Christine Jorgensen: la pionera en reasignaci¨®n de sexo fue un soldado de la Segunda Guerra Mundial
El documental de Netflix Disclosure: ser trans en Hollywood, recupera la figura de Christine Jorgensen, la primera celebridad trans de la historia que tuvo un papel esencial para la visibilizaci¨®n medi¨¢tica del colectivo.
¡°Nunca entend¨ª por qu¨¦ recib¨ª tanta atenci¨®n¡±. En 1986, convertida ya por entonces en un mito indeleble de la cultura del siglo XX y enfrascada en la lucha contra el c¨¢ncer, Christine Jorgensen segu¨ªa restando importancia a lo conseguido. Ella, defend¨ªa, solo era ¡°alguien que hab¨ªa hecho lo que le hab¨ªa dado la gana¡± en un tiempo ¨Cprincipios de la d¨¦cada de los 50¨C, en el que nadie aspiraba siquiera a atreverse a pensar en sus anhelos. La neoyorquina se convirti¨® en la primera persona en someterse con ¨¦xito a una cirug¨ªa de reasignaci¨®n de sexo y a una terapia hormonal, pero, sobre todo, se erigi¨® en la imagen medi¨¢tica por excelencia del colectivo trans para varias generaciones. Hoy, el documental de Netflix Disclosure: ser trans en Hollywood, rescata del olvido su incre¨ªble historia.
¡°Jorgensen ha sido, desde siempre, un icono de nuestra historia y una gran referente para el colectivo trans¡±, explica a S Moda Marcos Ventura, Coordinadora del Grupo de Pol¨ªticas Trans de la FELGTB (Federaci¨®n Estatal de Lesbianas, Gais, Trans y Bisexuales). Ventura no solo rese?a la importancia del ¨¦xito de su reasignaci¨®n de g¨¦nero, que supuso un hito esperanzador para muchas personas, sino su visibilidad medi¨¢tica, esencial para colectivos oprimidos y minoritarios. ¡°No es lo mismo salir del armario como mujer trans cuando tu familia no tiene ni idea de qu¨¦ significa eso, o la ¨²nica idea que tiene de ello es la de personas que viven en la prostituci¨®n y la marginalidad, que hacerlo cuando tu familia puede vincular tu realidad con la de esa actriz tan famosa que sale en los medios de comunicaci¨®n¡±, manifiesta.
Nacido en 1926, los adjetivos que Christine dedicar¨ªa a George Jorgensen, el hijo de un carpintero que creci¨® en el seno de una familia de origen dan¨¦s en el Bronx, fueron los de ¡°introvertido, fr¨¢gil y triste¡±. ¡°?l nunca se identific¨® como un joven homosexual, sino como una mujer atrapada en el cuerpo de un hombre¡±, confes¨® a la BBC el cineasta Teit Ritzau, autor de un documental sobre ella. Tras conseguir el graduado escolar se alist¨® en el ej¨¦rcito, sirviendo durante 14 meses en los estertores de la Segunda Guerra Mundial. Poco despu¨¦s, aquel soldado leer¨ªa un art¨ªculo sobre los avances en terapia hormonal para reasignaci¨®n de g¨¦nero por un doctor dan¨¦s llamado Christian Hamburguer. Gracias a sus conexiones familiares con el pa¨ªs, viaj¨® hasta Copenhague en 1950 sin que nadie supiera que su intenci¨®n era regresar a Estados Unidos como una mujer. La transici¨®n comenz¨® con un a?o de terapia hormonal y continu¨® con una orquiectom¨ªa y una penectom¨ªa, que el Ministro de Justicia dan¨¦s aprob¨® expresamente para su caso.
A su vuelta, el 1 de diciembre de 1952, se convirti¨® en toda una celebridad. ¡°Exsoldado se transforma en belleza rubia¡±, sosten¨ªa en portada el New York Daily News, enfrentando el retrato del joven George con la Christine de 27 a?os y labios pintados de rojo. Su medi¨¢tico aterrizaje en el aeropuerto fue visto tanto como un triunfo de la medicina moderna (en Estados Unidos se someti¨® a una vaginoplastia), como un episodio freak por parte de la prensa m¨¢s sensacionalista. En aquella ¨¦poca, incluso decir la palabra homosexual estaba prohibido en televisi¨®n y las cadenas vetaron su presencia. ¡°Estaban aterrorizados de m¨ª. Llegu¨¦ a la conclusi¨®n de que pensaban que iba a quitarme la ropa y correr desnuda hacia la c¨¢mara¡±, declar¨® en el programa de Gary Collins.
