Gordas y fabulosas

Son j¨®venes y les gusta la moda. Todas tienen su propio blog de estilo y una talla que nada tiene que ver con la 34 de las l¨¢nguidas modelos que desfilan en Mil¨¢n o Par¨ªs. S¨ª, son gordas. Pero no tienen complejos. Ni se ocultan tras el anonimato que proporciona la red. Todo lo contrario. Utilizan Internet para reclamar que las fatshionistas tambi¨¦n tienen derecho a vestirse con las ¨²ltimas tendencias. Para ellas la palabra ?fat? (?gorda? en castellano) no tiene connotaciones negativas. Es solo el reflejo de una realidad que quieren que tambi¨¦n tenga su espacio en las revistas de moda. No en un especial ?tallas grandes?, sino en todos los n¨²meros. ?No me gusta separar por grupos; la idea es hablar de moda sin distinci¨®n de tallas?, dice Gabi Gregg, del blog youngfatandfabulous.com.

Su reivindicaci¨®n es la misma que exigen cada vez m¨¢s sectores de la sociedad, cansados de la imposici¨®n de un canon est¨¦tico imposible. No solo adolescentes como Julia Blhum, de 14 a?os, que ha conseguido reunir m¨¢s de 25.000 firmas en Estados Unidos para denunciar el uso de Photoshop en las revistas de moda y solicitar la publicaci¨®n de, por lo menos, una foto al mes sin retocar; o Rachael Johnston, una joven inglesa de 20 a?os que sufre anorexia nerviosa y que, con su madre, ha iniciado una campa?a para vetar la difusi¨®n de fotos de modelos extremadamente delgadas. Tambi¨¦n las principales cabeceras internacionales est¨¢n cada vez m¨¢s concienciadas. A principios de mayo, 19 editoras de Vogue de todo el mundo se reunieron para decidir las directrices generales de un pacto global por una moda m¨¢s saludable. Su compromiso: no trabajar con modelos que tengan menos de 16 a?os o sufran un trastorno alimenticio.

En Internet ¨Cdonde la popularidad no se mide en kilos sino en n¨²mero de visitantes¨C, el mensaje responsable que ahora promueven las revistas de moda hace tiempo que une a blogueras de todo el mundo y de todas las tallas. Como Gabi Gregg, de Detroit, m¨¢s conocida como @Gabifresh, con casi 18.000 seguidores en Twitter. Con su blog, gabifresh.com, se ha convertido en una de las embajadoras m¨¢s internacionales de la moda XL en la red. O Nicolette Mason, que adem¨¢s de bloguera, es editora de moda de Marie Claire y colaboradora de Vogue Curvy Italia (www.vogue.it/en/vogue-curvy). O en Espa?a, Ana Goitia, de www.elrincondeanatxu.com, una p¨¢gina con m¨¢s de 1.900 seguidores en Facebook. ?Decid¨ª crear un blog enfocado a tallas grandes porque [en 2008] apenas hab¨ªa informaci¨®n de firmas y tiendas para j¨®venes que quieren ir a la ¨²ltima y se niegan a vestirse con las t¨ªpicas colecciones de est¨¦tica matrona?, recuerda Gabi. Y prendas convencionales y aburridas es precisamente de lo que huyen estas chicas. ?No tengo iconos, pero me atrae el estilo de mujeres como Beth Ditto, Lady Gaga o Roisin Murphy, porque llevan lo que quieren sin importarles lo que piensen los dem¨¢s?, explica a S?Moda la bloguera belga Val¨¦rie (autora de blogtobealive.com). ?La moda deber¨ªa ser divertida?, asegura. ??Es cursi decir que me gusta el estilo de Carrie Bradshaw??, pregunta a esta revista Franceta Johnson (de franticdreams.com). ?S¨¦ que es un personaje de ficci¨®n, pero sabe c¨®mo defender cualquier look, de eso no hay duda?.

