La cosa va de frikis

Or¨ªgenes secretos, la ¨®pera prima de David Gal¨¢n Galindo, se mueve entre el thriller y la comedia costumbrista para contar una historia de cr¨ªmenes, c¨®mics y superh¨¦roes. Con una tendencia peligrosa a la bulimia de referencias y g¨¦neros, Gal¨¢n Galindo estructura su filme siguiendo un patr¨®n a lo Seven, de David Fincher, pero mucho m¨¢s deudor del universo de raros y perdedores que Alex de la Iglesia encumbr¨® en su inagotable El d¨ªa de la bestia. Una amalgama en la que tampoco faltan los gui?os a Batman y a las buddy movies.

Un h¨ªbrido bien calculado para el voraz consumo imperante pero que desaprovecha el fondo de p¨¦rdida y orfandad de la historia

Antonio Resines y Javier Rey son, respectivamente, un polic¨ªa veterano al borde de jubilaci¨®n y un reci¨¦n llegado de traje, gomina y corbata. El hijo de Resines es el encargado de una tienda de c¨®mics, y lo interpreta Brays Efe con ese aire de p¨ªcaro entra?able que tan bien ha explorado el actor estadounidense Jack Black. Un chico listo al que su padre recrimina por ir vestido con camisetas que parecen el pijama de un ni?o y por llevar una vida que no comprende. ¡°Es una pena que con esa memoria que tienes no te hayas sacado una oposici¨®n¡±, le suelta mientras cenan croquetas. Una queja que cae en saco roto porque, como le dice el personaje de Javier Rey, ese inspector de polic¨ªa siempre pulcro y remilgado, a la jefa de homicidios que interpreta Ver¨®nica Echegui, una loca de los disfraces manga, aqu¨ª ¡°la cosa va de frikis¡±. Incluido ¨¦l mismo, claro.

La pel¨ªcula, cuyo t¨ªtulo hace referencia al enigma que encierra el embri¨®n de cada superh¨¦roe, nace de una novela escrita por el propio David Gal¨¢n Galindo, director de cortometrajes que en su debut en el largometraje tambi¨¦n ha ejercido de coguionista y que ha pecado de querer hacer demasiadas pel¨ªculas en una sin profundizar demasiado en ninguna. Un h¨ªbrido bien calculado para el voraz consumo imperante pero que desaprovecha el fondo de p¨¦rdida y orfandad de la historia, que deja en suspenso un amago de apetecible comedia rom¨¢ntica y que es, en s¨ª misma, una especie de origen secreto de un nuevo superh¨¦roe ca?¨ª capaz de volar por la trasera de la Gran V¨ªa, entre la comisar¨ªa de Leganitos y la tienda de c¨®mics de la calle Silva, para rescatar una ciudad, Madrid, sumida en la oscuridad y el abatimiento.