La fundadora de Khaite: ?He aprendido que las mujeres siempre compran tres cosas: jers¨¦is, vaqueros y zapatos?

Casi a?o y medio despu¨¦s de que Katie Holmes fuera inmortalizada parando un taxi en Nueva York ataviada con c¨¢rdigan y sujetador de cachemir, aquella imagen viral a¨²n sigue dando que hablar. No solo contribuy¨® a reivindicar a la actriz como icono de estilo, sino que puso en el mapa de la moda global a la firma art¨ªfice del audaz conjunto: Khaite. La etiqueta neoyorquina agot¨® en una hora el bautizado como bradigan (neologismo que une sujetador y chaqueta, en ingl¨¦s) dando el salto a la primera l¨ªnea de las firmas predilectas por las entendidas en moda. Sobre todo, por aquellas nost¨¢lgicas del viejo C¨¦line de Phoebe Philo que andaban hu¨¦rfanas de eso que muchos llaman lujo silencioso.

La propia fundadora, Catherine Holstein, se puede considerar una de ellas. Gui¨¢ndose por su gusto personal y con el objetivo de brindar al resto de mujeres las prendas f¨¢ciles y de calidad que a ella misma le costaba encontrar, fund¨® Khaite en 2016. La antigua palabra griega con la que dio nombre a su firma ¨Cy que, por cierto, suena igual que la abreviatura de su propio nombre, Cate¨C hace referencia a llevar el pelo largo y suelto, un concepto que ella relaciona con ese ¡®vestir sin esfuerzo¡¯ que evocan sus dise?os. ?Soy una gran compradora y me di cuenta de que, aunque la gente dice que la industria est¨¢ saturada, hab¨ªa un hueco para prendas en las que la proporci¨®n y la calidad de los materiales es muy importante?, explica la dise?adora v¨ªa Zoom.

Con la experiencia de haber dirigido una marca hom¨®nima que cerr¨® en 2008 ¨C?la empec¨¦ a los 20 a?os y no hice un buen plan de negocio, solo me importaba la creatividad?¨C y tras haber pasado por gigantes del sector como Gap o firmas como Vera Wang, Holstein decidi¨® centrar el ADN de Khaite en modernizar las categor¨ªas de producto que mejor funcionan: jers¨¦is, vaqueros y zapatos. ?En todos estos a?os trabajando en la industria aprend¨ª que las mujeres, no importa de d¨®nde sean, siempre compran esas tres cosas. Yo las dise?o para las consumidoras de hoy creando un balance entre lo masculino y lo femenino, alejando este ¨²ltimo concepto de las connotaciones cursis que tiene a veces. Todas las mujeres somos fuertes y bajo esa premisa dise?o?, desgrana Catherine Holstein.

Sus bolsos y zapatos, incorporados recientemente al cat¨¢logo, ya son tambi¨¦n parte importante de su ¨¦xito. ?Relanzamos el calzado en junio y ahora mismo supone el 43% de las ventas online. Creo que vamos a ser muy conocidos tambi¨¦n por nuestros accesorios?, vaticina la dise?adora. Tanto es as¨ª que sus botas afiladas de estampado de cebra, por ejemplo, se han convertido este invierno en inspiraci¨®n para las grandes cadenas, al igual que el body de escote coraz¨®n o sus reconocibles conjuntos de punto. ?Ser¨ªa hip¨®crita decir que me molesta que me copien porque yo misma estoy influenciada por todo lo que veo cada d¨ªa?, confiesa. ?Cuando lanzas algo al mundo deja de pertenecerte?.

Aunque esas piezas que la han encumbrado como una de las dise?adoras del momento podr¨ªan catalogarse como b¨¢sicos de lujo, ella reniega del t¨¦rmino. ?Odio esa palabra. ?Qui¨¦n quiere ser b¨¢sico? Khaite crea piezas que forman parte de tu identidad, de qui¨¦n eres. Cuando busco qu¨¦ ponerme por las ma?anas termino recurriendo a los jers¨¦is de Loro Piana que compraron mis hermanas en los noventa o a piezas heredadas de mi madre?. Apelando a esa idea de durabilidad con alergia a las tendencias, la buena acogida radica en gran parte en los materiales. ?Creo que son el 80% del atractivo de una prenda. Por eso nuestras piezas son caras: solo se hace un buen plato con buenos ingredientes y es algo que cada vez valoraremos m¨¢s?. A juzgar por los n¨²meros ¨CKhaite ha crecido un 40% en un a?o complicado¨C, parece que no le falta raz¨®n.