La carta de Rose McGowan sobre la muerte de Anthony Bourdain

¡°Me gusta pensar que Anthony querr¨ªa que tuvi¨¦ramos la conversaci¨®n necesaria sobre depresi¨®n. No es la culpa sobre lo que hay que hablar, eso no es m¨¢s que silenciar nuestro crecimiento colectivo¡±, escrib¨ªa Rose McGowan. La actriz, a petici¨®n de Asia Argento, pareja del fallecido chef televisivo, compa?era de profesi¨®n y aliada en la batalla anti Weinstein, enviaba una carta a varios medios (publicada de manera ¨ªntegra por Hollywood Reporter) haciendo un llamamiento a la necesidad de hablar sobre enfermedades mentales y suicidio. Un mensaje que llega d¨ªas despu¨¦s de conocerse la noticia de que Bourdain, tras a?os luchando contra la depresi¨®n, decid¨ªa poner fin a su vida a los 61 a?os en un hotel de Francia mientras rodaba su programa Parts Unknown. La historia cerraba una semana negra en la que otras celebridades como la hermana de M¨¢xima de Holanda, In¨¦s Zorreguieta, o Kate Spade, la dise?adora que revolucion¨® los accesorios, tambi¨¦n se suicidaban.

Que estas tres desgracias ocurrieran en cuesti¨®n de d¨ªas no es casualidad. Es el reflejo de una realidad creciente que, en nuestro pa¨ªs, se cobra diez vidas a diario, seg¨²n datos del Instituto Nacional de Estad¨ªstica. Una media de 3.600 personas al a?o, el doble de muertes que por accidentes de tr¨¢fico y la principal causa de muerte externa en personas menores de 50 a?os. ¡°Un problema de salud p¨²blica de primer orden y una emergencia sanitaria y social que hay que abordar sin m¨¢s demora¡±, dice Andoni Anse¨¢n, presidente de la Sociedad Espa?ola de Suicidolog¨ªa, a S Moda.

La importancia de conocerlo y hablarlo. En la carta que McGowan firma poniendo ¡°en copia¡± a Argento, la petici¨®n es clara: ¡°Os pedimos ser mejores, mirar con mayor profundidad, leer y aprender sobre enfermedades mentales, suicidio y depresi¨®n antes de que lo hag¨¢is m¨¢s complicado para los supervivientes -as¨ª se conoce a las personas que han perdido un ser querido por suicidio- juzgando lo que no entendemos, lo que nunca podremos entender por completo¡±. Como si de una de las m¨ªticas lecciones vitales del propio Bourdain, aliado expreso del feminismo y del #MeToo en sus ¨²ltimos tiempos, se tratara. Para Anse¨¢n, este tipo de mensaje que la actriz env¨ªa aprovechando su altavoz ¡°es absolutamente necesario. Aumentar la sensibilizaci¨®n y concienciaci¨®n sobre la depresi¨®n y el suicidio como un problema de salud y como un fracaso social es fundamental para poder abordarlo?.

¡°No hag¨¢is esas cosas sexistas de querer prender a una mujer en el fuego de la culpa mal enfocada. La batalla interna de Anthony era suya, pero ahora ella (Asia) se ha quedado en el campo de batalla recogiendo las balas. No es justo ni aceptable culparla a ella o nadie m¨¢s, ni siquiera a Anthony (¡­) Sino al estigma de la soledad, al estigma de pedir ayuda, al estigma de la enfermedad mental, al estigma de ser famoso y herir.¡±, defend¨ªa McGowan.?La culpa, que a menudo recae tanto sobre el suicida como sobre las personas cercanas a ¨¦l, es otro de los grande asuntos a tratar (y eliminar) sobre el suicidio. ¡®?Qu¨¦ hice? ?No fue suficiente? No sab¨ªa c¨®mo ayudar m¨¢s¡­¡¯ son algunos de los pensamientos dolorosos que surgen en los familiares, amigos o parejas. ¡°Se tiende a culpabilizarse. No es lo primero, pero ya pasado el shock, s¨ª es una de las fases m¨¢s significativas y que pueden prolongarse durante a?os tras el suicidio de una persona querida¡±, explica Javier Jim¨¦nez, psic¨®logo cl¨ªnico y presidente de la Red AIPIS, creadores de varias gu¨ªas de ayuda para enfermos y familiares o allegados que quieran ayudar a detectar o prevenir las conductas suicidas.

