Quim Guti¨¦rrez, el nuevo icono fashion

El actor Quim Guti¨¦rrez ultima la sesi¨®n de fotos para este reportaje con un pantal¨®n deportivo de H&M y su torso desnudo. Se enrolla en la verja de un puente peatonal y lo hace de una manera a medio camino homeless y una especie de pantera macho: piel, m¨²sculo, inteligencia y supervivencia en un mismo cuerpo. ?Esto es lo m¨¢s absurdo que he hecho en mucho tiempo?, bromea mientras saluda con un par de besos. De entre todas las cosas que gustan de ¨¦l, la voz es la m¨¢s directa. Grave, educada, serena. ?Soy hijo de un catedr¨¢tico de Biolog¨ªa y una psicopedagoga. En mi casa hablamos, y mucho; discutimos a fondo. Eso te da vocabulario. Cuando lo echo en falta, me organizo y me voy con ellos. Procuramos hacer largas sobremesas unas 12, 15 veces al a?o?.

Guti¨¦rrez es uno de los actores m¨¢s interesantes de su generaci¨®n. Estrechamente vinculado a la filmograf¨ªa de Daniel S¨¢nchez Ar¨¦valo, cuyo Azul oscuro casi negro (2006) transform¨® a este int¨¦rprete de series televisivas en objeto de deseo y conversaci¨®n. Ahora vuelven a unir sus destinos en La gran familia espa?ola, una fuerte apuesta comercial del director en la que Guti¨¦rrez da vida a uno de los cinco hermanos de una familia inspirada en el cl¨¢sico musical hollywoodiense Siete novias para siete hermanos (1954). ?Daniel y yo hemos trabajado muchas veces juntos y para m¨ª esta es su pel¨ªcula m¨¢s ¨ªntima, la que m¨¢s habla de ¨¦l, de c¨®mo observa el mundo. Me entusiasm¨® este retrato de familia porque cuando ves que todas las cosas fallan ¨Cel sistema, la sociedad, la econom¨ªa y la pol¨ªtica¨C te das cuenta de que la familia sigue estando ah¨ª. A lo mejor es un proceso que solo asimilas pasados los 30 a?os, pero la familia es casi el ¨²nico lugar posible en el que no eres ni ganador ni perdedor?.

Ch¨¢ndal de Cheap Monday, gorra 59FIFTY W de Wesc, calzoncillos de Calvin Klein y zapatillas

Daniel Riera.

Guti¨¦rrez interpreta a Caleb, el hermano l¨ªder, acostumbrado a arreglar la vida de los dem¨¢s pero incapaz de solucionar sus sentimientos. ?A m¨ª me gustar¨ªa definirme como una persona flexible. Es muy importante para un actor serlo en el sentido f¨ªsico pero, sobre todo, mentalmente. No es el caso de mi personaje. Es agotador que est¨¦ obligado a ser de derechas o de izquierdas, blanco o negro, cuando en la flexibilidad te encuentras mucho m¨¢s c¨®modo, piensas m¨¢s, lees mejor y, sobre todo, abandonas la trascendencia. Cada d¨ªa veo m¨¢s artificial y m¨¢s impostada la trascendencia. Los actores tendemos a ser muy serios, muy anal¨ªticos. Hay que reflexionar hasta un punto y entonces hacerte flexible?.

?Esa flexibilidad la aplica tambi¨¦n a su virilidad? ?Siempre existe esa tensi¨®n de si soy gay o no. Me sorprende cuando me lo preguntan abiertamente porque, ante la respuesta negativa, me dicen: ¡°Vaya, hab¨ªa pensado que lo eras¡±. No s¨¦ qu¨¦ hay en m¨ª que lo provoca. Me sorprende que siga siendo un t¨®pico el hecho de que me puedo pasar dos horas admirando zapatillas y escogerlas por los colores?. ?Puede ser que el actor transpira tanta sexualidad que todos los p¨²blicos quieren su pedacito? ?Me horrorizar¨ªa tener ese concepto tan comercial de mi sensualidad. Entiendo que hay que complacer, pero no que eso sea lo que te hace m¨¢s o menos seductor. A m¨ª me gusta jugar y hacer sentir a quien me interesa que es lo ¨²nico que me importa. Pero creo que uno debe ser consciente de que est¨¢s seduciendo. Eso arruina completamente una de las cosas m¨¢s divertidas del mundo?.

Chaqueta con capucha de viscosa y neopreno de Giorgio Armani, camiseta de Levi¡¯s y cadena y anillos de El Mercado de la Plata (Fuencarral, 52).

Daniel Riera.

