?Y si consultar el genoma fuera tan f¨¢cil como echar mano del m¨®vil?
La 'startup' catalana Made of Genes ha creado el primer banco gen¨¦tico en la nube. La idea es revolucionaria: guarda y encripta el genoma de los usuarios y les cobra por uso. Ahora preparan una suscripci¨®n mensual, al estilo Netflix
![Miquel Bru (izquierda) y ?scar Flores, fundadores de Made of Genes, en la puerta de las oficinas de la 'startup', en Esplugues de Llobregat (Barcelona).](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/JEKSOTMPVZU7ZIJ37QQRQIQHF4.jpg?auth=67c441dc1e61e00359c7982b9d55322ac5fcaad02e518d61093235d52c0a77a4&width=414)
Si Vincent Van Gogh se hubie?ra secuenciado el genoma de ni?o habr¨ªa sabido que ten¨ªa tendencias depresi?vas, lo que a la postre le llev¨® al suicidio. Si el an¨¢lisis se lo hubiera hecho su padre tambi¨¦n se habr¨ªa llegado a la misma con?clusi¨®n, porque buena parte de la infor?maci¨®n que contiene nuestro ADN se transmite a la descendencia. Los genes no solo hablan de nuestra predisposici¨®n a contraer determinadas enfermedades, como el c¨¢ncer, el Parkinson o la diabe?tes: tambi¨¦n indican qu¨¦ tratamientos aceptar¨¢ mejor nuestro cuerpo, lo que ayuda a dise?ar f¨¢rmacos m¨¢s efecti?vos, y qu¨¦ dietas nos convienen. Incluso reflejan si somos o no propensos al alco?holismo o a tener mellizos.
Llegados al punto en que la tecnolo?g¨ªa ha logrado que la secuenciaci¨®n del genoma cueste menos de 1.000 d¨®lares (23andMe ofrece tests gen¨¦ticos prima?rios por 179 d¨®lares, unos 150 €), la duda no es si conocer las tripas de nuestro ADN se convertir¨¢ o no en algo cotidia?no, sino qu¨¦ problemas de seguridad conllevar¨¢. ?C¨®mo evitar que tan sensi?ble material caiga en las manos equivoca?das, por ejemplo en las de aseguradoras o entidades financieras? ?Se puede garan?tizar su confidencialidad?
Algunas compa?¨ªas creen que s¨ª. Es el caso de la startup Made of Genes. Su con?sejero delegado, ?scar Flores, ingeniero inform¨¢tico y doctor en biotecnolog¨ªa, ide¨® hace dos a?os una forma segura de almacenar en la nube los 600 GB de datos que pesa el genoma secuenciado de un individuo. ¡°La informaci¨®n est¨¢ encripta?da de tal manera que nadie puede acce?der a ella, ni siquiera nosotros o la polic¨ªa. Solo se puede leer cuando el usuario nos env¨ªa un consentimiento informado en el que se dice que cierta parte de su c¨®digo gen¨¦tico est¨¢ disponible durante un tiempo determinado. Los usuarios tienen una contrase?a y, como cuando operas en el banco, el sistema te pide que te identifiques y que completes una serie de validaciones antes de entrar¡±, ilustra.
En otras palabras: su propio sistema de encriptaci¨®n, similar al militar, incor?pora la doble confirmaci¨®n que usa por ejemplo PayPal. Lo tienen patentado y est¨¢ convenciendo a los expertos.
- Un banco en la nube
El genoma para no iniciados
- Llamamos genoma a la secuencia de ADN de los seres humanos. Est¨¢ dividido en 23 pares de cromosomas. El Proyecto Genoma Humano (PGH) consigui¨® secuenciar la cadena completa en 2003.
- A efectos pr¨¢cticos, codificar un genoma implica identificar la secuencia exacta de millo?nes y millones de las letras presentes en nuestro ADN.
- El genoma est¨¢ compuesto por entre 22.500 y 25.000 genes distintos. Cada uno de ellos contiene informa?ci¨®n precisa necesaria para la s¨ªntesis de una o varias prote¨ªnas.
- Su disposici¨®n en cada ser vivo es ¨²nica. Y su conoci?miento es de gran ayuda para que los m¨¦dicos dise?en?tratamientos personalizados.
