6.000 cristales pegados a mano: as¨ª se hacen los espectaculares maillots de gimnasia r¨ªtmica
Este deporte ol¨ªmpico no se entender¨ªa hoy sin la exuberancia y el brillo de su equipaci¨®n. Esta es la historia de las mujeres que la cosen a mano.
Entre el distrito ruso de Novogorsk, a las afueras de Mosc¨², y el cacere?o municipio de Trujillo hay m¨¢s de 4.000 kil¨®metros. Pero desde este ¨²ltimo siguen con atenci¨®n lo que sucede en el centro de alto rendimiento en el que entrena el equipo nacional ruso de gimnasia r¨ªtmica. All¨ª se marcan muchas de las tendencias que rodean a este deporte y en Trujillo tiene su sede Tanitex, una de las pocas compa?¨ªas espa?olas encargadas de fabricar maillots de competici¨®n. De los talleres de la marca han salido prendas para vestir a varias campeonas ol¨ªmpicas, pero tambi¨¦n a miles de gimnastas que practican este ejercicio a nivel nacional o local. ?Tenemos una capacidad de producci¨®n de 200 a 500 maillots mensuales?, explica la creadora de la marca, Tanit P¨¦rez, una exgimnasta que se lanz¨® a emprender tras la crisis del 2008.
La prenda no se fabrica en serie y tiene un componente artesanal importante. ?Antes se cos¨ªan lentejuelas y a d¨ªa de hoy se utiliza pedrer¨ªa adhesiva?, se?ala P¨¦rez, ?un maillot puede llevar de 1.000 a 6.000 cristales pegados a mano?. Precisamente esta caracter¨ªstica es la que define al sector. La r¨ªtmica es la cuarta disciplina m¨¢s practicada entre ni?os y adolescentes en Espa?a ¨Csuperada por la nataci¨®n, el baloncesto y el f¨²tbol, seg¨²n la ¨²ltima encuesta de h¨¢bitos deportivos del Consejo Superior de Deportes¨C, pero el mercado dedicado a la confecci¨®n de sus prendas de gala es reducido: cuenta solo con un pu?ado de compa?¨ªas con capacidad (como Tanitex o Vinkova) y un ej¨¦rcito de costureras independientes que trabajan desde casa. Con esta ¨²ltima alternativa comenz¨® a vestirse la cuatro veces ol¨ªmpica Almudena Cid: ?De peque?a mi madre me llevaba a una tienda de telas al peso y all¨ª eleg¨ªamos las licras. Despu¨¦s, con la ayuda de una amiga de la familia, la Pili, me hac¨ªan el patr¨®n y lo cos¨ªan?.
Colgando mangas en los picaportes del sal¨®n y acumulando rollos de tejido en la habitaci¨®n vive Mar Higuera; trabaja en banca, pero desde hace a?os reduce horas de sue?o para hacer maillots para el equipo madrile?o CEP R¨ªtmica Vallecas. Unos 150 cada temporada: ?Un modelo sencillo, sin muchos cortes, me puede llevar dos o tres d¨ªas?. Empez¨® por casualidad, cuando la entrenadora le pidi¨® ayuda: ?Aprend¨ª patronaje en una escuela de confecci¨®n porque me ven¨ªa bien para desestresar, pero en mi vida me hubiera planteado esto?. Zurcir una tela el¨¢stica como la licra no es f¨¢cil y por eso muchos talleres rechazan pedidos que recogen mujeres como ella. ?Yo los hago a medida y hasta saber cu¨¢les necesitaba, las tomaba todas. Empiezas cometiendo errores, pero al final sale. En el primer conjunto que hice las faldas eran un poco m¨¢s bajas de lo que deb¨ªan, pero a las ni?as les encant¨®?.