?Pero qu¨¦ siente cuando se da cuenta de que para el publico gay es un?sex symbol?por su masculinidad? ?Lo noto. Pero me llama la atenci¨®n que un hombre todav¨ªa tenga que pedir permiso hoy para gustar a todos. Est¨¢ claro que es un clic: algo que despiertas en la gente. ?Por qu¨¦ contenerlo o explicarlo? Pasa y punto. Ese es el principio de la flexibilidad. Estamos en una permanente revoluci¨®n, todos los d¨ªas algo cambia, as¨ª que tambi¨¦n cambia la sensualidad masculina. Cada vez hay m¨¢s cosas de nosotros, los varones, que gustan y eso hay que disfrutarlo?.

El elemento masculino por excelencia en la cultura latina es el f¨²tbol y juega un papel protagonista en?La gran familia espa?ola. La acci¨®n se desarrolla durante la boda del hermano menor, Efra¨ªn (brillantemente interpretado por Patrick Criado, a quien muchos ven como el nuevo fetiche de S¨¢nchez Ar¨¦valo), que a su vez coincide con la final de la Copa del Mundo en Sud¨¢frica 2010. ?No soy nada futbolero y como catal¨¢n tengo reacciones ambiguas acerca del patriotismo que significa ver triunfar a la Selecci¨®n. Pero eso no significa que no defienda la inmensa emoci¨®n que sent¨ª, como tantos otros espa?oles, cuando Iniesta marc¨® el gol. Ese momento, que fue maravilloso, queda muy bien reflejado en la pel¨ªcula: un instante irrepetible de unidad como pa¨ªs, como luchadores, como hombres. Es inolvidable. Yo vi ese partido con Daniel, precisamente. Y de repente, como en la pel¨ªcula, pasamos de ser los quejicas con ese mantra de ¡°Espa?a no lo va a conseguir, no sabemos ganar¡± a ser todo lo contrario: esperanzados, optimistas y, definitivamente, ganadores. Ah¨ª est¨¢ la clave de esta cinta. Est¨¢ muy bien que recordemos que podemos creer en nosotros mismos?.?

Pantal¨®n deportivo con raya lateral de H&M, gorra de Lacoste live! y anillos de El Mercado de la Plata (Fuencarral, 52).

Daniel Riera.

De cerca, Guti¨¦rrez es arrebatador. No tiene una manicura perfecta, lleva una camiseta con un dibujo de Teen Wolf, el personaje que inmortalizara Michael J. Fox en los a?os 80, y tambi¨¦n otra camiseta con el 23 m¨ªtico de Michael Jordan. El pelo, imposiblemente revuelto; los ojos, deliciosamente marrones. Se aproxima, habla a los ojos, env¨ªa saludos a mi marido. ?Cree que los?sex symbols?latinos no solo tienen m¨¢s pelo, sino que se les permite ostentar rasgos m¨¢s toscos, jugar m¨¢s con el lado canalla que a los anglosajones, que solo pueden ser rubios y de belleza cl¨¢sica? ??Me est¨¢s llamando feo??, replica sonriendo sin complejo, mostrando su caracter¨ªstico diastema. ?Es que no son solo los dientes. Son las orejas, la nariz aplastada. Soy Frodo, yo me veo as¨ª. Pero estoy de acuerdo en que a muchas chicas les gustan los chicos malos?. ?A las se?oras tambi¨¦n? ?Un buen restreg¨®n con un golfo siempre est¨¢ ah¨ª, en las fantas¨ªas?, responde riendo. ?El tema de mis dientes separados¡­ Imag¨ªnate, mi primer agente hasta me plante¨® arregl¨¢rmelos. Pero toda mi familia los tiene iguales, es marca de la casa. As¨ª que coincidimos en que no los ¨ªbamos a tocar ni de broma?. Por si quedaba alguna duda, hace tres a?os en el cumplea?os de Almod¨®var el fot¨®grafo Bruce Weber lo mir¨® a los dientes y le dijo: ?Nunca te los toques?.

B¨¢sicamente, es una de sus se?as de identidad y en m¨¢s de una ocasi¨®n, al verle sonre¨ªr uno desea saber qu¨¦ se sentir¨ªa al colar un poquito de lengua entre esos incisivos. ?Cuando empec¨¦ siempre me fijaba en Jean Paul Belmondo. Era verlo y me parec¨ªa rudo, feo, viril, genial. No me parezco ni de lejos a ¨¦l, pero al ver que un hombre as¨ª pod¨ªa hacer pel¨ªculas, crear personajes tan cargados de emoci¨®n, de contenci¨®n, pens¨¦ que yo tambi¨¦n pod¨ªa?.

Ch¨¢ndal de Cheap Monday, gorra 59FIFTY W de Wesc, calzoncillos de Calvin Klein y zapatillas de Nike Air Max.

Daniel Riera.

