¡°El confinamiento nos hace conscientes de la necesidad del contacto f¨ªsico¡±

La semana que viene tiene que entregar un libro a su editorial con el t¨ªtulo El tsunami digital que expropia nuestras vidas. El catedr¨¢tico de Periodismo y Comunicaci¨®n de la Universidad Aut¨®noma de Barcelona Jos¨¦ M. P¨¦rez Tornero (Almer¨ªa, 1954) ha decidido reescribir a ¨²ltima hora parte de su ensayo: ¡°Al estar confinado ves desde otro punto de vista la situaci¨®n¡±. Hasta le ha cambiado el nombre por La gran mediatizaci¨®n (Editorial UOC). Nos hemos quedado sin encuentros con amigos, familiares y, en muchos casos, compa?eros de trabajo. Para ir m¨¢s all¨¢ del n¨²cleo de convivencia o a un encuentro f¨ªsico fugaz a 1,5 metros ahora no nos queda otra cosa que las redes. Estos d¨ªas las aplicaciones de videoconferencia lideran las descargas en las plataformas m¨®viles. ¡°Desde hace unas d¨¦cadas los medios digitales nos han venido distanciando los unos de los otros. En las calles se hablaba menos y las familias se ve¨ªan interrumpidas por el tel¨¦fono¡±, reflexiona. El acad¨¦mico vislumbra un posible cambio en la relaci¨®n con la tecnolog¨ªa una vez acabe la crisis del coronavirus.

Llevamos cinco d¨ªas confinados y ya tenemos nostalgia de los encuentros presenciales. P¨¦rez Tornero ve una oportunidad en una crisis que cree que durar¨¢ meses: "El confinamiento nos hace conscientes de la necesitad del contacto f¨ªsico directo porque, si lo perdemos, perdemos la humanidad". Y a?ade: "Se recuperan antiguas amistades porque sales de la rutina del contacto por proximidad y crece la distancia con los amigos m¨¢s pr¨®ximos". Y es esta proximidad a la que considera que se puede dar m¨¢s valor tras el confinamiento: "?Ojal¨¢ seamos capaces de rectificar!".

"Los medios digitales nos han venido distanciando y en las calles se hablaba menos

El catedr¨¢tico, que ha llevado a cabo estudios de semi¨®tica, apunta que "la tecnolog¨ªa aparta partes del contexto y selecciona otras". El turno de palabra, por ejemplo. En un encuentro en un bar entre ocho personas ¨Cm¨¢ximo que permite la aplicaci¨®n l¨ªder en descargas de esta semana Houseparty- pueden entablarse conversaciones paralelas y superpuestas. En las videoconferencias es m¨¢s dif¨ªcil gestionar el ruido, valora P¨¦rez Tornero, y se pierden detalles como los olores: "?No creo que estos d¨ªas se vendan muchos perfumes!". En las videoconferencias no se suele compartir tiempo en silencio: "Es mucho m¨¢s absorbente". Ve m¨¢s indiscreci¨®n. Hay grupos que est¨¢n quedando para comer juntos: "Ves los platos, pero no se pueden compartir. Es como un coitus interruptus en la comunicaci¨®n".

"Tanto que hab¨ªamos hablado de la ense?anza online y nos henos dado de bruces con ella¡±

"Se est¨¢ notando mucho la falta de medios locales activos", valora el profesor, que a?ade que pese a la p¨¦rdida de fuelle de los medios de comunicaci¨®n a ra¨ªz de la crisis de 2008 estos d¨ªas se est¨¢n registrando consumos masivos de televisi¨®n y radio. Alerta de una "vulnerabilidad medi¨¢tica" y menciona el caso de Facebook: "Ayer la empresa anunci¨® que los mandaba a trabajar a los moderadores de contenidos [los que filtran las fake news] a sus casas y, por condiciones de privacidad, no podr¨¢n tener las mismas funciones. Dejamos que lo controle la inteligencia artificial, las redes quedan gobernadas por las m¨¢quinas".

Ni?os y adolescentes, m¨¢s "presos que los adultos"

Los ni?os y adolescentes ya est¨¢n "muy mediatizados y descorporeizados de las relaciones", opina P¨¦rez Tornero. "M¨¢s presos de la tecnolog¨ªa que los adultos", augura que ante el confinamiento su primera reacci¨®n va a ser "la de seguir tan adictos a los medios como estaban". Prev¨¦, no obstante, que "de pronto van a descubrir juegos de mesa como el parch¨ªs o los puzzles y van a desdigitalizar algunas de sus actividades". Un consejo para los padres: "Que tomen consciencia de que es un par¨¦ntesis extraordinario y se quiten la ansiedad". El catedr¨¢tico de la UAB concluye: "Hay que establecer agendas, rutinas, desmediatizar algunos puntos de la casa y hacer cosas que no hacemos nunca como mirar por el balc¨®n o reflexionar. La tentaci¨®n de los adolescentes va a ser la adicci¨®n al m¨®vil y esto es preocupante".