Katherine Heigl: ?Todav¨ªa estoy aprendiendo a vestirme?

Su belleza cl¨¢sica recuerda al Hollywood de anta?o. Su naturalidad y su ¨¦xito la anclan en el presente. Primero como la doctora Izzie en Anatom¨ªa de Grey, luego como la nueva reina de la comedia rom¨¢ntica en L¨ªo embarazoso (2007) y 27 vestidos (2008), y ahora en La cazarrecompensas. Esta actriz de 33 a?os ha sabido ganarse a su p¨²blico, a su marido ¨Cel m¨²sico Josh Kelley¨C y a su hija adoptiva, Naleigh. Eso, adem¨¢s de ser la envidia de todas las que querr¨ªan ser como ella, que en EE?UU son muchas.

Hablemos de cabello: ?rubia, casta?a, morena?

Soy rubia deste?ida, ese tipo arenoso y horrible. Me gusta cambiar, pero no he probado el rojo. El casta?o es dif¨ªcil de mantener.

?M¨¢s dif¨ªcil que mantenerse en forma?

No soy de las peores en ese sentido. Me gustar¨ªa alimentarme mejor. No me pongo ciega de comida basura, pero soy de las que no desayunan. Y una vez que tomo mi caf¨¦ y mi dosis de nicotina no me queda m¨¢s apetito por la ma?ana, algo que dicen que es tan importante. ?A lo mejor no soy tan sana como pienso!

Al menos se ha pasado a los cigarrillos el¨¦ctricos.

No te creas que mejora mucho. Estos no hacen humo, pero tienen nicotina y, como los puedo fumar en cualquier sitio, me da la sensaci¨®n de que estoy fumando m¨¢s.

?No se quejan en casa?

All¨ª me da por tejer. Hay algo en jugar con las agujas que me relaja. Es mi forma de meditar. Hago punto mientras mi marido ensaya una canci¨®n y mi ni?a est¨¢ durmiendo en su cuarto. ?Hay algo tan pac¨ªfico en toda esa situaci¨®n! Es una energ¨ªa que me hace sentir segura y con los pies en la Tierra. Pero resulta dif¨ªcil de explicar.

?C¨®mo se consigue ese equilibrio familiar?

Escuchas a parejas que se alternan en sus trabajos y cuentan que cuando uno recibe una oferta el otro se queda en casa. Suena bien, pero no me lo acabo de creer porque en nuestra profesi¨®n uno no sabe lo que va a pasar despu¨¦s. A Josh su carrera le obliga a ir de gira. He probado quedarme de guardia un par de veces y ha sido suficiente para darme cuenta de que no es para m¨ª.

?Le gustar¨ªa que su hija siguiera sus pasos art¨ªsticos?

Tengo pensado meterla en un convento como me amenazaba mi madre a m¨ª. No s¨¦ lo que ser¨¢ de ella en el futuro, pero estoy dispuesta a proteger su inocencia todo lo posible. La vida ya es bastante complicada como para que empiece a sentirse sexy a los siete a?os.

?Y c¨®mo piensa evitarlo?

Pues nada de tel¨¦fonos ni de ordenadores en su habitaci¨®n. Uno en el sal¨®n donde pueda vigilarla por encima del hombro.

?Y en cuesti¨®n de moda? ?Hay algo m¨¢s divertido que vestir a una ni?a?

Y mi hija es una mu?eca que adora sus vestidos.

En realidad, no me refer¨ªa a su hija.

?A la madre tambi¨¦n le gustan los vestiditos! Especialmente si me pongo en manos de alguien que se encargue de vestirme bien. Si me toca arreglarme a m¨ª, soy un manojo de nervios. Nunca he sido la persona con m¨¢s estilo del mundo, pero estoy aprendiendo. Ten¨ªa el armario lleno de Gap hasta que consegu¨ª un poco de ¨¦xito y prob¨¦ Valentino y Prada. Pero mi marido me prefiere en vaqueros y con una de sus camisas.

?Qu¨¦ opina de las listas de las mejor y las peor vestidas?

En una ocasi¨®n le¨ª en una de estas listas que yo parec¨ªa una galletita de la suerte con la chaqueta que llevaba. ?A m¨ª que me parec¨ªa tan bonita! Puedes tom¨¢rtelo como algo personal y tirar la chaqueta o pensar: ??Que les den!?, y pon¨¦rtela una y otra vez. Suelo optar por lo segundo, pero hay momentos en los que te sientes avergonzada.

?Tiene planes para su futuro m¨¢s cercano?

Lo m¨¢s inmediato es mi pr¨®xima adopci¨®n. No quiero que Naleigh sea hija ¨²nica. Y quiero un ni?o. Si Josh tiene su princesita yo quiero un ni?o de mam¨¢.

?Por qu¨¦ la adopci¨®n?

Hemos hablado de concebir un hijo, aunque soy muy gallina en lo que se refiere a soportar dolor. Pero todo eso lo haremos m¨¢s adelante. ?Y antes de ser demasiado vieja!