¡°Es m¨¢s sensual, tiene m¨¢s er¨®tica¡±: por qu¨¦ a una mujer heterosexual le puede gustar m¨¢s el porno l¨¦sbico
Los expertos explican que el deseo sexual femenino es una reivindicaci¨®n de la cuarta ola feminista, y esto ha hecho que se atenue el estigma sobre las fantas¨ªas de las mujeres
Entre la realidad y la ficci¨®n media siempre un abismo. La distancia que va entre lo que cada uno en la soledad de las cuatro paredes de su habitaci¨®n puede imaginar y lo que luego esa misma persona decide hacer en su vida real es m¨¢s larga de lo que puede parecer a simple vista. Y si no, que se lo pregunten a las mujeres heterosexuales, entendiendo el t¨¦rmino como la atracci¨®n rom¨¢ntica y sexual entre personas de distinto sexo, que reconocen abiertamente sentir excitaci¨®n cuando consumen porno en donde dos mujeres tienen sexo.
Lo que ocurre se explica desde la sexolog¨ªa, dice la docente en Escuela Sexol¨®gica, Norma Ageitos Urain, que afirma: ¡°Nos hemos acostumbrado a pensar que las fantas¨ªas son esas cosas que queremos hacer en la realidad, pero no. Desde el estudio de la sexualidad se pone en valor la fantas¨ªa en s¨ª, aquello a lo que nos lleva nuestra imaginaci¨®n, pero esto no quiere decir que tenga que ser la planificaci¨®n de un deseo¡±. Esta fantas¨ªa puede ser algo que por diversas cuestiones resulte satisfactorio para la persona, pero ¡°no necesariamente tiene que llegar a la realidad¡±, explica Ageitos, y pone un ejemplo: ¡°Lo podemos llevar a otros ¨¢mbitos del cine. Nos puede gustar mucho ver pel¨ªculas, pero eso no quiere decir que queramos experimentar lo que vemos: solo que nos gusta por lo que nos hace sentir¡±.
Las razones por las que a una mujer heterosexual le pueda gustar m¨¢s el porno l¨¦sbico son varias, seg¨²n los expertos. La primera es que el porno solo de mujeres est¨¢ centrado en el placer femenino. ¡°Es m¨¢s sensual, tiene m¨¢s er¨®tica, muchos m¨¢s besos mojados sin prisa, mucha estimulaci¨®n del cl¨ªtoris, toques, caricias¡±. Ageitos aclara que es importante entender que ¡°la imaginaci¨®n o las pel¨ªculas pueden ser diferentes de la realidad, y esto no determina la orientaci¨®n sexual¡±.
¡°Solamente es m¨¢s una forma de estimular la imaginaci¨®n, la excitaci¨®n y el placer¡±, asegura la autora del libro C¨®mo provocar el placer femenino, Claudia Carvalho. Adem¨¢s, explica que una encuesta realizada por el sitio web Pornhub muestra que los v¨ªdeos de mujeres teniendo sexo con otras mujeres son los favoritos entre las propias mujeres.
Ageito recalca que otra de las razones por las que este tipo de contenido puede producir este est¨ªmulo es que ¡°vinculamos la dulzura, la cercan¨ªa y la lentitud en las relaciones sexuales a un imaginario tradicionalmente que ha sido m¨¢s asociado a las mujeres que a los hombres¡±.
Un estudio cient¨ªfico de la Universidad de Essex demostr¨® que a una mujer heterosexual la imagen de un hombre atractivo, desnudo y sugerente la excita igual que una mujer en las mismas condiciones. A esta conclusi¨®n llegaron despu¨¦s de analizar las reacciones de 345 mujeres a las que proyectaron v¨ªdeos er¨®ticos, femeninos y masculinos. Las mujeres heterosexuales respond¨ªan en ambos casos con la dilataci¨®n de las pupilas, una prueba suficiente para los investigadores de que les excitaba por igual. El estudio tambi¨¦n demostr¨® que las mujeres homosexuales solo se les dilataba la pupila con las im¨¢genes femeninas.
Para Cecilia Bizzotto, soci¨®loga y portavoz de JOYClub en Espa?a, es muy simple. ¡°Las mujeres son m¨¢s proclives a que les guste el porno l¨¦sbico porque su concordancia sexual, es decir, la correlaci¨®n entre el cerebro y los genitales, es menor que la de los hombres por la educaci¨®n sexual que han recibido¡±.
En esto coincide la psic¨®loga y sex¨®loga Ana Ad¨¢n, que es codirectora de Tu Yo Psic¨®logos y explica que las mujeres necesitan menos genitales y m¨¢s historia. ¡°El porno l¨¦sbico, al ser menos agresivo y estar menos centrado en los genitales, puede hacer que las mujeres lo asocien m¨¢s al placer. A las mujeres les excita m¨¢s el contexto, y no tanto el protagonista del relato. El ambiente er¨®tico nos hace sentir placer y deseo¡±.
Y aclara que una mujer que tiene fantas¨ªas con otra mujer no tiene por qu¨¦ tenerse que replantear su sexualidad. ¡°Esta concepci¨®n ha ido cambiando a lo largo del tiempo y ha quedado obsoleta. Las mujeres no nos definimos a trav¨¦s de lo que nos excita, no entra en conflicto con nuestra orientaci¨®n¡±.
En el libro Mi jard¨ªn secreto: fantas¨ªas sexuales de mujeres se hace una recopilaci¨®n de las fantas¨ªas de m¨¢s de 150 mujeres a trav¨¦s de cartas, cintas y entrevistas personales en donde muchas de ellas contaban que fantaseaban con estar con otra mujer, pero esto no era algo que quisieran en su vida. ¡°Nuestras fantas¨ªas se crean partir de la sociedad en donde vivimos y los est¨ªmulos a los que estamos expuestos¡±, asegura Ad¨¢n y concluye: ¡°Es un mito eso de que lo que fantaseas es lo que quieres llevarte a la realidad¡±.
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