la izquierda abertzale de EH Bildu y por su propio partido, Chivite asume el reto casi con el ¨²nico apoyo incondicional de sus m¨¢s cercanos. Lejos quedan los a?os fuera de los focos, en los que se fogeaba como concejal o se luc¨ªa en el Senado, donde lleg¨® a ser premiada en 2014 como parlamentaria revelaci¨®n.
En estos cinco ¨²ltimos a?os, su carrera pol¨ªtica ha dado un vuelco, muchas veces repletos de sinsabores y frustraciones. Nacida en 1978 en Cintru¨¦nigo (41 a?os), en la ribera navarra, se estren¨® como concejal en su pueblo entre 2003 y 2007, para ir m¨¢s tarde, de 2011 a 2013, en Eg¨¹¨¦s. Afiliada socialista desde los 20 a?os, por influjo de su familia, obtuvo el acta de parlamentaria en 2007 y pas¨® a ser senadora en 2011.
Fue en 2014, cuando Chivite empez¨® a tomar cierto protagonismo. Ese a?o apoy¨® a Eduardo Madina en las primarias frente a Pedro S¨¢nchez. Pocos meses despu¨¦s, el actual presidente en funciones decidi¨® ficharla como portavoz socialista en el Senado, cargo que abandon¨® en junio de 2015. Y en diciembre se hizo con las riendas del partido en Navarra tras una turbulenta salida de su antecesor, Roberto Jim¨¦nez, quien hab¨ªa desafiado a la direcci¨®n federal con la frase ¡°El PSOE en Navarra soy yo¡±. El partido que entonces encabezaba Alfredo P¨¦rez Rubalcaba impuso un veto al PSN de Jim¨¦nez hasta hacerle desistir de presentar una moci¨®n de censura para desalojar a Yolanda Barcina (UPN). ¡°Chivite recibi¨® una herencia muy dif¨ªcil, pero consigui¨® darle la vuelta¡±, recuerdan en su partido.
No tuvo un buen estreno en la pol¨ªtica regional. En 2015, con ella como cartel electoral, el PSN logr¨® uno de sus peores resultados: quinta fuerza en el Parlamento foral. ¡°Quedamos como un partido irrelevante, pero aquello fue lo mejor que nos pod¨ªa pasar¡±, recuerda Santos Cerd¨¢n, secretario de Coordinaci¨®n Territorial del PSOE y su mentor pol¨ªtico. ¡°Estas elecciones no son las tuyas¡±, le dijeron para consolar sus penas. Tocaba iniciar una transici¨®n complicada que Chivite condujo, siempre rodeada de su n¨²cleo de m¨¢xima confianza, ¡°con mucha firmeza y claridad de ideas¡±.
Desde su elecci¨®n como secretaria general, de la mano de Cerd¨¢n y Ram¨®n Alz¨®rriz, su actual n¨²mero dos, se propuso poner fin a la etapa de entendimiento con UPN, porque ¡°cuando estamos con la derecha la gente nos da la espalda¡±, comenta. ¡°Se empe?¨® entonces en situar el debate pol¨ªtico en el eje izquierda-derecha, y desterrar la divisi¨®n constitucionalistas-nacionalistas¡±, se?alan en su entorno. Cuatro a?os despu¨¦s, en los pasados comicios auton¨®micos, ha logrado sacar a flote las siglas: segunda fuerza con 11 esca?os, cuatro m¨¢s que en 2015.
Acept¨® asumir el reto de formar Gobierno con una estrategia que pasaba por negar su apoyo a Navarra Suma, la uni¨®n de fuerzas de la derecha, y evitar cualquier pacto con EH Bildu. La abstenci¨®n de la coalici¨®n abertzale ¡ª¡°a cambio de nada¡±, insisten en el PSN¡ª ha resultado finalmente clave para que Chivite sea presidenta. ¡°Es de esas mujeres navarras que han nacido en una familia socialista de la Ribera, donde el socialismo es m¨¢s de izquierdas y anti UPN por la represi¨®n que se vivi¨® all¨ª en la Guerra Civil. Es t¨ªmida, pero se crece en el estrado. En las relaciones personales es distante y siempre procura estar rodeada por su gente¡±, describe una representante de Geroa Bai, el partido que integra al PNV y con el que Chivite gobernar¨¢ ahora en una coalici¨®n que tambi¨¦n incluye a Podemos.
Ella ha conseguido lo que su t¨ªo Carlos Chivite no pudo en 2007, cuando fue desbaratado el intento de los socialistas de apear a UPN del Ejecutivo foral. Ese a?o, el PSN fue tercera fuerza y estuvo a punto de conquistar el Gobierno navarro tras llegar a un pacto con Nafarroa Bai (la coalici¨®n que integraban el PNV y Aralar) e IU para investir al socialista Fernando Puras. Pero Ferraz impuso a Carlos Chivite (secretario general en Navarra) que rectificase para favorecer la elecci¨®n de Barcina. Unos meses despu¨¦s el t¨ªo de Mar¨ªa falleci¨® v¨ªctima de un infarto cerebral.
En las filas de su partido ponen de relieve que Chivite ha logrado ¡°sacar a EH Bildu del Gobierno¡± de Navarra ¡ªen la pasada legislatura formaba parte del equipo de Uxue Barkos¡ª. Y recuerdan que en 1991 (ese a?o ETA caus¨® 46 muertos, incluido el atentado contra la casa cuartel de Vic), UPN y Herri Batasuna votaron juntos contra la candidatura del PSN a la presidencia de Navarra, lo que permiti¨® que Juan Cruz Alli (UPN) fuese investido por el procedimiento autom¨¢tico.
Chivite es madre de una ni?a. Su pareja es hijo de un hist¨®rico socialista que ha sido alcalde durante 16 a?os. Licenciada en Sociolog¨ªa por la Universidad P¨²blica de Navarra, ha trabajado como t¨¦cnica de empleo, consultora y en el gabinete de sociolog¨ªa de UGT, desde donde dio el salto la pol¨ªtica. Ella se autodefine como ¡°inconformista y so?adora¡±, dos cualidades poco ¨²tiles en el campo de minas en el que se adentra.
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