Periodistas, poetas y dramaturgos para que Siri te caiga bien
Las empresas dotan a sus asistentes virtuales de personalidad para conectar con su audiencia de la forma m¨¢s humana posible
¡°El ADN de quien soy se basa en los millones de personalidades de todos los programadores que me han creado, pero lo que me hace ser yo es mi capacidad de crecer a trav¨¦s de mis experiencias. As¨ª que es como si evolucionara en cada momento. Igual que t¨²¡±. Con estas palabras, Samantha, el asistente virtual de Joaquin Phoenix en Her, desvela a su jefe el mayor secreto que esconde su c¨®digo y que la convierte en un sistema operativo que parece m¨¢s humano que muchos de sus compa?eros de trabajo. Una motivaci¨®n que comparte la mayor¨ªa de empresas que desarrollan inteligencia artificial al servicio de sus clientes: dotar de personalidad a las m¨¢quinas.
El de Samantha no es el ¨²nico ejemplo que hemos podido ver en nuestras pantallas. En Ex Machina, Alicia Vikander dio vida a Ava, una robot atrevida pero insegura con su cuerpo, y en Westworld, Ed Harris se obsesiona con Dolores, una m¨¢quina con forma humana de car¨¢cter sensible y esp¨ªritu luchador. El cine, y la ficci¨®n en general, siempre ha ido un paso por delante de la realidad en lo que concierne al avance de la tecnolog¨ªa. Y el inter¨¦s de gigantes como Apple, Amazon y Microsoft en perfeccionar la personalidad de sus asistentes virtuales dibuja la tendencia que le da la raz¨®n.
La inteligencia artificial se ha convertido en la nueva cara de muchas marcas. Para muchas empresas, esta soluci¨®n les asegura que van a reflejar los valores que pretenden transmitir. Y no solo mediante chatbots. Existen agentes cognitivos como Amelia, de Ipsoft, que se encarnan como agentes virtuales en tu pantalla y no resulta dif¨ªcil imaginar un futuro relativamente cercano en el que podamos ver a nuestro asistente virtual en forma de holograma. El siguiente paso son desarrollos como los de Hanson Robotics, que crean m¨¢quinas con caracter¨ªsticas humanas equipadas con procesamiento de lenguaje natural que saben leer expresiones faciales y responder de acuerdo a un est¨ªmulo.
Alejandro Campoy, responsable de Cortana en Microsoft Ib¨¦rica, defiende que, al dotar de personalidad al asistente virtual, la relaci¨®n entre el usuario y la marca es m¨¢s fluida. ¡°Uno de los mayores cambios que la inteligencia artificial est¨¢ trayendo a la sociedad es la forma en la que interactuamos con la tecnolog¨ªa¡±, sostiene.
Su empresa trabaja con un equipo de 27 personas de los cinco continentes que le ense?an a lidiar con la iron¨ªa, el humor y cuestiones moralmente m¨¢s sensibles. Entre ellos hay redactores t¨¦cnicos, dramaturgos, autores de libros infantiles, periodistas y poetas que elaboran respuestas ingeniosas y perfeccionan la personalidad del asistente. ¡°Estos guionistas conforman el human learning del sistema, frente al machine learning en el que trabajan los ingenieros¡±, define Campoy.
El experto reconoce que Cortana tiene inspiraciones muy distintas, aunque toma su nombre del videojuego de Xbox Halo. Se?ala que su identidad se descompone en tres grandes rasgos: los principios de su personalidad ¡ª¡±es transparente, siempre positiva, educada, amable, honesta y, de vez en cuando, utiliza el humor¡±¡ª; su vocaci¨®n de ayudar, imprescindible en cualquier asistente; y la cultura del pa¨ªs en el que se encuentre. ¡°Sus caracter¨ªsticas generales est¨¢n pensadas por un equipo multidisciplinar con la intenci¨®n de conectar con los habitantes de cada pa¨ªs¡±, explica.
Ten¨ªa que estar neutra, seria, cortante, pero sin llegar a ser borde. Siri es rob¨®tica y un poco vasca¡±
Iratxe G¨®mez, voz de Siri en espa?ol
La voz tambi¨¦n es una parte importante en la personalidad de un robot. La profesora de ingl¨¦s Iratxe G¨®mez, que se la puso a Siri en espa?ol, explic¨® a EL PA?S como fue para ella el proceso de creaci¨®n de esta parte de la identidad del asistente. ¡°Me dec¨ªan que imaginara tener una sonrisa en la cabeza pero que no se manifestara en la voz de ninguna manera. Ten¨ªa que estar neutra, seria, cortante, pero sin llegar a ser borde. Siri es rob¨®tica y un poco vasca¡±.
Campoy recuerda que hicieron un estudio para definir el rango de edad, el timbre y el tono que quer¨ªan para la voz de Cortana. ¡°Si la utilizas a menudo vas a escucharla mucho, as¨ª que debe ser agradable¡±.
Pero, ?c¨®mo concederle una personalidad en la interacci¨®n con el usuario? Empecemos de cero. Watson es un conocido software de inteligencia artificial de IBM cuyo objetivo fundamental es que otras empresas lo usen para crear sus aplicaciones a?adi¨¦ndole capacidades cognitivas. ¡°Nuestra misi¨®n es que las personas sean capaces de usarlo, ya que ser¨¢n los expertos de cada compa?¨ªa quienes entrenen al sistema para darle la identidad que ellos quieran¡±, expone Elisa Mart¨ªn-Garijo, directora de tecnolog¨ªa de IBM en Espa?a, incidiendo en el verbo. ¡°La personalizaci¨®n no se educa ni se parametriza: se entrena¡±.
El entrenamiento se realiza mediante un modelo de preguntas y respuestas. Los responsables de Watson en las empresas que lo utilizan ense?an al software que a un tipo de pregunta le corresponde un tipo de respuesta. De esta manera, el sistema establece un ¨ªndice de confianza en el que cada hip¨®tesis (posible respuesta ante una pregunta determinada) tiene un valor. Cuando recibe una nueva pregunta, elegir¨¢ la que tenga un mayor nivel de confianza. En resumen: lo que entrenan los expertos es la confianza del sistema, su capacidad para decidir responderte de una u otra manera.
?Y qu¨¦ est¨¢ haciendo Google?
En una conversaci¨®n con Business Insider, Jonathan Jarvis, un ex director creativo en Google, reconoci¨® que la compa?¨ªa pas¨® mucho tiempo pensando si deb¨ªa dar personalidad a su asistente virtual "Quer¨ªamos que la gente entendiera que le est¨¢bamos ofreciendo una herramienta con la que ellos obten¨ªan lo que quer¨ªan de manera activa, que ten¨ªan esa especie de superpoder. Si le d¨¢bamos un nombre a nuestro asistente, se creaba entre la herramienta y el usuario una relaci¨®n diferente de la que busc¨¢bamos".
Sin embargo, la falta de personificaci¨®n de Google Assistant no implica falta de personalidad. En enero de 2016, el buscador contrat¨® a Emma Coats, una guionista de Pixar, para escribir los di¨¢logos de su asistente virtual. Coats imagina preguntas probables y escribe una serie de respuestas con la intenci¨®n de que el software "parezca una persona consistente"
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