Blue Banana, la marca de la equis que conquist¨® el esp¨ªritu ¡®cayetano¡¯

En 2016 Juan Fern¨¢ndez-Estrada y Nacho Rivera ten¨ªan 19 a?os y 3.000 euros para invertir. Eran amigos desde ni?os y ahora, ya en la universidad (la Carlos III de Madrid), se dieron cuenta de que quer¨ªan emprender y crear su propia empresa. Poco antes hab¨ªan hecho un viaje con Interrail por Europa, pasaron por Amsterdam y se quedaron prendados del escudo de las tres X de la ciudad, tanto que cada uno se tatu¨® una. Cuando buscaban un logo y un motivo que identificara su marca de ropa, ya lo ten¨ªan.

Lo que sucedi¨® a continuaci¨®n pas¨® r¨¢pido: en siete a?os han pasado de vender prendas a sus amigos y familiares ¡°en Instagram, con el boca a boca de amigos y familiares, ellos fueron nuestros primeros clientes¡±, recuerda Juan Fern¨¢ndez-Estrada para S Moda, a facturar 12,7 millones de euros, seg¨²n datos de los propios fundadores. ¡°Comenzamos haciendo camisetas. Al principio eran customizables, t¨² eleg¨ªas el color, la talla y el tipo de tejido en el que quer¨ªas el logo. Nos dimos cuenta de que la mayor¨ªa de la gente eleg¨ªa las mismas opciones, con lo que decidimos estandarizarlas en lo que ser¨ªa nuestra colecci¨®n Classic, con una X ¨¦tnica bordada en el pecho y en la espalda. Esta primera colecci¨®n dio paso a muchas otras de camisetas, sudaderas y hoodies. A d¨ªa de hoy mantenemos Classic a la venta, que adem¨¢s es nuestro producto estrella y le tenemos un cari?o muy especial¡±, cuenta su socio, Nacho Rivera. Los inicios, dicen, fueron bastante ?m¨¢s precarios? de lo que mucha gente pueda pensar: ¡°Nacho y yo nos encarg¨¢bamos de todo, sin ninguna experiencia, llamando a muchas puertas para pedir ayuda, con el trastero de mi abuela como almac¨¦n, una modista gestionando la parte de costura, nuestra familia ayud¨¢ndonos en Black Friday y Navidad¡­¡± recuerda Juan Fern¨¢ndez-Estrada.

Hoy la X de Blue Banana marca un perfil en redes sociales: son j¨®venes, principalmente varones, aventureros, hacen viajes espectaculares a lugares como las playas de Maldivas o un volc¨¢n en Hawaii, adoran la naturaleza, y practican deportes como el surf, el esqu¨ª o el skate urbano. A sus seguidores se les ha etiquetado de ¡°Cayetanos¡±, aunque a sus fundadores no les gustan las etiquetas: ¡°Blue Banana se dirige al surfista de C¨¢diz que vive del mar y las sensaciones que le transmite. Tambi¨¦n al estudiante de Madrid que sue?a con hacer las cosas diferentes. O al adulto que esqu¨ªa todas los a?os en la sierra¡±, dice Juan Fern¨¢ndez-Estrada. ¡°Lo importante es sentirse identificado con nuestra filosof¨ªa y eso no depende de un estatus social impuesto¡±, a?ade Nacho Rivera. ¡°Buscamos inspirar a las nuevas generaciones a hacer de su vida una aventura y esa es una idea que no admite etiquetas ni prejuicios¡±, apunta su socio.

Probablemente uno de los aspectos que mejor ha sabido capitalizar Blue Banana es la idea de ser un estilo de vida, m¨¢s que una marca de ropa. ¡°Para Blue Banana es fundamental la calidad del contenido. Dedicamos gran parte de nuestro tiempo e inversi¨®n a cada nueva producci¨®n. Siempre estamos planeando viajes a destinos espectaculares en los que generar contenido. En el ¨²ltimo a?o estuvimos en Islandia, Filipinas, Hawai o M¨¦xico, entre otros¡±, cuenta Juan Fern¨¢ndez-Estrada. Desde el principio trabajaron la comunicaci¨®n con colaboradores a los que enviaban prendas a cambio de fotograf¨ªas, despu¨¦s contratando generadores de contenido. ¡°Los amigos de Blue Banana son nuestro mejor canal de comunicaci¨®n¡±, reconoce Nacho Rivera, ¡°ellos son los que llevan la X de la marca por el mundo, y eso hace que al final cause inter¨¦s conocer qui¨¦n est¨¢ detr¨¢s de ese logo. Adem¨¢s, trabajamos con creadores de contenido que est¨¢n alineados completamente con la filosof¨ªa de la marca. Hablamos de fot¨®grafos y deportistas profesionales dedicados al surf, skate o esqu¨ª que visten nuestras prendas en su d¨ªa a d¨ªa y que se involucran para que Blue Banana forme parte de sus aventuras¡±. Este a?o han lanzado el ¡°Adrenaline Crew¡± un programa en el que apoyan a atletas profesionales en sus carreras de deportes outdoor vinculados a la aventura: ¡°Nos encanta poder decir que contamos con Daniela Boldini o Luc¨ªa Marti?o en surf, Mauri Marassi en wakeskate, Marcel Durbau en MTB y muchos m¨¢s¡±, dice Juan Fern¨¢ndez-Estrada.