?Pero la revoluci¨®n que ha aportado Made of Genes no solo reside en su avanzado entramado de protecci¨®n de los datos. Lo que les ha hecho destacar en el pro?grama de Wayra, la aceleradora de star?tups de Telef¨®nica que le aport¨® 100.000 euros; lo que ha llamado la atenci¨®n del presidente de la farmac¨¦utica Almirall, Carlos Gallardo, y de otros inversores, que invirtieron 600.000 euros m¨¢s en los dos a?os de recorrido de la startup; lo que les hizo ganar en 2016 el premio del MIT Technology Review a la iniciativa m¨¢s innovadora en el sector sanitario fue su modelo de negocio. Flores y su socio, Miquel Bru, han creado una especie de banco de gen¨®mica personal. ¡°Nuestra herramienta es un entorno en el que puedes tener tu genoma secuenciado y, a partir de ah¨ª, darle uso. Cobramos por cada vez que recurras a ¨¦l. Por ahora, nuestro modelo de negocio es parecido al de la App Store: es un marketplace en el que compartimos beneficios con los proveedores de servicios, en este caso los laboratorios que se encarguen de hacer la secuenciaci¨®n¡±, explica Flores.
La idea es rompedora. A nadie se le hab¨ªa ocurrido aplicar el pago por uso en la gen¨¦tica. Pero quieren ir m¨¢s all¨¢. Ya tienen pensado dar una nueva vuelta de tuerca al producto. Encerrar digitalmen?te nuestra informaci¨®n m¨¢s ¨ªntima en el sistema de Made of Genes costaba hasta ahora entre 650 y 4.000 euros, en funci¨®n de si depositamos el genoma entero o solo una secci¨®n, y luego se pagaba una peque??a cantidad cada vez que se quer¨ªa recu?rrir a esa informaci¨®n. ¡°Nos dimos cuenta de que el desembolso inicial era una fuer?te barrera de entrada¡±, a?ade Flores.
Por eso van a lanzar un modelo de suscripci¨®n: pagando una cuota mensual similar a la de Netflix (entre 15 y 20 euros), el cliente podr¨¢ disponer de su genoma digitalizado tantas veces como quiera. ¡°En Espa?a estamos poco acostumbra?dos a pagar por la sanidad. Pero si paque?tizamos el servicio con precios asequibles podemos equipararlo a otros productos, como un seguro m¨¢s¡±, explica.
![La sede de Made of Genes, en Barcelona.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/HNXEE6L2TGWK73TV7UDU3IDJA4.jpg?auth=a552db602e19895828ddf98db0d1402d94697657b4ee0587a5b9e10523033b33&width=414)
Este Netflix del genoma se lanzar¨¢ en el segundo trimestre de este a?o. Toda?v¨ªa est¨¢n cerrando acuerdos con los laboratorios que realizar¨¢n los an¨¢lisis (la startup solo sube esos datos a la nube) y acabando de perfilar c¨®mo hacer viables sus nuevas tarifas para un servicio que requiere de una tecnolog¨ªa inherente?mente cara. Por ejemplo, introduciendo alg¨²n tipo de permanencia en los con?tratos. ¡°Creemos que puede ser un bom?bazo. Hay estudios que dicen que para 2025 la gente empezar¨¢ a secuenciarse el genoma. Nosotros queremos que el a?o que viene ya se hable en los bares del genoma, que sea un servicio asequible, democratizar la medicina personalizada¡±.
- Objetivo: Oriente Medio
La originalidad del modelo, as¨ª como la buena tecnolog¨ªa que tiene detr¨¢s, est¨¢ haciendo que a estos catalanes les surjan novias por todas partes. Han mantenido alguna reuni¨®n con el Ministerio de Sani?dad y planean dar el salto a Latinoam¨¦ri?ca. Pero hoy por hoy su foco est¨¢ en otra regi¨®n. Gracias a su participaci¨®n en Dub¨¢i en un programa para detectar tecnolog¨ªas disruptivas prometedoras, Etisalat, el principal operador de telecomunicacio?nes de Oriente Medio, ha elegido a Made of Genes como socia para implantar un ambicioso sistema de secuenciaci¨®n gen¨®mica en Emiratos ?rabes Unidos (EAU). Aunque a¨²n no puede revelar los t¨¦rminos del acuerdo, el equipo de Flo?res, que ahora consta de 16 personas, ya trabaja junto con Etisalat en una prueba piloto en un hospital. Esperan empezar a implantar el sistema en todo el pa¨ªs en unos dos a?os. Ahora mismo est¨¢n detr¨¢s de una ronda de financiaci¨®n con inverso?res corporativos (nacionales e internacio?nales) con la que levantar¨¢n unos cuatro millones para alimentar su proceso de internacionalizaci¨®n. Acaban de recibir 150.000 euros de una ronda puente y pronto llegar¨¢ una cantidad similar.
