Gracia Querejeta: ?Tengo complejo de bajita y me lo curo a golpe de tac¨®n?
Recuerda con pasi¨®n un Valentino que le prestaron para un estreno y conserva el vestido que se puso para su primera pel¨ªcula como directora. Pero lo suyo son la americanas.
Est¨¢ preparando el rodaje de su nueva pel¨ªcula, 15 a?os y un d¨ªa, y a punto de estrenar el corto Fracaso escolar en el Festival de M¨¢laga. Gracia Querejeta reconoce que, como casi todos los directores, pide voz y voto a la hora de seleccionar el vestuario que aparece en sus cintas. Y eso la conduce a eternas discusiones con su madre, la figurinista Maiki Mart¨ªn, que es quien se encarga del vestuario en sus producciones. Se confiesa caprichosa con la ropa y dice que ir de compras ?es como una terapia?.
?C¨®mo viste cuando est¨¢ rodando?
Con ropa c¨®moda, claro. En verano, pantal¨®n y camiseta. En invierno, el disfraz de casta?era.
Eso suena bien. ?En qu¨¦ consiste?
Pues en ponerse un forro polar encima de otro y acabar con un plumas. Se pasa mucho fr¨ªo en los rodajes. Pero el primer mandamiento es llevar un buen calzado. Spielberg dice que lo m¨¢s importante cuando est¨¢s rodando es escuchar a los dem¨¢s y llevar zapatos c¨®modos. Yo suelo usar zapatillas de deporte, pero no me gusta ir de plano.
?Nunca?
No. Mi tac¨®n medio son 10 cent¨ªmetros. Creo que tengo un poco de complejo de bajita y me lo curo as¨ª. ?Me encantan los zapatos!
?Cu¨¢ntos pares posee?
No me atrevo a contarlos. A mi hijo lo tengo asustado. No entiende que pueda haber tanto zapato en mi armario.
?Sus favoritos?
Voy cambiando. Ahora estoy entregada a unos color crema, de tac¨®n muy fino que me regal¨® Maribel Verd¨².
?Hay alguna prenda en su armario a la que tenga especial cari?o?
Una chaqueta de Armani preciosa, regalo de mi padre. Es de lentejuelas negras y grandes, con una ca¨ªda muy bonita, sin botones. La he usado much¨ªsimo. Ahora me la pongo menos porque creo que ya me la ha visto todo el mundo.
?Y algo que sabe que no tirar¨¢ nunca?
El vestido que me puse en el estreno de mi primera pel¨ªcula, Una estaci¨®n de paso. Lo compr¨¦ en una tienda de la calle Almirante, en Madrid. Es de corte midi, con una abertura lateral, muy ce?ido. Tanto que ahora que ha pasado alg¨²n tiempo me queda demasiado justo. Pero recuerdo perfectamente la ilusi¨®n con la que lo compr¨¦.
Recuerde una prenda que la haya hecho sentir maravillosa.
Cuando estrenamos en San Sebasti¨¢n Siete mesas de billar franc¨¦s me prestaron un vestido de Valentino que era una delicia. Era corto, de color claro, con lentejuelas. No creo que vuelva a ponerme nada tan bonito.
?Con qu¨¦ look se encuentra m¨¢s favorecida?
Con unos pantalones y una americana. En una ocasi¨®n, un sastre de Cornejo me hizo varias a medida, en distintos colores, todos neutros. Esas chaquetas son atemporales.
Nunca la veremos con¡ Un pantal¨®n rojo.
El rojo no me gusta para vestir, pero en pantal¨®n ya ni de broma.
?Le divierte ir de compras?
Me encanta comprar. A veces de forma un poco compulsiva.
?Tiene alg¨²n capricho pendiente?
Un Rolex de acero, de los de hombre. Supongo que alg¨²n d¨ªa me lo comprar¨¦. Y si no, pues tampoco pasa nada.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.