Ciberliteratura, m¨¢s all¨¢ del ¡®ebook¡¯, la tableta o las redes sociales

Literatura para Facebook o Twitter, obras para m¨®vil, tabletas y redes sociales, eBooks, blognovelas, booktubers¡­ ?Qu¨¦ implica la ciberliteratura? ?Una expresi¨®n art¨ªstica de vanguardia? ?O es la adaptaci¨®n natural de la literatura tradicional a un mundo conectado? ?Ser¨¢ una tabla de salvaci¨®n digital para la industria? Como todo movimiento complejo puede tener m¨²ltiples facetas, niveles y desarrollo.

En esencia se considera literatura digital aquella obra ¡°que ya se ha creado usando la textualidad electr¨®nica, que no se podr¨ªa traducir al papel. Ha nacido con una dimensi¨®n tecnol¨®gica¡±, explica Mar¨ªa Goicoechea, coordinadora del proyecto de investigaci¨®n eLITE (Edici¨®n Literaria Electr¨®nica) y profesora de la Universidad Complutense de Madrid. Y es aqu¨ª donde llega la primera confusi¨®n. ¡°Una interpretaci¨®n err¨®nea es que literatura electr¨®nica es cualquier texto digitalizado, que se pueda leer en una tableta, en una pantalla¡±, explica Goicoechea. Es decir, para que una obra se considere puramente digital debe ir m¨¢s all¨¢, contar con una determinada estructura y reunir, en un mismo espacio, lenguajes y formas expresivas diversas, desde el texto y la m¨²sica, lo visual o la animaci¨®n.

Pilares de la literatura electr¨®nica son el hipertexto, que implica una propuesta no secuencial (sino laber¨ªntica), as¨ª como el hipermedia (convergencia de medios). Planteamientos que ya recogen creaciones anteriores a la generalizaci¨®n de los ordenadores personales y soportes digitales, como el caso de la poes¨ªa sonora del siglo XX, El Aleph de Jorge Luis Borges o Rayuela, de Julio Cort¨¢zar.

Pero adem¨¢s de la composici¨®n por nodos, la obra digital se complementa con otros recursos que la enriquecen, el autor explora nuevas formas narrativas y de expresi¨®n, como efectos sonoros, visuales y de dise?o gr¨¢fico. Todo con el fin de dar profundidad a la obra, de traspasar las limitaciones que impone el papel.

Lo que parece complicado es establecer categor¨ªas: la literatura electr¨®nica abarca creaciones heterog¨¦neas y g¨¦neros variopintos, novelas escritas como blog, obras de teatro interactivo, videojuegos, poes¨ªa c¨®digo...

El fen¨®meno va creciendo, por ejemplo con los?booktubers (youtubers que opinan sobre libros)

El proyecto Ciberia Project recoge en una biblioteca una muestra de 60 obras de literatura digital en espa?ol, de autores diversos como Marcelo Guerrieri, Gustavo Romano, Benjam¨ªn Escalonilla (Generaci¨®n Tch!), Bel¨¦n Gache (proyecto Word Market, Radikal Karaoke) o Dom¨¦nico Chiappe, autor Tierra de extracci¨®n y Hotel Minotauro, obra que comenz¨® a construir en 2013 a partir del guion, textos, m¨²sica e investigaci¨®n de un crimen.

Estas obras requieren equipos multidisciplinares, no solo el creador o artista: producci¨®n, m¨²sica, maquetaci¨®n, programadores...

Pero adem¨¢s de un movimiento cultural de vanguardia, el concepto ¡°va calando¡± y se ampl¨ªa a todo tipo de fen¨®menos o procesos literarios relacionados con lo digital, lo que ser¨ªa la literatura 2.0. La escritora Silvia Nanclares se?ala como ejemplos blogs literarios, interacci¨®n en redes sociales, la reinterpretaci¨®n de obras tradicionales con formato digital o incluso el fen¨®meno de los booktubers (youtubers que opinan sobre libros), que adem¨¢s han logrado atraer a j¨®venes a la literatura.

Para esta autora, se produce una influencia mutua entre la escritura digital ( 2.0) y la tradicional (1.0). ¡°Hay una contaminaci¨®n, por ejemplo se utilizan giros de las redes sociales, a veces la escritura se vuelve m¨¢s telegr¨¢fica, otras se produce una esencializaci¨®n del mensaje, el apoyo en la imagen...¡±. El camino, adem¨¢s, puede ser de la escritura tradicional a la digital o viceversa, como el caso de autores que han creado una firma en redes y de ah¨ª han publicado libros.

Desde el punto de vista de la distribuci¨®n, Valent¨ªn P¨¦rez Venzal¨¢, formador de libro electr¨®nico y director de la editorial Minobitia, explica que la literatura electr¨®nica restringida a obras pensadas en formato digital no tienen un mercado como tal. S¨ª hay demanda, explica, en libros enriquecidos, especialmente en literatura infantil, que se distribuyen en plataformas como Amazon, Apple o La Casa del Libro. ¡°Para aprovechar las ventajas de lo digital se a?ade a las obras de papel elementos multimedia¡± y se venden a precio mucho m¨¢s barato que en papel.