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Otras veces las musas no tienen nombre ni apellido. Est¨¢n en la calle, en las revistas, en el cine, en portadas de discos¡­ O en barrios como Harajuku en Tokio. All¨ª encontr¨® la inspiraci¨®n en 2006 la estilista australiana Hayley Hughes para crear su blog (fashionhayley.com). ?Me fascina como las j¨®venes japonesas mezclan todo tipo de estilos, estampados y accesorios y crean estilismos ¨²nicos que no lleva nadie m¨¢s?. El individualismo y eclecticismo nip¨®n es lo que m¨¢s seduce a este tipo de blogueras, que ans¨ªan diferenciarse de la masa uniforme. ?Misi¨®n imposible? ?Me encantar¨ªa poder entrar en cualquier tienda y probarme toda la ropa, pero no puedo?, lamenta Franceta. ?Como estilista estoy acostumbrada a trabajar rodeada de prendas maravillosas de dise?adores, muchas de las cuales jam¨¢s podr¨¦ ponerme, lo que es muy frustrante. Y aunque me gustar¨ªa que hicieran tambi¨¦n tallas m¨¢s grandes, entiendo por qu¨¦ los creadores eligen prestar m¨¢s atenci¨®n a las tallas peque?as?, cuenta Hayley. ?No es f¨¢cil encontrar ropa que te guste cuando tienes m¨¢s de una 44?, reconoce Allison Teng, autora y editora de la p¨¢gina www.curvygirlchic.com; ?pero tampoco es imposible?. Casi ninguna compra en tiendas especializadas. Prefieren adaptar prendas de firmas est¨¢ndar a su silueta y, sobre todo, a su estilo. Ya sea comprando piezas oversize y dise?os stretch con bandas el¨¢sticas, o modificando dise?os de trajes sastre, ?a los que puedes a?adir piezas laterales para conseguir una talla m¨¢s?, descubre Franceta. Porque aunque cada vez m¨¢s marcas XL ¨Ccomo Asos Curve o Forever21¨C se est¨¢n modernizando, ?las tendencias llegan a estas tiendas con m¨¢s de dos a?os de retraso respecto a lo que vemos en la pasarela. Una penitencia con la que tenemos que cargar todas las que queremos ir a la ¨²ltima?.

Una cosa est¨¢ clara: no est¨¢n dispuestas a que nadie les diga c¨®mo tienen que vestirse. Poco importa si su visi¨®n de la moda se ajusta o no a los patrones sociales establecidos. ?Las reglas de c¨®mo tienes o no tienes que vestirte si tu talla no se ajusta a la media oficial actual son rid¨ªculas. Colaboro con la p¨¢gina de tendencias Refinery29.com y uno de los art¨ªculos m¨¢s vistos fue, precisamente, uno que escrib¨ª sobre romper las reglas de las tallas grandes. Existen sugerencias desde un punto de vista de estilo, no hay duda, pero jam¨¢s prohibiciones. Una mujer debe elegir siempre por s¨ª misma lo que quiere llevar?, defiende Nicolette Mason.

La red es, sin duda, el mejor aliado para todas ellas. ?En B¨¦lgica el mercado de tallas grandes es sencillamente inexistente; y no creo que eso cambie nunca, por mucho que surjan blogs con voces a favor. La industria tiene una visi¨®n muy cerrada. Y lo que m¨¢s me entristece es que aunque hay firmas como H&M que tienen l¨ªneas para tallas grandes, en las tiendas belgas es casi imposible encontrar esas colecciones?, explica Val¨¦rie. ?Poder comprar online ha ayudado mucho?, admite Franceta. ?Mi armario estar¨ªa vac¨ªo si no fuera por todo lo que compro online?, confirma Allison a S?Moda. ?Pero no es lo mismo que entrar en un probador y ver c¨®mo te queda la ropa ante el espejo?, cree Franceta. ?La moda es una extensi¨®n de uno mismo. Puede cambiar tu estado an¨ªmico?.?

