Joven creador se enamora de icono pop
Con Olivier Rousteing (28 a?os) Balmain ha encontrado la f¨®rmula perfecta para multiplicar el negocio¡ y la balman¨ªa. Esta primavera-verano 2014, la maison cl¨¢sica protagoniza su ¨¦xito m¨¢s joven, comercial y viral de la mano de Rihanna.
Son pocos los desfiles que despiertan tanta expectaci¨®n como el ¨²ltimo de Balmain. El reloj marca las 13:00 horas del jueves 27 de febrero. Faltan dos horas para que Rousteing presente su colecci¨®n y, a las puertas del Ayuntamiento de Par¨ªs, se reproduce la misma escena que a la entrada del hotel Mandarin Oriental, donde se aloja Rihanna (imagen de la campa?a p-v?2014). Los fans se agolpan para ver y, con suerte, conseguir una foto de su ¨ªdolo. El equipo de S?Moda se abre paso entre ellos para acceder al backstage y preparar el set donde vamos a fotografiar la portada de este n¨²mero. No hay una hora concreta. La fugaz sesi¨®n se adaptar¨¢ a la agenda de la artista, que ¨Cseg¨²n responsables de la agencia KCD¨C ?est¨¢ llegando?. Sin embargo, pasa el tiempo y sigue sin aparecer. ?Est¨¢ en el taxi?, nos advierten. Son las 15:30 horas. Hace ya 30 minutos que el desfile deber¨ªa haber empezado. Prensa y compradores ocupan sus asientos. ??Por qu¨¦ se est¨¢ retrasando tanto??, murmura alguien. Entre bambalinas, todo est¨¢ preparado¡ O casi todo. ?Est¨¢ en medio de un atasco?, anuncian. Pero el espect¨¢culo debe continuar, con o sin ella. Y por fin la modelo Jourdan Dunn abre la pasarela.
Media hora despu¨¦s, el desfile ya ha terminado, los bancos se han vaciado, los invitados han salido del backstage ¨Ctras felicitar a Olivier¨C y las modelos corren camino de su pr¨®ximo compromiso cuando, de repente, Rihanna entra por la puerta, protegida por guardaespaldas y bajo una nube de flashes, c¨¢maras de televisi¨®n y tel¨¦fonos inteligentes. ?Madonna inspir¨® a Gaultier en los a?os 90 y Lulu de la Falaise a Saint Laurent [a finales de los 60]. Mi musa es Rihanna?, nos dice Rousteing en su despacho una semana despu¨¦s.
Rihanna con look total de Balmain.
?lvaro Beamud Cort¨¦s
?C¨®mo surgi¨® la colaboraci¨®n con la cantante??
Coincidiendo con su actuaci¨®n en Par¨ªs, se pas¨® por el estudio, empez¨® a probarse ropa y nos pusimos a charlar. Le dije que su m¨²sica me inspira y que me fascina c¨®mo hace suyas las prendas que lleva. Me pareci¨® una chica incre¨ªble. Hasta tal punto que le dije: ?Me gustas t¨² m¨¢s que Rihanna?. La noche siguiente fui a su concierto y alucin¨¦. No solo por la puesta en escena, sino tambi¨¦n por el p¨²blico. Impresiona ver a un mill¨®n de personas cantando sus temas; ?para un franc¨¦s, cantar en ingl¨¦s no es f¨¢cil! Ella es la nueva Madonna. Seguimos en contacto y, hace tres o cuatro meses, le escrib¨ª: ?He so?ado que sal¨ªas en mi campa?a?. Ella me contest¨® al instante desde Australia: ?Ser¨ªa un honor?.
Adem¨¢s de un ¨¦xito viral, porque ella tiene muchos seguidores en Instagram.?
Cuando sali¨® del estudio,?instragrame¨®?una foto mostrando nuestra?peque?a?historia a nada m¨¢s y nada menos que 11 millones de personas [12.269,463 al cierre de esta edici¨®n]. Es una gran comunicadora. Tanto en el cara cara como a trav¨¦s de las redes sociales. No voy a negar que estoy enganchado a Instagram, pero no entiendo por qu¨¦, cuando eres un dise?ador, la gente te imagina como una especie de criatura extra?a, que se oculta en su castillo y no habla con nadie. No es as¨ª como yo lo veo. Dise?ar hoy implica?networking. Y en eso la industria de la m¨²sica va por delante. Por esa raz¨®n para m¨ª es importante mostrar el otro lado de la moda. Porque detr¨¢s del creador, detr¨¢s de las modelos y detr¨¢s del?bling bling?hay un chico de carne y hueso: tengo 28 a?os.
El 15 de noviembre de 1957, Yves Saint Laurent fue nombrado dise?ador jefe de Dior; ten¨ªa 21 a?os. Usted ten¨ªa 25 cuando, el 28 de abril de 2011, asumi¨® la direcci¨®n creativa de Balmain. ?Le sorprendi¨®?
No lo esperaba. No era famoso y ten¨ªa menos de 40 a?os, algo que, en esta industria, m¨¢s all¨¢ de que fuera franc¨¦s, supon¨ªa un gran cambio. Por muchas razones. Por mi edad, por mi trayectoria e incluso por el color de mi piel. Pero a veces la moda rompe las reglas.
Olivier Rousteing: ?Mi generaci¨®n entiende la moda como un fast-food. Un d¨ªa se lleva una tendencia y, al d¨ªa siguiente, se desecha?.
Camilla Armbrust
Su estudio tampoco es convencional¡?
Muchos empezaron en Balmain de becarios y son muy j¨®venes. Es gente que viene de todo el mundo. Mi mano derecha es de Puerto Rico, mi asistente es de Grecia, otros son de Dinamarca o de Jap¨®n¡ Algo que para m¨ª es importante, porque hoy la moda habla de mezcla y diversidad.
