Arantza Quiroga: ?En un acto p¨²blico lo que llevas siempre es objeto de comentario?
No prescinde de la feminidad ni de los accesorios para imponerse como presidenta del Parlamento vasco. Interesada por la moda, no se permite ning¨²n descuido.
Arantza Quiroga es la primera mujer del Partido Popular que preside el Parlamento vasco. Dice que usa tacones porque se mueve siempre entre hombres altos, que los domingos solo viste vaqueros y que echa de menos comprar vestidos de ni?a ?porque mis hijos son todos chicos?.
Si usted no se dedicase a la pol¨ªtica, ?qu¨¦ sobrar¨ªa en su armario?
Pues alguna americana, porque tengo muchas. La chaqueta es una de las piezas fundamentales del uniforme de la profesional de la pol¨ªtica, qu¨¦ le vamos a hacer.
?Tiene alguna que le guste m¨¢s que las otras?
Un blazer azul marino. Es uno de los que m¨¢s utilizo porque es muy f¨¢cil de combinar y me lo puedo poner con todo.
?Se observa con m¨¢s atenci¨®n la indumentaria de una mujer que se dedica a la pol¨ªtica que la de sus compa?eros?
Por supuesto. Cuando haces una comparecencia p¨²blica tanto lo que llevas como lo que no es siempre objeto de comentario. Un hombre puede sorprender con una corbata rar¨ªsima, pero nadie est¨¢ una semana hablando de ella. Sin embargo, lo que se pone una mujer sirve para acaparar titulares durante varios d¨ªas.
?Es m¨¢s dif¨ªcil ir de compras cuando se lleva escolta?
Es que voy poqu¨ªsimo. Tengo un par de tiendas que me gustan, y all¨ª me lo compro todo. Adem¨¢s, como me quede bien algo, soy de las que se lo lleva en tres colores.
Veo que suele usar tacones¡
S¨ª, y no es que me entusiasmen. Pero cuando estaba de campa?a para las auton¨®micas me acostumbr¨¦ a usarlos porque los otros candidatos eran alt¨ªsimos y me ten¨ªa que subir a algo.
?Y ahora ya ha conseguido que le gusten?
La verdad es que los tacones favorecen mucho. Al principio lastiman un poco, pero merece la pena. Adem¨¢s, soy tan cabezota y persistente que acabo amoldando todos los zapatos a mis pies.
Parece una met¨¢fora de la pol¨ªtica.
Digamos que soy capaz de aguantar las ampollas dos o tres d¨ªas porque al final siempre s¨¦ que hasta el zapato m¨¢s duro se ablanda y se adapta.
?Un capricho que se haya concedido ¨²ltimamente?
En realidad fue mi hermana quien me lo concedi¨®: hab¨ªa una cazadora que me gustaba mucho y me la compr¨®. Y acert¨® completamente; me encanta.
?Regala ropa?
A mis sobrinas peque?as. Mis cuatro hijos son chicos, y siempre se me iban los ojos detr¨¢s de la ropa de ni?as. Ahora por fin me doy el gustazo de poder comprar vestiditos.
?Se maneja con la aguja?
Me defiendo. De hecho, me costumizo mucha de mi ropa. No es que haga maravillas, pero arreglar un bajo o estrechar una cintura creo que se me da bastante bien.
?Hay alguna prenda que repita mucho?
Pues unas cuantas pashminas antiguas que llevan a?os en mi armario y que me sigo poniendo.
Una pieza que le traiga buenos recuerdos¡
El vestido de color verde que me puse el d¨ªa que tom¨® posesi¨®n el lehendakari y que luego repet¨ª cuando el Rey recibi¨® a la mesa del Parlamento. Lo llev¨¦ con unos peep toe de color morado. Pienso conservar siempre ese vestido y esos zapatos.
?Qu¨¦ se pone el fin de semana?
Vaqueros, camisa, jersey y unos zapatos de cordones. Los tacones son solo para actos de servicio.
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