?A qu¨¦ huele un algoritmo? La tecnolog¨ªa conquista tu perfume
El desarrollo de fragancias ya no es lo que era. As¨ª se est¨¢ reinventando esta a?eja industria en su b¨²squeda de nuevas y m¨¢s personalizadas esencias
Firmenich es una empresa suiza fundada hace m¨¢s de un siglo. Desde 1895, se ha dedicado a la creaci¨®n de fragancias y sabores. De sus laboratorios han salido perfumes como Aqua di Gio, Boss Bottled, Flower by Kenzo o Light Blue, de Dolce&Gabbana. Estos fueron fruto de la imaginaci¨®n humana, los pr¨®ximos podr¨ªa inventarlos una m¨¢quina. Hace ya un a?o que Firmenich inaugur¨® su Digital Lab, con la colaboraci¨®n de la Escuela polit¨¦cnica federal de Lausana (EPFL). ?El plan? Explorar el potencial de la inteligencia artificial en los procesos creativos de la marca.
Dos meses despu¨¦s, Symrise, otro grande del sector, anunci¨® el desarrollo de Phylyra, otro plan para mezclar perfumes y algoritmos, esta vez de la mano de IBM. "Ahora nuestros perfumistas pueden trabajar con un aprendiz de inteligencia artificial a su lado. Uno que puede analizar miles de f¨®rmulas y datos hist¨®ricos para identificar patrones y predecir nuevas combinaciones, ayud¨¢ndoles a ser m¨¢s productivos y acelerando el proceso de dise?o, al guiarles hacia f¨®rmulas nunca vistas", aseguraba Achim Daub, presidente de Symryse Scent&Care. Y la ola no termin¨® ah¨ª. El pasado mes de abril, Givaudan lanzaba de una plataforma llamada Carto y pensada para creaci¨®n de fragancias a golpe de app.
- Todas las edades
Firmenich tiene 124 a?os, Givaudan es de su misma quinta y Symryse ha cumplido ya los 16. Pero este golpe de tim¨®n no queda reservado a los cl¨¢sicos del sector. De Barcelona a Par¨ªs acaba de moverse Noustique, para abrir The Alchemist Atelier. Quienes entran a ese espacio pueden salir con un perfume creado por ellos mismos e incluso con la m¨¢quina que les permite hacerlo. Su Scent Creator naci¨® que naci¨® en Zaragoza, como un proyecto del departamento de innovaci¨®n corporativa de BSH. Ahora acaba de salir a la venta. Se trata de un dispositivo desarrollado para combinar y dosificar esencias a placer del usuario, que obtiene un perfume hecho a medida. "Vimos claramente es que una soluci¨®n as¨ª iba directamente contra dos megatendencias que hab¨ªamos identificado en el mercado: una es la de la personalizaci¨®n y la otra es la de la digitalizaci¨®n en cosm¨¦ticos", explica Hugo Lasala, CTO de Noustique.
El Scent Creator es, en resumidas cuentas, el hijo perfumista de una Nespresso y una impresora 3D. La tarea del usuario es combinar las 34 esencias disponibles en su perfume ideal. Primero eligen sus aromas favoritos y luego los ajustan en la app. Por ¨²ltimo, el dispositivo los combinar¨¢ en las proporciones exactas para crear el perfume, cuya f¨®rmula quedar¨¢ grabada para el futuro y puede compartirse con los dem¨¢s usuarios.
- Inteligencia colectiva
Para Noustique, que ha llegado a Par¨ªs de la mano de Puig y BSH, la meta no est¨¢ tanto en la inteligencia artificial como en el conocimiento profundo de las preferencias de los usuarios. Por el momento, con los datos de uso de la app que acompa?a al Scent Creator, pueden conocer al detalle cada fragancia creada en el Scent Creator.? "Podemos saber con precisi¨®n cu¨¢ntas f¨®rmulas ha hecho un usuario, cu¨¢les ha compartido, qu¨¦ palabras ha usado, qu¨¦ ingredientes ha mezclado con cu¨¢les, cu¨¢les se juntan con m¨¢s frecuencia...", detalla Lasala.
La neoyorquina Scentbird es una especie de Netflix de las fragancias que permite disfrutar de muestras de perfumes a cambio de una suscripci¨®n mensual. Y tambi¨¦n ha creado una l¨ªnea de perfumes con el apoyo del c¨¦lebre y machac¨®n petr¨®leo del siglo XXI. Las fragancias de Confessions of a Rebel se han basado en los datos recopilados por Scentbird sobre sus m¨¢s de 250.000 suscriptores. Las preferencias de esta horda de gringos perfumados se han utilizado para desarrollar cuatro fragancias cuya vocaci¨®n es ser 100% unisex. "Quer¨ªamos crear algo universalmente agradable, pero que tambi¨¦n fuera de nicho y tuviese su propia historia", cuenta Mariya Nurislamova, CEO y cofundadora de Scentbird y Confessions of a Rebel, en Beauty Independent.
- M¨¢s all¨¢ del frasco
Sin embargo, Noustique quiere ir m¨¢s all¨¢ del planteamiento de esta startup y, en general, de lo establecido en el mercado del perfume."A d¨ªa de hoy, la industria define el producto que quiere para el consumidor. ?Es realmente el perfume que le encaja? En la industria actual se le ha quitado el valor principal al perfume, que es el olor. Y se enfoca a marcas y dise?o de producto", se?ala ?lvaro Su¨¢rez, CEO de Noustique.
El plan que persiguen con The Alchemist Atelier es convertir en perfumista a cualquiera que entre en la tienda -donde ofrecen talleres- o compre sus m¨¢quinas. "Creemos que cambiarse de perfume puede llegar a ser tan habitual como cambiarte de ropa. Queremos empoderar al usuario para que ¨¦l defina lo que le gusta y lo que no", asegura Lasala.
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