Una idea que se refleja tambi¨¦n en el?casting?de su desfile. Hab¨ªa muchas modelos de color.
?Ocho! No es lo normal (todav¨ªa), pero lo ser¨¢. Dentro de dos, tres, cinco o quiz¨¢ 10 a?os.
De cerca, sus dise?os para Balmain parecen piezas de costura. Joyas tejidas a mano que impresionan por su artesan¨ªa (y por el precio de la etiqueta).
Soy franc¨¦s, y Francia es sin¨®nimo de calidad, lujo y moda atemporal. Detr¨¢s del?bling bling?se aprecia el oficio de manos artesanas que han dedicado hasta tres semanas a la confecci¨®n de un ¨²nico vestido. Son creaciones que rinden tributo al legado de Pierre Balmain y Oscar de la Renta. Pero del mismo modo que sue?o con crear vestidos de 25.000 euros, tambi¨¦n esbozo chaquetas sastre que en la tienda cuestan 1.000 euros. Me gusta que exista ese equilibrio. No quiero hacer un desfile de alta costura. Es?pr¨ºt-¨¤-porter.
La primera decisi¨®n que adopt¨® al tomar las riendas de la?maison?fue prescindir de la ayuda de una estilista para el desfile [su predecesor, Christophe Decarnin, hab¨ªa trabajado siempre con Emmanuelle Alt, hoy directora de?Vogue?Par¨ªs].
Los estilistas unas veces ayudan a construir el concepto de la colecci¨®n y otras alteran la visi¨®n del creador. Era mi primer?show. Si la cr¨ªtica iba a?liquidarme, quer¨ªa que lo hiciera por una decisi¨®n que hab¨ªa tomado yo. Mi generaci¨®n tiene mucho que decir; y quer¨ªa hacerlo a mi manera.
Chaqueta de pata de gallo con incrustaciones de cuero (4.600?€) y falda (1.700?€), ambos de p-v 2014; y cintur¨®n de la precolecci¨®n (1.490?€). Todo de Balmain.
Camilla Armbrust
?Lee todo lo que escriben sobre usted?
?Claro! Y no es f¨¢cil. Porque detr¨¢s de cada colecci¨®n hay un equipo. No son solo vestidos, es un negocio. Tienes que vender. Y cuando lees una mala cr¨ªtica, piensas: ?Ojal¨¢ no afecte a las ventas?. Como dise?ador, creces el d¨ªa que entiendes que tu visi¨®n puede gustar o no, pero que lo importante es sentirte orgulloso.
Espa?a invent¨® el?lowcost. ?Qu¨¦ le parece ver su colecci¨®n reinterpretada por el gran consumo?
Me gusta pasar por un escaparate de Zara o H&M y ver piezas de Balmain, con otras de C¨¦line o Saint Laurent. Mi generaci¨®n entiende la moda como un?fast-food. Un d¨ªa se lleva una tendencia y, al d¨ªa siguiente, se desecha. Todo va muy r¨¢pido.
Antes de entrar en Balmain, trabaj¨® junto a Cavalli. ?Qu¨¦ aprendi¨®??
Que todo es posible. En Italia la moda funciona como un imperio. Quiz¨¢ sea muy comercial, pero si quieres un estampado, en dos horas puedes tenerlo en seda; y si necesitas un bordado, sabes que en 24 horas estar¨¢ en tu mesa. La gente viaja a la India ida y vuelta en un d¨ªa para comprar tejidos. Da igual lo que pidas, puedes conseguirlo¡ y llegar a tiempo.
En Francia la moda tiene otro ritmo, ?no?
Los plazos son cortos y no puedes introducir demasiadas modificaciones. Para llegar a tiempo cuando dise?as cinco colecciones, debes tener muy claro, desde el principio, lo que quieres. Se prioriza la calidad.
Vestido con volantes de tul y strass sobre base de seda (22.000?€), cintur¨®n de encaje y cadenas doradas (1.450?€) y botas (980 €). Todo de la colecci¨®n p-v 2014 de Balmain.
Camilla Armbrust
?Reciben muchas peticiones especiales?
A todas horas. De Hong Kong, Londres, Brasil¡ Hace poco estuve en Asia y pude conocer a algunas de las mujeres que compran vestidos por 25.000 euros.
?Qu¨¦ le sorprendi¨®?
Su estilo de vida. Porque algunos editores me dicen que tengo que proponer colecciones m¨¢s ?reales?. Pero olvidan que existen muchas realidades m¨¢s all¨¢ de vivir en Nueva York y tener que ir a la oficina. Y Balmain toca esas realidades?alternativas. Mujeres que tienen avi¨®n privado y una noche vuelan a otra ciudad para ir a una fiesta.
Hoy Nicolas Ghesqui¨¨re ha debutado en Louis Vuitton. ?Qu¨¦ le ha parecido?
Era mi icono cuando estudiaba; y me alegra que est¨¦ de nuevo en activo. En esta colecci¨®n, ha trabajado mucho los complementos. Me gusta c¨®mo ha jugado con el lenguaje comercial. Porque en este circuito todos sabemos que sali¨® de Balenciaga porque no era ?demasiado comercial?.
Vestido drapeado de seda de la colecci¨®n p-v 2014 resort (6.630 €), cintur¨®n de piel de cordero de la precolecci¨®n (1.490 €) y botas jaula de strass (1.900?€) de p-v 2014 resort. Todo de Balmain.
Camilla Armbrust
Jersey de seda (1.100?€), falda bordada de rejilla de strass sobre base de organza (15.000?€), cintur¨®n (1.450?€) y brazaletes de lat¨®n (620?€). Todo de la colecci¨®n p-v 2014 de Balmain.
Camilla Armbrust
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