Mar¨ªa Hesse: ¡°S¨¦ lo que es agotarse f¨ªsica y mentalmente de tanto trabajar; te anula¡±
La ilustradora invita a abrazar y a comprender la desaz¨®n a trav¨¦s de su ¨²ltimo libro, ¡®El miedo¡¯, una obra que exorciza las heridas a trav¨¦s de un vocabulario pl¨¢stico y un l¨¦xico honesto y vibrante
El miedo (Lumen) es quiz¨¢ el proyecto m¨¢s personal de Mar¨ªa Hesse (Huelva, 42 a?os), un libro de autoficci¨®n que a¨²na ilustraciones y textos sobre la angustia y con el que no cuesta identificarse: el trauma infantil del bullying, la consecuente baja autoestima, las relaciones t¨®xicas, la soledad, las dudas ante la maternidad¡ Una obra de redenci¨®n que exorciza las heridas a trav¨¦s de una prosa sincera y sin artificios y unos dibujos de alto colorido y sensualidad. Un emotivo trabajo crom¨¢tico y sem¨¢ntico que contagia de esperanza. ¡°Empec¨¦ a darle forma en 2020: necesitaba ilustrar mis miedos, convertir en pintura sensaciones como un nudo en el est¨®mago o la falta de aire. De las ilustraciones est¨¢ticas, fue surgiendo una secuencia tipo c¨®mic, y de ah¨ª, fueron brotando las palabras. He necesitado un largo proceso para decidir qu¨¦ quer¨ªa contar y c¨®mo. Entremedias, lanc¨¦ Marilyn y Malas mujeres¡±, cuenta Hesse. El placer tambi¨¦n surg¨ªa de su experiencia personal. ¡°Pero quedaba diluida en la investigaci¨®n hist¨®rica, y en las referencias culturales. No he ideado El miedo como un libro reivindicativo, aunque se pueda defender que defiende la importancia de la salud mental¡±.
Aunque dibuja desde los seis a?os, Hesse no estudi¨® Bellas Artes, sino Magisterio: en medio de unas oposiciones, decidi¨® abandonar la carrera docente para cursar un ciclo de grado superior de ilustraci¨®n. Autora de varias biograf¨ªas gr¨¢ficas (Frida Kahlo, David Bowie, Marilyn Monroe), de la renovaci¨®n de cl¨¢sicos a trav¨¦s del dibujo como Mujercitas (de Louisa May Alcott) y Orgullo y prejuicio (de Jane Austen), y de libros ilustrados que reflexionan sobre arquetipos como el de la femme fatale (Malas mujeres), Hesse ha desarrollado un estilo reconocible por los tonos vibrantes y el trazo curvil¨ªneo y acuoso. Un efecto al que contribuye no solo su t¨¦cnica ¡ªbasada en el gouache y la tinta china¡ª, sino tambi¨¦n un vocabulario pl¨¢stico altamente sensitivo y feminista.
Algunas experiencias, razona la autora, son tan traum¨¢ticas que las confinamos en una guarida para que no campen a sus anchas por nuestra memoria. ¡°Cuando los miedos se escapan, hablo mucho con mi pareja [Boris, con quien lleva seis a?os y a quien dedica el libro] y con mis amigas, un refugio. Si no soy capaz de controlarlos, recurro a la psic¨®loga. Cualquier preocupaci¨®n se refleja en el cuerpo. He aprendido t¨¦cnicas de relajaci¨®n para parar el flujo del pensamiento. Pero confieso que ahora no las practico mucho¡±. A la falta de tiempo, ha contribuido la maternidad. Hesse es madre de un beb¨¦ de un a?o. ¡°He aprendido a decir que no, a que no pasa nada por rechazar proyectos. No quiero renunciar a la crianza. Durante el embarazo, not¨¦ que mi cabeza funcionaba lentamente. No pod¨ªa abarcar tanto trabajo y en el posparto he preferido dedicarme a mi beb¨¦¡±.
La protagonista de El miedo sucumbe a varias metamorfosis, al principio es la chica-pel¨ªcano, en referencia al poema de Adrienne Rich, incluido, junto a otras poes¨ªas, en la obra. aunque no son los ¨²nicos versos en los que se ha refugiado: Anne Sexton, Alejandra Pizarnik, Raymond Carver, Piedad Bonnet y Lara Moreno tambi¨¦n est¨¢n presentes. Ense?anzas sobre la desaz¨®n que conviven con las sugerentes letras de canciones de Tulsa y de Lorena ?lvarez, y con citas de Marie Curie, quien nos recuerda que ¡°no hay que temer nada en la vida, solo comprenderlo¡±, y que ¡°es el momento de comprender m¨¢s, para temer menos¡±.
En medio de una relaci¨®n t¨®xica, a la protagonista le falta el aire, el coraz¨®n y las pulsaciones se le aceleran y la habitaci¨®n le da vueltas¡ En urgencias, la tranquilizan; ¡°Es un simple ataque de ansiedad¡±, le dicen, y el m¨¦dico de cabecera le receta tranquilizantes. ¡°Mucha gente sufre depresi¨®n y ansiedad. Vivimos en una sociedad que nos genera la necesidad de hacer un mill¨®n de cosas, de encontrar un oficio que nos apasione. Una sociedad que mercantiliza nuestras aspiraciones y nuestro estilo de vida¡±, argumenta en alusi¨®n a la cultura del esfuerzo, el capitalismo hiperconsumista y a la sociedad del cansancio de Byung-Chul Han. ¡°Todo esto genera frustraci¨®n. S¨¦ lo que es agotarse f¨ªsica y mentalmente de tanto trabajar; te anula¡±. Hesse sigue escribiendo y pintando sobre la maternidad, un tema presente en El miedo: ¡°Mis amigas madres solteras son muy valientes. Aunque, mucho mejor ser madre monoparental que con una pareja disfuncional¡±.
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