Marina Llorca: ?Para arreglar la autoestima de las j¨®venes hay que ense?arles que pueden consumir otros contenidos?
Esta ¡®influencer¡¯ del ¡®body positive¡¯ en Espa?a denuncia los mensajes da?inos de las portadas de revistas que ha recopilado desde los a?os ochenta hasta la actualidad.
¡°Echadas a perder. Otra vez en los huesos. ?Y esa tripa? Celulitis bajo la lupa. Los peores culos. Patitas feas¡±. Estos son algunos de los titulares que aparecen en diversas revistas de moda que Marina Llorca, una de las chicas que mejor encarna el movimiento body positive en Espa?a, ha recopilado en un v¨ªdeo publicado en sus redes sociales. ¡°?C¨®mo pod¨ªan decirnos estas cosas? Si es que pr¨¢cticamente nos estaban escupiendo a la cara¡±, reflexiona por tel¨¦fono en su casa de Marbella. Las portadas abarcan desde los a?os ochenta hasta la actualidad, y reflejan ese bombardeo constante, ese inter¨¦s en se?alar las imperfecciones de las mujeres; una espiral que solo conduce a inseguridades y complejos, y a trastornos alimenticios en los peores casos.
En el v¨ªdeo que casi ha alcanzado las cuatro millones de reproducciones en Instagram aparecen 35 portadas pegadas en una pared con la voz en off de Marina Llorca. ¡°Hay muchos mensajes que ya no podr¨ªan darse. Por ejemplo lo relacionado con comentarios machistas de c¨®mo ser una buena esposa. Hemos avanzado y hay muchas regulaciones que saltar¨ªan a deg¨¹ello, pero antiguamente no hab¨ªa esos frenos y topes¡±, explica esta chica de Marbella que aglutina m¨¢s de 200.000 seguidores. Aunque ha comprobado que parte del ideal de alcanzar una figura perfecta para ser feliz se sigue manteniendo: ¡°Ahora se hace de una forma m¨¢s sibilina, no tan contundente, no aparece en negrita y letras grandes. Algunas revistas no han cambiado esa l¨ªnea editorial, sobre todo en lo relativo a las dietas, al ¡®cambia tu cuerpo porque tienes que adelgazar m¨¢s y m¨¢s¡±.
Tras seleccionar los ejemplares que ella ten¨ªa guardados, el buceo en las hemerotecas y el previo contacto con coleccionistas de revistas, acudi¨® a imprimir su proyecto a una tienda del barrio. Para su sorpresa, el chico que le atendi¨® le pregunt¨® si esas portadas eran reales. ¡°Se qued¨® perplejo. Me dijo que nunca se hab¨ªa parado a leer lo que pon¨ªa y que estaba convencido de que estaba editado o manipulado¡±, comenta entre risas.
La oleada de reacciones a su v¨ªdeo no tard¨® en llegar, y no solo de chicas j¨®venes, tambi¨¦n de mujeres mayores que hab¨ªan crecido con esos mensajes. ¡°Es que comprend¨ªa un rango que era una generaci¨®n: la de juventud de nuestras madres y nuestra adolescencia. Me dec¨ªan: ¡®No es que me suene, es que lo he vivido¡¯. Me contaban que compraban esas revistas cuando eran unas cr¨ªas, que se las le¨ªan de pe a pa y que llevaban a rajatabla lo que pon¨ªa. Segu¨ªan todas las dietas y los milagros para perder peso despu¨¦s del embarazo¡±, indica.
Los ¨²ltimos estudios apuntan a que una de cada tres adolescentes ve minada su autoestima cuando entra en Instagram. Marina Llorca establece una comparativa y se?ala que las revistas de moda fueron el Instagram de la ¨¦poca: ¡°Cuando ¨¦ramos adolescentes no ten¨ªamos redes sociales y el ¨²nico contacto con el exterior para ver la vida de la gente famosa era ese. Esperabas cada mes con las pesetillas que te daba tu madre para comprarte la revista y estar al tanto. Solo hab¨ªa un mensaje y era el que encontrabas en todas las portadas: Adelgaza, m¨¢tate de hambre, lleva esto puesto¡¡±.
Esta malague?a de 29 a?os, creadora de #MarinaImitandoXL, una serie de publicaciones en donde recrea fotograf¨ªas de celebrities para visibilizar otros tipos de cuerpo, ve que existe un punto de inflexi¨®n para todas esas chicas frustradas con su imagen corporal cuando acceden a la plataforma: ¡°Pueden elegir los mensajes que consumen y lo que quieren que les salga. Hay miles de creadores de contenido positivo y esa es la gran diferencia con nuestra adolescencia. Es normal que si tus amigas siguen a una persona t¨² hagas lo mismo, pero hay que identificar lo que no te hace bien, buscar lo que te inspire y te represente para arreglar este destrozo en la autoestima de las j¨®venes. Ense?arles que son las due?as de las redes sociales y que tienen ese poder de elecci¨®n que nosotras no tuvimos¡±.
El hecho de que estar delgado sea visto por la sociedad como un triunfo es una de las cosas que m¨¢s indigna a Marina Llorca. Ella acarrea trastornos alimenticios desde la adolescencia que ha ido controlando, pero volvieron a aflorar con fuerza a ra¨ªz de una ruptura de pareja durante sus a?os de universidad. Pasaba d¨ªas sin ingerir nada y a¨²n se asombra de las excusas que se inventaba para no comer delante de las personas. ¡°Pero todo el mundo me dec¨ªa que estaba muy guapa. ?A nadie se le ocurr¨ªa pensar que me estaba quedando tan delgada por lo mal que lo estaba pasando? Me acercaba m¨¢s al canon de belleza, al cuerpo deseado, pero mi salud mental estaba por los suelos¡±, confiesa. Es as¨ª como se fomentan los trastornos alimenticios, prosigue, porque cuando uno se sumerge en ese t¨²nel repleto de pr¨¢cticas da?inas para la salud, al final recibe la aprobaci¨®n de la gente. ¡°Un cuerpo delgado les parece est¨¦ticamente bonito, y se sienten en la necesidad de felicitarte. Y esa es la se?al que te llega al cerebro, parece que te recompensan. Entonces sigues porque ves que te funciona¡±.
Los expertos se?alan que los ingresos por Trastornos de Conducta Alimentaria? (TCA) se han disparado un 20% durante la pandemia, en parte por las redes sociales. Marina Llorca recibe y contesta cada d¨ªa, como si fuese una amiga, mensajes en su bandeja de entrada, y asegura que sabe identificar perfectamente si quien le escribe est¨¢ en una situaci¨®n l¨ªmite. El consejo que siempre da es acudir a un profesional: ¡°No con mucha frecuencia, pero claro que hay chicas que me cuentan que tienen la autoestima por los suelos y no saben c¨®mo volver a vivir, o personas con anorexia y bulimia que necesitan ayuda urgente. De ah¨ª la importancia de la salud mental en la sanidad p¨²blica. Muchas no pueden coste¨¢rsela¡±.
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