La nueva fe es la confianza
El dinero, como la religi¨®n o las naciones, es una ficci¨®n colectiva. Creer en un ser superior, en formar parte del pueblo elegido o que un trozo de papel vale 50 euros, son todos actos de fe.
El dinero, como la religi¨®n o las naciones, es una ficci¨®n colectiva. Creer en un ser superior, en formar parte del pueblo elegido o que un trozo de papel vale 50 euros, son todos actos de fe. Es la magia de nuestra especie: somos animales de fe dispuestos a aceptar que un trozo de metal vale lo mismo que un caf¨¦ o un peri¨®dico. De hecho, hablamos de dinero fiduciario para referirnos a nuestras actuales divisas, porque como su nombre indica se basan solo en la fe al no estar respaldadas por nada que no sea una promesa de pago por parte del emisor. El uso moderno del dinero fiduciario se inicia en 1971 cuando el presidente Nixon decidi¨® romper el patr¨®n oro, dar barra libre para fabricar dinero y conseguir la hegemon¨ªa mundial de esa ficci¨®n llamada d¨®lar que supone el 60 % de las reservas econ¨®micas y m¨¢s del 85 % de las transacciones globales.
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Resulta curiosa la desconfianza en las criptomonedas, cuando globalmente aceptamos una ficci¨®n en manos (al menos, indirectamente) de un se?or llamado Donald Trump que dice que los europeos somos sus enemigos y pone muros a sus vecinos. Eso s¨ª, espera que mantengamos la fe en el d¨®lar.
Las criptomonedas son tambi¨¦n ficciones colectivas, pero esta vez basadas en la confi anza que generan algoritmos distribuidos. Igual que un cisne negro solo demuestra que no todos los cisnes son blancos; las criptomonedas, con sus limitaciones y problemas, demuestran que hay otras formas de entender el dinero m¨¢s all¨¢ de los viejos modelos centralizados. Esta es la verdadera revoluci¨®n que blockchain promete: crear modelos de valor absolutamente distribuidos. Internet llev¨® este modelo a la informaci¨®n, democratizando su acceso; sin embargo, ha sido incapaz de distribuir el valor.
Todo lo contrario, ha producido una gran concentraci¨®n en torno a plataformas de publicidad, redes sociales o comercio electr¨®nico. Blockchain podr¨ªa hacer posible un Internet del valor con intercambios distribuidos y no dependientes de terceros y esto demostrar¨ªa que otro dinero, otro modelo econ¨®mico y hasta otro mundo es posible. Que sea mejor que el?actual ser¨¢ responsabilidad de todos.
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