Nancy Pelosi saca de nuevo su ¡®traje de impeachment¡¯: historia de un uniforme para destituir a Trump
La presidenta de la C¨¢mara de Representantes de EE UU repite el vestido y collar que se puso en el primer juicio a Donald Trump y vuelve a certificar el uso simb¨®lico y pol¨ªtico que otorga a su vestuario.
Al abrigo de Max Mara de la batalla dial¨¦ctica ahora se suma el traje para destituir presidentes. Nancy Pelosi conoce bien el poder no verbal del uniforme pol¨ªtico. El 18 de diciembre de 2019, la dem¨®crata y presidenta de la C¨¢mara de Representantes de EEUU entr¨® al edificio con un traje negro de cuello alto y con un collar de oro en relieve. No era un d¨ªa cualquiera. Era el d¨ªa del juicio pol¨ªtico del presidente Donald Trump. En aquel momento, el magnate estaba empa?ado por el esc¨¢ndalo de Ucrania: fue acusado de abuso de poder y un cargo de obstrucci¨®n del Congreso, relacionados con los esfuerzos del presidente para persuadir al pa¨ªs europeo de que investigara a Joe Biden. As¨ª se vest¨ªa Pelosi, tercera autoridad de la naci¨®n
En otro d¨ªa hist¨®rico en EE UU, y no son pocos en lo que llevamos de a?o; la C¨¢mara de Representantes vot¨® este mi¨¦rcoles a favor de?juzgar al presidente republicano por ¡°incitaci¨®n la insurrecci¨®n¡±?tras el violento asalto al Capitolio, hace una semana, por parte de?unos ultras arengados por ¨¦l mismo. A solo una semana de dejar la Casa Blanca, Trump convierte en el primer mandatario sometido dos veces al?impeachment, y Pelosi, de nuevo, recuper¨® su traje de las destituciones ¨Cla primera vez que se lo puso nadie imaginaba que se convertir¨ªa en uniforme¨C para simbolizar todav¨ªa m¨¢s esta fecha clave en ¨²ltimos d¨ªas de Donald Trump como presidente de los EEUU. El traje negro con collar volvi¨® a hacer acto de presencia.
No es la primera vez que la emblem¨¢tica dem¨®crata demuestra su oposici¨®n contra Trump a trav¨¦s de su ropa. En septiembre de 2018 se puso un abrigo de Max Mara que se volvi¨® viral tras?protagonizar una?tens¨ªsima reuni¨®n con Trump?que se escenific¨® ante las c¨¢maras para asombro de los periodistas y que incluy¨® amenazas del cierre de la administraci¨®n.?Tras el rifirrafe televisado,?la pol¨ªtica sali¨® de la Casa Blanca abrigada con una prenda de Max Mara y se puso unas gafas de sol con una media sonrisa, lo que provoc¨® un delirio internauta ante la estampa mem¨¦tica a lo #ThugLife.?Ese abrigo tambi¨¦n ten¨ªa un simbolismo escondido: fue el mismo que visti¨® en la segunda toma de posesi¨®n de Barack Obama en 2013.?La elecci¨®n esta vez serv¨ªa para recordar a Trump su longevidad en los asientos del poder y una pista de d¨®nde se encuentra realmente su lealtad?,?escribi¨® al respecto la cronista de moda de The New York Times, Vanessa Friedman.
And she knew exactly what she was doing wearing THIS coat on THIS day coming out of THAT room, placing THOSE shades on JUST so. This is diplomacy in motion, soft power wielded like a machete through the diligent, decisive act of dressing.
— Barry Jenkins (@BarryJenkins) December 12, 2018
They¡¯ve never been JUST clothes ?? pic.twitter.com/3QbOU8TB1k
Al igual que Pelosi, la desaparecida juez del Tribuanal Supremo Ruth Bader Ginsburg tambi¨¦n usaba c¨®digos para mostrar su ideolog¨ªa con la ropa. La jueza recurr¨ªa a sus cuellos ¨Cde encaje, de pasamaner¨ªa, de cuentas¡ todos perfectamente ordenados en un armario, colgados en perchas junto a sus togas, o conservados en cajas para que no se estropearan¨C para dotarlos de s¨ªmbolo pol¨ªtico y vislumbrar sus opiniones. Ten¨ªa uno para anunciar las sentencias mayoritarias. Otro, negro con piedras plateadas, serv¨ªa ?para manifestar las opiniones discrepantes?.?Ese mismo ¡®cuello de las discrepancias¡¯, fue el que se puso un d¨ªa despu¨¦s de la elecci¨®n de Donald Trump como presidente de los Estados Unidos.?La pieza se hizo tan popular que incluso hay p¨¢ginas?web?que venden r¨¦plicas. Qui¨¦n sabe si tambi¨¦n pasar¨¢ con el traje (y collar) de las destituciones de Nancy Pelosi.
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