?Es ese potencial de rudeza y sensibilidad, de inteligencia y flexibilidad emocional lo que vio Riccardo Tisci para convertirlo en imagen de Givenchy? ?En realidad nunca sabes c¨®mo surgen estas historias. Uno piensa: ¡°Me habr¨¢n?googleado, habr¨¢n visto alguna escena, alguna foto y les encajaba y me ofrecieron el trabajo¡±. Pero, apenas conoc¨ª a Tisci, de inmediato est¨¢bamos hablando, haciendo chistes y saltando de un tema a otro?.

?Un encuentro flexible? ?Digamos que divertido: me tom¨¦ cuatro copas de champ¨¢n seguidas porque fui solo, sin representante, sin amiga o amigo de ¡°ven, vamos a flipar con esto¡±. Fui solo, integral. Y con un franc¨¦s no tan fluido como para hacer chistes. Pero me debieron de ver asimil¨¢ndolo todo y, al final, la sesi¨®n se realiz¨® en una atm¨®sfera fant¨¢stica. Me interesan muchas cosas del mundo de la est¨¦tica. Siempre he tenido inclinaci¨®n por comprar libros de arte, decoraci¨®n y moda. Me gusta mucho la fotograf¨ªa y me apasiona Ron Galella?.

Galella es el ¨²nico paparazi que ha visto c¨®mo sus instant¨¢neas de celebridades de los a?os 70 se han elevado a la categor¨ªa de obras de museo. De hecho, grandes instituciones, desde la Tate Modern a PhotoEspa?a, le dedican retrospectivas. ?Tiene el don de capturar la verdad. Todas esas fotos de Jackie Kennedy huyendo de su acoso y derribo [la c¨¦lebre primera dama lleg¨® a imponerle una orden judicial para mantenerlo alejado de ella 200 metros] o de Marlon Brando a punto de asestarle un pu?etazo son un universo que me atrapa. Son historias. No tiene nada que ver con los paparazis de hoy en d¨ªa, escondidos en furgonetas con las ventanas tintadas y buscando fotografiarte sin camiseta en Ibiza. Galella quer¨ªa retratar un tiempo que es ¨²nico, irrepetible. Lo mismo me sucede con Studio 54, creo que all¨ª estaba surgiendo un cambio en la sociedad. Podr¨¢ parecer vacuo, decadente, pero para m¨ª es absolutamente fascinante y envidiable?.

Jersey de lana de Gucci y pendiente con im¨¢n de Givenchy.

Daniel Riera.

?Ahora resulta que nos hemos vuelto m¨¢s aburridos? ?S¨ª, la obsesi¨®n por el ¨¦xito te hace ser mucho menos arriesgado. Y, de nuevo, no atreverte a ser flexible. Por eso disfruto tanto siendo actor. Es la ¨²nica profesi¨®n del mundo que te invita continuamente a tomar riesgos. A Daniel le gusta mucho que improvisemos durante la creaci¨®n de nuestros personajes. Lo llama ¡°caminos descartados¡±. En este sentido, Antonio de la Torre es fant¨¢stico. Es r¨¢pido, sabe combinar la improvisaci¨®n con el gui¨®n, d¨¢ndole a¨²n m¨¢s verosimilitud al personaje. Me encanta compartir con profesionales as¨ª, como Jos¨¦ Coronado, que llevan a?os rodando pel¨ªculas y se lo siguen pasando bien?.

Guti¨¦rrez disfruta mucho con las nuevas tecnolog¨ªas y las redes sociales. ?Hay cuentas de Twitter que son para informaci¨®n, otras para debate. Me parece que es la red m¨¢s democr¨¢tica porque te permite re¨ªr y reflexionar. Para m¨ª, que soy tan racional, que todo lo reflexiono, es fant¨¢stico aprender a re¨ªrte de ti mismo, a no tomarte tan en serio?. En una de las fotos que ha colgado en su Instagram, se califica como ?un clich¨¦ con gafas? y aparece endemoniadamente sexy, con el pelo agitado, una camiseta sin mangas y unas gafas de sol completamente negras. ?Desarmarte a ti mismo es lo m¨¢s seductor que conozco?, reafirma. Se levanta para recoger su maleta y marcharse unos d¨ªas a la playa antes de que la promoci¨®n de la pel¨ªcula no lo deje respirar. ?Como me divierto creando varias versiones de m¨ª mismo, m¨¢s me reafirmo en que tener estilo es f¨¢cil: agitas un par de ideas y te sale?. ?Y qu¨¦ es lo dif¨ªcil? ?No darle importancia?.

Chaqueta de Givenchy, camiseta de Levi¡¯s y cadenas de El Mercado de la Plata (Fuencarral, 52).

Daniel Riera.