El primer paso es aceptarse plenamente. Una lecci¨®n que estas blogueras, como tantas otras, aprendieron mucho antes de publicar su primer post. Ellas no comparten dietas ni consejos para adelgazar. En su blogs solo cuelgan im¨¢genes en las que posan sin prejuicios, muestran su lado m¨¢s fashionista y, sobre todo, hablan de tendencias. Es moda en directo. De la pasarela a la calle. Sin complejos ni lecciones magistrales de c¨®mo ocultar las curvas o disimular su voluptuosidad. ?Yo no me visto ni para potenciar mi silueta ni para esconderla?, cuenta Ragini (autora del blog curiousfancy.com). ?Prefiero llevar dise?os que llaman mi atenci¨®n que vestirme con prendas aburridas que tapan mis zonas problem¨¢ticas. En mi armario tambi¨¦n hay shorts, minivestidos, camisetas y jers¨¦is cort¨ªsimos? reivindica Ragini.

Son este tipo de im¨¢genes las que invitan a otras chicas que comparten la misma talla a perder el miedo, romper las barreras y divertirse con la moda. ?Antes de crear miblog, para m¨ª, ver a estas blogueras ¨Cvestidas con ropa que yo no me atrev¨ªa a llevar¨C era pura motivaci¨®n?, reconoce Franceta. ?Es la parte m¨¢s gratificante de tener un blog. Saber que puede inspirar a otras personas?. De todas, Gabi es quiz¨¢ la m¨¢s admirada de la fatosfera (como se conoce en el circuito a la comunidad de blogs de estilo de tallas grandes).

En una industria como la de las tallas grandes ¨Cantes considerada un sector nicho¨C y que hoy mueve m¨¢s de 17 millones de d¨®lares, este tipo de blogs no solo ?inspira? a chicas inseguras; tambi¨¦n atrae la atenci¨®n de marcas de moda ¨Cunas populares y otras no tan conocidas¨C, que buscan anunciarse y llegar as¨ª a cada vez m¨¢s gente. No se trata de pagar por post. ?Por ah¨ª no paso. Necesito ser honesta con mis lectoras?, asegura Gabi Gregg. Existe un pacto no escrito de lealtad entre estas blogueras que proh¨ªbe aceptar hacer publicidad encubierta.
El objetivo de Gabi es compartir su codiciada lista de tiendas y firmas que de verdad tienen propuestas de ¨²ltima tendencia para tallas grandes. Un tipo de informaci¨®n que rara vez aparece en las revistas de moda. ?Casi siempre mencionan las mismas marcas?, cuenta Val¨¦rie, de
blogtobealive.com. ?Y los consejos que dan no solo son horribles, sino que seguramente los escribe alguien que no tiene ni idea de lo que significa tener m¨¢s de una 44?. Como ella, casi ninguna se identifica con los reportajes de talles grandes que incluyen las revistas tradicionales. ?Suelen minimizar el concepto talla grande?, apunta Allison, de curvygirlchic.com.
?Y aunque todav¨ªa queda un largo camino por recorrer?, admite, ?incluir este tipo de reportajes de tallas grandes en revistas de moda ya es un paso?. Dicho esto, ?no tengo nada en contra de las modelos delgadas?, explica a S?Moda Hayle Hughes. ?La ropa de la pasarela les queda genial. Soy estilista y trabajo con modelos todo el d¨ªa. Lo que jam¨¢s har¨¦ es trabajar con chicas que tengan problemas alimenticios?, especifica. ?Lo que quiero decir con esto es que no estoy en contra de que las revistas publiquen fotos de modelos delgadas. No se trata de una competici¨®n o una lucha entre gordas y delgadas. Son dos tipos de mujer que pueden convivir en la industria¡­ y tambi¨¦n en las producciones de moda?. Como dice Val¨¦rie, ?a nadie le puede molestar ver sesiones de moda con chicas XL al lado de las producciones habituales?.

Val¨¦rie De blogtobealive.com Vestido de Dorothy Perkins, collar de Primark, chaqueta de M&S Mode.