Todo este ¡°ruido¡±, como les gusta llamarlo, les ha ayudado a abrir tiendas f¨ªsicas en Barcelona, Bilbao, M¨¢laga, Madrid (donde tienen dos, en la calle Fuencarral y en la calle Goya), Santander, Sevilla, Valencia y Zaragoza, adem¨¢s de tiendas en El Corte Ingl¨¦s en Badajoz, Marbella, C¨¢diz, Murcia, Pozuelo de Alarc¨®n, Sanchinarro (Madrid) o Valladolid. Cinco de ellas abiertas en plena pandemia, algo que seg¨²n cuentan en Instagram, les desaconsejaron e hicieron de igual modo: ¡°Well, we did it, it feels f*ucking good and it¡¯s happening today¡± (¡°Bueno, lo hicimos, sienta j*didamente bien y est¨¢ sucediendo hoy¡±). Su actitud de romper normas es otra constante en sus post en redes sociales y parece que ha conectado con una generaci¨®n, porque en las ¨²ltimas aperturas de tiendas ha habido, incluso, cola en la calle: ¡°Las aperturas se han convertido en un evento en cada nueva ciudad. Nosotros solemos ir y siempre nos sorprende la cantidad de gente que se acerca. En las ¨²ltimas, Santander y Bilbao, tuvimos a gente durmiendo la noche de antes en la puerta para ser los primeros en llegar¡±, cuenta Juan Fern¨¢ndez-Estrada. ¡°Tambi¨¦n hemos convocado a gente para que se acerque vestida como si fuera a practicar alguno de nuestros deportes favoritos: el surf, el esqu¨ª y el skate. En Zaragoza tuvimos a gente que lleg¨® con el equipo completo para subir a esquiar, esqu¨ªs incluidos¡±, recuerda Nacho Rivera.

Siendo posmil¨¦nicos o zetas, adem¨¢s de ofrecer fotogenia y experiencias, la otra pata que ten¨ªa que sostener la marca de estos dos emprendedores es la de la sostenibilidad. De hecho su ¨²ltima campa?a, What is Lost, se plantea un futuro dist¨®pico para denunciar el impacto del consumo irresponsable. ?C¨®mo encaja esta bandera cuando est¨¢s creando una nueva marca de ropa? Nacho Rivera explica que son ¡°conscientes de que el Retail es uno de los sectores m¨¢s contaminantes que existen, de ah¨ª la necesidad de ser m¨¢s proactivos que nunca. Desde que comenzamos el proyecto ten¨ªamos claro que quer¨ªamos que nuestra huella fuese lo m¨¢s amable posible con el medioambiente, siempre siendo conscientes de lo que producimos. La mayor¨ªa de nuestras prendas est¨¢ hecha en algod¨®n org¨¢nico, que, a diferencia del convencional, necesita de una menor cantidad de agua y prescinde del uso de fertilizantes para su cultivo. Tambi¨¦n empleamos el poli¨¦ster reciclado, y tintes naturales y hemos experimentado mucho con tejidos novedosos como la fibra de c¨¢?amo u ortiga. Con todo esto buscamos hacer las cosas de otra manera, sabemos que en la industria textil se puede y se debe¡±. Conf¨ªan, por tanto, en que marcas como la suya puedan desplazar del mercado a otras opciones menos sostenibles: ¡°Siempre hemos tenido un gran v¨ªnculo y respeto por la naturaleza, de ah¨ª que nuestra producci¨®n sea lo m¨¢s respetuosa posible con ella. En 2021 dimos un gran paso que fue determinante para Blue Banana. Nos convertimos en la primera marca de ropa espa?ola que negativiza las emisiones de carbono de su cat¨¢logo, lo que significa que compensamos el doble de las emisiones que genera (colaborando en proyectos de purificaci¨®n del aire avalados por instituciones gubernamentales como las Naciones Unidas o el Ministerio de Transici¨®n Ecol¨®gica). Esto nos hace ver que si nosotros, que somos una marca relativamente nueva lo hemos conseguido, cualquier otra puede unirse al camino. Tambi¨¦n hemos conseguido que todas nuestras tiendas y oficinas sean net zero, es decir, su funcionamiento no genera huella de carbono¡±, apunta Juan Fern¨¢ndez-Estrada.