Cuando se habla de suicidios es habitual ver c¨®mo se genera una especie de ¡®miedo al contagio de la idea¡¯. La expectaci¨®n generada por la serie Por 13 razones (Netflix), en torno al suicidio de la adolescente Hannah Baker, pon¨ªa esta preocupaci¨®n de manifiesto ya con su primera temporada y contin¨²a con el reciente lanzamiento de la segunda. Y tras los fallecimientos de Kate Spade y Anthony Bourdain, el periodista Benedict Carey, de The New York Times, tambi¨¦n recuperaba la idea con su art¨ªculo ?Puede un suicidio llevar a otros?. Para Andoni Anse¨¢n: ¡°Se peca de demasiado alarmismo. No va a haber una epidemia de suicidios simplemente porque veamos una serie de televisi¨®n o leamos una noticia¡±. Lo importante es que la informaci¨®n se transmita de manera responsable. Para ello, la OMS cuenta con sus propias gu¨ªas sobre c¨®mo hacerlo. ¡°Ni la excesiva prudencia que tiene que ver con fomentar el estigma y el miedo a hablarlo, ni hablar de oleada de suicidios, ni dar una explicaci¨®n simplista de las causas tipo ¡®ten¨ªa problemas con su marido¡¯ y asesorarse en primer lugar por un experto¡±, son algunas de esas recomendaciones que apunta el psic¨®logo cl¨ªnico Javier Jim¨¦nez.

¡°Anthony ten¨ªa 61 a?os, la misma edad que mi padre cuando muri¨®¡±, escribe McGowan. ¡°Mi padre tambi¨¦n sufr¨ªa de depresi¨®n profunda intermitente y, como Anthony, era parte de la generaci¨®n ¡®hombre fuerte que no pide ayuda¡¯. S¨¦ que antes de que Anthony muriera busc¨® ayuda, y sin embargo no sigui¨® el consejo m¨¦dico que necesitaba. Y eso nos ha llevado hasta aqu¨ª, a esta tragedia, a esta p¨¦rdida, a este mundo de dolor¡±. Las causas y el camino que llevan a una persona a suicidarse son m¨²ltiples y de compleja acotaci¨®n. A menudo un c¨²mulo de dificultades y situaciones dolorosas que desbordan a la persona y trastornan su visi¨®n de la realidad, llev¨¢ndole a creer que el suicidio es la mejor salida para ellos e incluso para su entorno. McGowan, como ya hiciera James Blake hace unas semanas reivindicando el fin del estigma de hombre triste, apunta a la dificultad masculina de expresar esas emociones o b¨²squeda de ayuda como un posible agravante (las cifras de suicidios son mayores en hombres que en mujeres, aunque ellas cometen mayor n¨²mero de intentos). Seg¨²n Anse¨¢n, ¡°se apuntan causas biol¨®gicas (hormonales, por ejemplo), tambi¨¦n a esa menor tendencia de los hombres a hablar de sus problemas y a pedir ayuda, a cuestiones culturales y de presi¨®n social, pero en realidad no hay motivos ¨²nicos que lo puedan explicar¡±.

Tanto para ¨¦l como para Javier Jim¨¦nez, el conocimiento y la prevenci¨®n de las conductas suicidas es la clave para aproximarse a una disminuci¨®n del problema. ¡°En Espa?a no hay ning¨²n programa de prevenci¨®n de suicidios a nivel nacional, una consecuencia de ser un tema del que no se habla¡±, apunta Jim¨¦nez, que lo compara con las s¨ª existentes campa?as de concienciaci¨®n de conducci¨®n responsable. ¡°Hablemos¡±, la misma propuesta que Rose McGowan pone sobre la mesa es el lema que, en 2017, la OMS utilizaba en el D¨ªa Mundial de la Salud y que Andoni Anse¨¢n acata: ?Es fundamental hablar de ello, lo prioritario y m¨¢s eficaz a la hora de abordar este problema es verbalizarlo. Si no hablamos de ¨¦l es como si no existiera y no podemos afrontar un problema que no consideramos que exista?, concluye.