Disclosure: ser trans en Hollywood es un documental producido por la actriz Laverne Cox (Orange is the new black) en el que decenas de voces de la comunidad trans analizan la (infra)representaci¨®n y el impacto del colectivo en la industria cinematogr¨¢fica y televisiva desde los inicios de la meca del cine. La obra arroja luz sobre el largu¨ªsimo historial de representaciones ofensivas, burlonas, ignorantes e incluso peligrosas, que han dado vida y forma a los prejuicios que la sociedad exhibe hoy en d¨ªa, teniendo en cuenta que hasta un 80% de los estadounidenses afirman no conocer personalmente a ninguna persona trans. ¡°Este documental tiene una importancia enorme para mejorar nuestras vidas¡±, defiende Ventura, convencida de que recuperar la historia y los referentes del colectivo en un medio de masas como Netflix es clave para ¡°acabar con los prejuicios que sustentan nuestra discriminaci¨®n¡±.
¡°No fue la primera persona trans, ni la primera en recurrir a hormonas o cirug¨ªas, pero s¨ª fue la primera en ser mundialmente famosa por ello. Fue la imagen de la gente transg¨¦nero para toda una generaci¨®n¡±, explica en Disclosure la historiadora Susan Stryker, que alaba que Jorgensen fijara las pautas de la conversaci¨®n sobre la identidad trans. Ya en la televisi¨®n de los 80 ped¨ªa cl¨ªnicas de orientaci¨®n para transexuales y rechazaba que la cirug¨ªa fuera el centro del debate de una condici¨®n que va mucho m¨¢s all¨¢ de la mera operaci¨®n. ¡°La cirug¨ªa es el anticl¨ªmax, se hace despu¨¦s de todo lo dem¨¢s¡±, aduc¨ªa. Stryker recuerda tambi¨¦n c¨®mo algunas de las reacciones m¨¢s transf¨®bicas proceden precisamente del colectivo gay y ten¨ªan a Jorgensen como objetivo de serias amenazas. Una, en concreto, la instaba a ¡°acabar el trabajo que empez¨® el m¨¦dico¡± en una carta de un hombre que se identificaba como gay y que inclu¨ªa una cuchilla.
Jorgensen trabaj¨® como cabaretera y anfitriona en clubs de fiestas y, aunque estuvo prometida, no consigui¨® obtener la licencia matrimonial al ser calificada como ¡°var¨®n¡± en su certificado de nacimiento. Su mayor logro no fue el ¨¦xito de su transici¨®n, sino su constante trabajo activista para concienciar a la sociedad de la ¨¦poca sobre qu¨¦ significa ser trans. Ofreci¨® innumerables entrevistas, escribi¨® varios libros y dio conferencias en universidades, sosteniendo que hab¨ªa hablado con m¨¢s de 200.000 estudiantes a lo largo del tiempo.
¡°La aceptaci¨®n es incre¨ªble en los campus universitarios, pero tengo que admitir que lo que hice solo lo hice por m¨ª. No ten¨ªa ni idea de que iba a afectar al resto del mundo¡±, sostuvo en una entrevista televisiva en 1981. Para Ventura, que tanto j¨®venes como adultos conozcan la realidad de las personas trans es el paso previo a una igualdad real que sigue sin materializarse. ¡°Llegar¨¢ cuando dejemos de ser para la mayor¨ªa social un ente abstracto y empecemos a ser seres de carne y hueso, personas con sentimientos y preocupaciones que tienen tanto derecho a la felicidad como las dem¨¢s. Las charlas en primera persona son uno de los instrumentos m¨¢s potentes que tenemos¡±.
Jorgensen muri¨® en 1989 a los 62 a?os, despu¨¦s de una larga batalla contra los c¨¢nceres de vejiga y pulm¨®n y es recordada como una de las pioneras y hero¨ªnas de la comunidad LGTB. Aunque se han producido avances indiscutibles en los ¨²ltimos a?os, lo cierto es que la igualdad real sigue siendo una quimera. ¡°En Espa?a, sin ir m¨¢s lejos, las personas trans a¨²n necesitamos ser acreditadas por profesionales sanitarios como enfermas mentales para poder acceder a los pocos derechos que tenemos¡±, corrobora la coordinadora, que concluye arrojando luz sobre la cruda realidad del colectivo: ¡°A¨²n seguimos teniendo alt¨ªsimas tasas de paro y exclusi¨®n social, a¨²n nos siguen echando de casa por ser trans, y a¨²n seguimos teniendo unos datos de suicidio intolerablemente elevados, reflejo de las consecuencias que tiene la transfobia en nuestro bienestar y salud mental. Y, todav¨ªa peor, sigue habiendo gente que se cree con derecho a discutir sobre nuestra realidad, sobre si existimos de verdad o no, sobre si merecemos dignidad y respeto¡±.
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