C¨®mo Matisse se ha convertido en el ¨²ltimo ¡®influencer¡¯ de la moda

La forma de entender la pintura de Henri Matisse (1869-1954) era directa y espont¨¢nea y, siguiendo el camino marcado por Van Gogh o Gauguin, se aventur¨® a abandonar la representaci¨®n de luces y sombras que serv¨ªan para modelar las formas. El uso de colores luminosos e intensos y la simplificaci¨®n decorativa inspiraron el nombre de fauves (fieras) para designar al grupo de pintores en torno a su figura, y fauvismo a su estilo. Pero lo cierto es que, m¨¢s all¨¢ del rechazo a las formas de la naturaleza en favor de contornos esbozados, en sus obras hab¨ªa m¨¢s infantilismo que ferocidad.

El gusto del pintor por el esquematismo y lo sint¨¦tico proced¨ªa, en gran parte, de su admiraci¨®n por el arte primitivo africano y la caligraf¨ªa china. Desde muy joven coleccion¨® esculturas, m¨¢scaras, muebles, telas y objetos dom¨¦sticos que dibuj¨® en busca de otras formas m¨¢s expresivas y puras de interpretar la realidad.

Con su primera colecci¨®n de dibujos y cer¨¢mica, Pure lines, la artista Coco Fern¨¢ndez tambi¨¦n interpreta objetos cotidianos que la rodean en el d¨ªa a d¨ªa. Con ella, nos cuenta, ¡°quiero transmitir esa sensaci¨®n de libertad, de sentirme fluir y disfrutar pintando¡±. Su estilo, seg¨²n sus propias palabras es ¡°sencillo, incluso a veces abstracto¡±, pero no siempre fue as¨ª. ¡°Hace a?os ten¨ªa un estilo mucho m¨¢s figurativo, siempre intentando imitar el objeto real, pero nunca estaba contenta con el resultado, nunca era suficiente y simplemente perd¨ª el inter¨¦s por la pintura¡±. A?os m¨¢s tarde, y gracias a artistas como Matisse, redescubri¨® el sentido de la pintura. La ¨²ltima ¨¦poca del pintor franc¨¦s es la que m¨¢s le atrae: ¡°Sus l¨ªneas simplificadas, y sint¨¦ticas, en las que los detalles se han perdido. Su manera de jugar con los colores y las formas. Me encanta el modo de emocionarse con objetos sin valor aparente, pero que por alg¨²n motivo y en un momento concreto le sorprend¨ªan¡±.

La depuraci¨®n estil¨ªstica de principios del siglo XX que trajeron Picasso, Manet o C¨¦zanne al arte contempor¨¢neo tambi¨¦n encontr¨® eco en la moda, que por aquellos a?os viv¨ªa una revoluci¨®n. Si durante la primera d¨¦cada Paul Poiret liber¨® a la mujer del cors¨¦, en los a?os 20 Gabrielle Chanel y Jean Patou trajeron la funcionalidad a base de siluetas rectas y tejidos adaptados a las exigencias de la vida moderna. Esa simplificaci¨®n y homogeneizaci¨®n del vestido supuso la reducci¨®n de los signos de diferenciaci¨®n social, as¨ª como la democratizaci¨®n de la moda femenina. Una est¨¦tica m¨¢s relajada que, adem¨¢s, trajo consigo nuevos c¨¢nones de belleza femeninos menos unificados que permit¨ªan mayor diversidad de registros.

Del mismo modo, Matisse persegu¨ªa una forma de comprender la figura de la mujer por lo que en su obra el cuerpo femenino desnudo fue un tema recurrente. En los cuadros m¨¢s coloristas o en las composiciones a l¨¢piz, el trazo siempre buscaba la esencia. ¡°Quiero un arte de equilibrio y de pureza, que no inquiete ni turbe¡±, afirmaba. En La Danza (La Danse, 1910), uno de sus cuadros m¨¢s famosos, consigui¨® transmitir esa nueva libertad de movimiento conquistada al pintar a cinco mujeres despojadas de ropa y cogidas de la mano en c¨ªrculo, como en un ritual de magia ancestral. Hoy en la moda y en el arte se sigue buscando formas alternativas de entender la feminidad y a menudo Matisse contin¨²a siendo una fuente de inspiraci¨®n. La directora de arte Carlota Guerrero, por ejemplo, ha sabido traer a la vida con un v¨ªdeo ese baile primordial que represent¨® Matisse hace ya m¨¢s de cien a?os.

Tambi¨¦n su uso libre del color ha cautivado c¨ªclicamente al mundo de la moda. Yves Saint Laurent, Vivienne Westwood, Kenzo, Issey Miyake o Paul Smith han sido algunos de los nombres que han rendido tributo a su obra con colecciones inspiradas en sus obras m¨¢s fauvistas. Ahora, sin embargo, los dise?adores bucean en el Matisse m¨¢s elemental y lo encuentran en los dibujos en blanco y negro. En Uterq¨¹e, por ejemplo, se homenajea con una camiseta de su nueva colecci¨®n a las famosas caras del maestro franc¨¦s. Del mismo modo, Mango con unos pendientes bicolores de dise?o en relieve recuerda los rostros de trazos sencillos.

Desde 2015, Paloma Wool, el proyecto de moda, fotograf¨ªa y otras disciplinas art¨ªsticas de Paloma Lanna, recurrentemente ha vuelto la mirada hacia la obra de Matisse, sobre todo en lo referente a la mujer, eje central de su trabajo. Para ella es dif¨ªcil explicar por qu¨¦ conectamos tanto con su obra actualmente. ¡°Nace de algo muy emocional. El esplendor de la mujer es un tema muy contempor¨¢neo, muy presente en el arte, la moda, y en todas las formas de expresi¨®n actuales¡±, explica.

¡°Siento que este esplendor se manifiesta muy bien a trav¨¦s de c¨®mo Matisse retrata a la mujer. Lo que he visto m¨¢s representado de su obra ¨²ltimamente son sus dibujos, pinturas y recortables femeninos. En muchos de ellos se muestran mujeres desnudas, con cuerpos curvos, transmitiendo serenidad, estar a gusto con ellas mismas, felicidad¡­ Una imagen muy distinta a la que estamos acostumbrados, en la que la mujer desnuda siempre tiene connotaciones sexuales¡±. Seguramente por eso, a pesar del paso de los a?os, su forma de entender la feminidad nos sigue atrayendo tanto. Es el privilegio de los cl¨¢sicos.