En sus prendas, este compromiso se traduce en la elecci¨®n de algod¨®n org¨¢nico, que ¡°ayuda a preservar la biodiversidad y a mantener los ecosistemas saludables. Su impacto ambiental es muy bajo, ya que, al alimentarse de la lluvia y no del riego artificial, utiliza menos cantidad de agua. Tambi¨¦n mejora la calidad de la tierra, pues sus semillas no se modifican gen¨¦ticamente y no requiere de pesticidas ni fertilizantes. Esto es muy importante porque el algod¨®n convencional es el responsable de un 25 % del uso de pesticidas en el mundo¡±, explican en la presentaci¨®n corporativa de la marca. ¡°Para crear un sistema realmente circular, deber¨ªamos reutilizar los bienes que ya tenemos. El reciclaje de poli¨¦ster consiste en transformar desechos como botellas de pl¨¢stico en fibra textil. Mediante este proceso hacemos frente a uno de los principales retos medioambientales de los ¨²ltimos tiempos, la contaminaci¨®n por pl¨¢sticos y, adem¨¢s, le damos utilidad a algo que va a estar en nuestro planeta durante mucho tiempo¡±, a?aden. Sus embalajes est¨¢n hechos de materiales reciclados.

Blue Banana lanza dos grandes colecciones al a?o que se complementan con otras l¨ªneas algo m¨¢s peque?as en el calendario. ¡°Cada colecci¨®n tiene una inspiraci¨®n que marca todos los dise?os. Buscamos que esta siempre est¨¦ relacionada con el planeta o nuestro estilo de vida. La actual, primavera-verano 2023 se ha inspirado en cuatro espacios clave de la naturaleza: la monta?a, el mar, el bosque y el desierto. Estos han definido los estilos de las prendas que se empezaron a trabajar hace bastante¡±, cuenta Juan Fern¨¢ndez-Estrada. El proceso de lanzamiento de nuevas prendas es bastante cl¨¢sico en tiempos y procesos: ¡°Una colecci¨®n normal empieza a trabajarse 13 meses antes de que salga a la venta. El proceso es largo y muy interesante, empezamos buscando esa fuente de inspiraci¨®n que coment¨¢bamos, definimos moodboard, estudiamos las prendas, patrones y materiales que queremos y hay bastantes rondas de perfeccionamiento de los dise?os. Cuando estamos satisfechos con estos, mandamos a producir pruebas antes de encargar la colecci¨®n. Ahora mismo estamos trabajando ya en primavera-verano 2024¡±, explica Nacho Rivera.

Sobre sus procesos de producci¨®n, as¨ª lo cuentan desde la marca: ¡°Nos han dicho una y otra vez que miremos el?Made in?en las etiquetas de lo que compramos. ?Y si te decimos que hay que ir m¨¢s all¨¢ y dejar atr¨¢s el d¨®nde se ha hecho para pensar en el c¨®mo? ?Cu¨¢les son las condiciones laborales de los trabajadores en cada f¨¢brica? ?Con qu¨¦ tipo de materiales trabajan? En Blue Banana creemos que una ubicaci¨®n es mucho m¨¢s que el estigma que conlleva. Por ello, estamos orgullosos de que nuestra producci¨®n se divida entre Europa y Asia. Y, s¨ª, decimos orgullosos porque trabajamos con las mejores f¨¢bricas de Espa?a y Portugal, pero tambi¨¦n tenemos colecciones excelentes que provienen de China, Bangladesh y Turqu¨ªa. En cada pa¨ªs trabajamos con empresas que velan por la seguridad de sus trabajadores y que llevan a cabo rigurosas inspecciones para que las condiciones de trabajo sean favorables. Adem¨¢s, creemos que evitar la producci¨®n en pa¨ªses como Bangladesh puede ser m¨¢s da?ino que beneficioso, sobre todo para las 4 millones de personas de la zona que viven de la industria textil¡±.

El futuro, creen, ser¨¢ prometedor para la marca. ¡°Estamos trabajando en internacionalizarnos. Blue Banana ya vende a trav¨¦s de la web en Estados Unidos y Europa, pero tenemos un ojo puesto en Latinoam¨¦rica y nos encantar¨ªa poder decir que estamos consolidados all¨ª en un futuro muy cercano. Igualmente estamos ampliando progresivamente el cat¨¢logo, con cada nueva temporada lanzamos nuevas prendas (en esta hemos incorporado bikinis, camisas de lino y shorts) y nos est¨¢ yendo bien, con lo que esperamos poder decir en cinco a?os que Blue Banana es mucho m¨¢s que una firma de camisetas y sudaderas¡±, proyecta Juan Fern¨¢ndez-Estrada. Y hacer ruido, mucho ruido.