Leyes suntuarias
La gimnasia r¨ªtmica consiste en hacer que parezca f¨¢cil lo complejo. Lo que lleva un esfuerzo tit¨¢nico y miles de horas de entrenamiento. Simular con una sonrisa que no cuesta un lanzamiento por la espalda y recogerlo con las rodillas. Aunque esa ligereza sobre el tapiz actualmente no se traduce en el vestido. La equipaci¨®n con la que compiten estas deportistas es seguramente la m¨¢s exuberante del panorama. Tambi¨¦n la que recibe m¨¢s atenci¨®n. Es la c¨²spide de ilusi¨®n de un deporte muy visual en el que m¨²sica, ejercicio, maillot y aparatos deben contar una historia. En este orden los pensaba Cid: ?Para el ¨²ltimo ejercicio de mi carrera deportiva eleg¨ª el Nessun dorma de la ¨®pera Turandot, pero no pens¨¦ en que el maillot hablara de la historia que transcurre en Pek¨ªn, sino de la historia que quer¨ªa contar yo en la Ciudad Prohibida. Quer¨ªa hablar de mi resurgir constante y de c¨®mo mi abuelo me inspir¨® en la constancia. Dise?¨¦ un ave f¨¦nix que me envolv¨ªa el cuello?.
Estas prendas forman parte fundamental de la puesta en escena, pero adem¨¢s tienen que facilitar los movimientos, que son muchos. Para esos cristales de los que hablaba la fundadora de Tanitex, ?existen planchas industriales, pero nosotras optamos por pegarlos uno a uno, para que no se caigan durante la pr¨¢ctica?, reconoce. La periodista deportiva Paloma del R¨ªo, narradora de la r¨ªtmica en televisi¨®n desde los a?os ochenta, recuerda otro elemento de la ecuaci¨®n, el c¨®digo de puntuaci¨®n, que marca c¨®mo deben ser los dise?os: ?En los reglamentos de los ochenta se limitaban los colores, te dec¨ªan c¨®mo deb¨ªa ser la sisa de la ingle, a qu¨¦ altura de la cadera ten¨ªa que llegar. El colorido no se pod¨ªa confundir con los colores de las medallas y eran blancos, negros o rosas?. Dicta la Federaci¨®n Internacional de Gimnasia, la FIG, introduciendo modificaciones cada cuatro a?os, con cada ciclo ol¨ªmpico. Ahora se permiten los bordados, las plumas, los flecos, las cadenas¡ ?Se han sobrecargado tanto que a veces parecen de los carnavales de Brasil?, a?ade Del R¨ªo. ?En los cambios del c¨®digo van desde las dificultades a la composici¨®n?, indica Higuera, ?los valores de los elementos o una parte dedicada al maillot, que dice qu¨¦ se permite y qu¨¦ no?. Unas normas guiadas desde Rusia.
En cualquier conversaci¨®n sobre la disciplina termina apareciendo el nombre de la V¨ªner, Irina V¨ªner, la zarina de este deporte y, para muchos, ?la capo de la r¨ªtmica mundial?. Presidenta de la Federaci¨®n Rusa de Gimnasia y vicepresidenta del Comit¨¦ T¨¦cnico de la FIG, vela para que cualquier reforma favorezca a sus compatriotas. Pero no solo ellas inspiran, defiende Higuera: ?En Espa?a se fijan mucho en las gimnastas internacionales. Dependiendo del estilo de cada una, inspiran las rusas, pero tambi¨¦n las ucranianas, con un estilo personal mucho m¨¢s elegante. Adem¨¢s se sacan ideas de Pinterest, de Instagram o de competiciones locales de otros sitios?. Los maillots de Cid, por ejemplo, ?siempre fueron dise?os propios y tambi¨¦n inspirados en algunos vestidos de desfiles de moda?.
Los ¨²ltimos ingredientes que marcan la est¨¦tica son innovaci¨®n t¨¦cnica y desarrollo de nuevos materiales. Con dise?os cada vez m¨¢s complejos, triunfan la estampaci¨®n o la impresi¨®n por sublimaci¨®n, que hace que el color quede estable en la licra. A veces se pinta a mano, lo que puede sumar unos 100 euros m¨¢s por pieza a unas prendas que ya oscilan entre los 300 y 600 euros y que f¨¢cilmente pueden alcanzar los cuatro d¨ªgitos para creaciones m¨¢s complejas. ?El futuro? Frente al maximalismo imperante Cid apuesta por una vuelta a los or¨ªgenes: ?Lo curioso del final de esta olimpiada es que este a?o Azerbaiy¨¢n recuper¨® el estilo de los modelos de la antigua URSS, sobrios, sin brillos ni colores: el conjunto de pelotas apareci¨® con maillots negros lisos?. Sorprendentes piezas de cuello alto, sin ruido, que sin embargo se llevaron todos los aplauso.
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