![Est¨¢n en Barcelona, pero tienen un pie en el resto del mundo: v¨¦anse los relojes con la hora de Boston, Dub¨¢i y Hong Kong.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/2HA66RY3IRYM2YHLIQVCYIUTIU.jpg?auth=752dd6fd342e415891290ecf135dbb2b5bc682b641be0d7d3cd204d31b4ca196&width=414)
La pen¨ªnsula Ar¨¢biga se podr¨ªa con?siderar como la regi¨®n del mundo m¨¢s desarrollada en cuanto a implementaci¨®n de gen¨®mica se refiere. ¡°Arabia Saud¨ª tie?ne un plan para secuenciar el genoma de toda la poblaci¨®n antes de 2020. No creo que lo consigan, pero reman en esa direc?ci¨®n¡±, aclara Flores. Otros pa¨ªses, como Kuwait o EAU, tambi¨¦n tienen en marcha programas parecidos.
Los ¨¢rabes est¨¢n apostando fuerte por esta tecnolog¨ªa porque pueden (no les faltan petrod¨®lares). Tanto es as¨ª que en EAU, por ejemplo, es obligatorio que los novios se hagan una prueba gen¨¦ti?ca cuando se van a casar. ¡°La poblaci¨®n es peque?a, por lo que tienen riesgos de consanguinidad, y eso implica enferme?dades como fibrosis qu¨ªstica y otras. Por eso las parejas deben comprobar su com?patibilidad¡±, describe Flores.
- Asegurar la privacidad
Made of Genes se remonta a un trabajo de fin de curso que dos compa?eros del Executive MBA de Esade prepararon en Barcelona en 2014. ?scar Flores y Miquel Bru ten¨ªan claro que el sector de la gen¨¦?tica iba a explotar. En lo que tambi¨¦n coincid¨ªan era en que las oportunidades de negocio estaban no tanto del lado cient¨ªfico como del de la ciberseguridad. La citada 23andMe es capaz de ofrecer bajos precios porque vende la informa?ci¨®n gen¨¦tica que descifra a compa?¨ªas farmac¨¦uticas interesadas.
Modelo este que Flores rechaza. ¡°El hecho de que tu informaci¨®n gen¨¦tica sea p¨²blica te puede cambiar la vida. No con?f¨ªo mucho en la regulaci¨®n, porque hecha la ley, hecha la trampa, pero conviene que se empiece a hablar sobre c¨®mo asegurar la privacidad de los usuarios. Hace falta pedagog¨ªa y seriedad¡±, aventura.
¡°El genoma es imperecedero e inmuta?ble, nos acompa?a desde antes de nacer hasta la muerte¡±, contin¨²a Flores: ¡°Pode?mos falsificar documentos o quemar nuestra huella digital; cambiarnos el ros?tro y el nombre. Pero el genoma va a seguir ah¨ª¡±. C¨®mo proteger esa informaci¨®n ser¨¢ el gran debate en los pr¨®ximos a?os.
Evitar la enfermedad antes de que aparezca
El futuro del sistema sanitario pasa por la medicina preven?tiva. Nadie duda ya de que el modelo debe cambiar de su actual orientaci¨®n asistencial a otro en el que se monitorice de forma cotidiana a los pacien?tes, de manera que necesiten acudir con menos frecuencia a ambulatorios y hospitales. La tecnolog¨ªa juega aqu¨ª un papel fundamental: los wearables pronto no solo leer¨¢n nuestras constantes vitales, avisando autom¨¢ticamente al m¨¦dico si alg¨²n indicador se dispara, sino que ser¨¢n capaces de tomar muestras (de sangre, orina, etc¨¦tera) y enviar los resultados al doctor.
La secuenciaci¨®n del genoma, que tarde o temprano ser¨¢ com¨²n en Occidente, contri?buir¨¢ decisivamente a conso?lidar este nuevo modelo. Para bien o para mal, sabremos con mayor exactitud las predis?posiciones gen¨¦ticas de cada individuo a sufrir determina?das enfermedades. La clave est¨¢ en qui¨¦n tiene acceso a esos datos. Los m¨¦dicos pue?den usarlos para preparar tra?tamientos a medida y producir c¨®cteles de f¨¢rmacos perso?nalizados; las aseguradoras o los bancos, por ejemplo, pueden servirse de ellos para subir las primas de los segu?ros de vida o denegar hipote?cas a quienes parezca que no van a vivir eternamente.
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