Jeffrey Eugenides: ?Trato de escribir sobre una mujer, no sobre todas?
Hizo esperar a sus lectores una d¨¦cada tras Middlesex, la saga sobre un hermafrodita que le vali¨® el premio Pulitzer. Ahora viaja a los 80 con una intensa y dolorosa tesis sobre el amor.
Middlesex figur¨® en todas las listas de ?los mejores libros de la d¨¦cada? pasada. Ahora se publica por fin La trama nupcial (Anagrama), en la que el escritor estadounidense de origen griego vuelve a sus a?os universitarios con un tri¨¢ngulo amoroso que transcurre en un campus de los a?os 80. El libro est¨¢ a punto de llevarse al cine, como su primera novela, Las v¨ªrgenes suicidas.
Se ha tomado su tiempo. Pas¨¦ a?os escribiendo otra novela y aquello no funcionaba, pero descubr¨ª que tres de los personajes eran salvables: Leonard, Madeleine y Mitchell. Los saqu¨¦ de ah¨ª y les hice su propio libro. Al principio fue un proceso horrible; pero viv¨ª como una salvaci¨®n que de esas ruinas emergiera otra historia.
El escritor Ian McEwan destac¨® que uno de los mejores aspectos de La trama nupcial es la sutil descripci¨®n que hace usted del sistema de clases americano. Muchos estadounidenses todav¨ªa act¨²an como si all¨ª no existiesen las diferencias de clase.
En la mayor¨ªa de pa¨ªses hay estratos sociales: tambi¨¦n en Estados Unidos. En mi vida he pasado por varios de esos estratos. Mis padres son de Detroit y crecieron con muy poco dinero. La familia de mi madre, de hecho, era extremadamente pobre. Pero mi padre trabaj¨® muy duro y escalamos socialmente.
Entonces usted entr¨® en una escuela muy elitista. Siendo griego, ?se sent¨ªa diferente a aquellos ni?os WASP [blancos, anglosajones y protestantes]? Era una combinaci¨®n de verg¨¹enza y orgullo. A la mayor¨ªa de los ni?os outsiders como yo les iba muy bien acad¨¦micamente. Nos sent¨ªamos superiores respecto a los ni?os ricos, pero tambi¨¦n inferiores en cuanto a la clase social. Ellos eran m¨¢s sofisticados, sab¨ªan c¨®mo actuar, c¨®mo vestirse¡
Su protagonista, Madeleine, es como uno de esos ni?os¡
Crec¨ª rodeado de chicas as¨ª, imbuido de ese ideal de la chica WASP.
Ella es guapa y brillante. Una de esas mujeres que tienen todas las opciones del mundo y, sin embargo, toman decisiones catastr¨®ficas.
?Todos el mundo comete errores en el amor!
?Por qu¨¦ quiso situar la novela en los 80?
Porque es cuando la teor¨ªa francesa y el deconstructivismo, que estudia Madeleine, llegaron a Estados Unidos, y tambi¨¦n porque es cuando yo fui a la universidad. Pero no me lo plante¨¦ como si escribiese una novela hist¨®rica o algo as¨ª. Solo cambian las formas de comunicaci¨®n. Los personajes se llaman y se escriben cartas en lugar de enviarse correos electr¨®nicos, pero todo podr¨ªa suceder ahora.
Cuando se public¨® su libro en Estados Unidos se insisti¨® mucho en que el personaje de Leonard, que sufre una enfermedad mental, estaba basado en un joven David Foster Wallace. Aunque usted lo neg¨®, el rumor persiste.
Yo no ten¨ªa en mente a David Foster Wallace cuando lo escrib¨ª. No entiendo por qu¨¦ a la gente le resulta m¨¢s excitante pensar que un libro es autobiogr¨¢fico o que est¨¢ basado en personas reales. Foster Wallace acababa de morir cuando sali¨® el libro y su figura estaba muy presente. Quiz¨¢ si hubiera estado vivo, no se habr¨ªa hablado tanto sobre ello.
?Y todo por la bandana! Tanto Wallace como su personaje llevan ese pa?uelo en el pelo.
Bueno, la primera vez que vi a Jonathan Franzen tambi¨¦n llevaba bandana, igual Leonard es ¨¦l. Y yo tambi¨¦n me la pongo a veces en el gimnasio. Quiz¨¢ soy yo¡
Por cierto, en Times Square colgaron un inmenso retrato suyo para publicitar esta novela. ?C¨®mo fue verse en dimensiones gigantes entre los luminosos?
Result¨® un poco embarazoso, pero a la vez absurdo y divertido. Compart¨ªa espacio con El Rey Le¨®n, y parece ser que funcion¨®. Todo el mundo supo que el libro se hab¨ªa publicado.
Aquel cartel tambi¨¦n gener¨® un curioso debate. Algunas novelistas se quejaron de que las mujeres no reciben tanto apoyo medi¨¢tico.
No le prest¨¦ ninguna atenci¨®n. Intento escribir el libro, ir al tour promocional, hablar con gente que lo ha le¨ªdo y mantener el resto de cuestiones fuera de mi mente.
?Pero cree que el mundo literario es particularmente sexista?
No voy a entrar en ese debate. Otra gente lo ha intentado antes.
La trama nupcial se va a llevar al cine. ?C¨®mo va ese proceso?
Estoy escribiendo el guion con Greg Mottola [el director de Adventureland y Supersalidos]. Es la primera vez que me adapto a m¨ª mismo y es dif¨ªcil, porque requiere aprender muy r¨¢pido algo que no sab¨ªa hacer; pero esperemos que salga bien.
Su anterior experiencia con el cine fue con Las v¨ªrgenes suicidas.
Fue sorprendente. Sofia [Coppola] es una directora muy talentosa. Me gustan todas sus pel¨ªculas.
?Cu¨¢l es su relaci¨®n con ese libro??Lo escribi¨® cuando era mucho m¨¢s joven y se puede decir que lo hizo famoso.
Los primeros libros son como tu primer hijo. Sientes un gran afecto por ¨¦l y tu relaci¨®n siempre es un poquito distinta. Le tengo mucha afecto.
Cuando usted no era mucho mayor que los personajes de su novela se fue a San Francisco y pas¨® varios a?os intentando escribir, pero sin llegar a publicar. ?Se visualizaba como un escritor de ¨¦xito?
Ser escritor era lo ¨²nico en lo que pensaba. Ten¨ªa sue?os, pero no me preocupaba publicar. Todav¨ªa era bastante joven.
Entonces, ?no se imaginaba ganando el Pulitzer? Eso altera para siempre la percepci¨®n que se tiene de un autor. Uno se convierte en ?el ganador del Pulitzer, Jeffrey Eugenides?.
Para un estadounidense es el mejor premio que se puede ganar. Y creo que el libro lo necesitaba porque mucha gente puede pensar: ?No quiero leer sobre una persona intersexo?. Y un reconocimiento as¨ª le dice a la gente que no pasa nada por leer esta historia y que quiz¨¢ les interesa hacerlo. Que no es peligroso ni raro.
?C¨®mo lleg¨® a esta fascinaci¨®n por los intersexo, los hermafroditas?
A trav¨¦s de la literatura. De la mitolog¨ªa griega, para empezar. Siempre me pareci¨® algo tan extra?o e intrigante¡ Como novelista, intentas no estar constre?ido por cosas como el g¨¦nero, as¨ª que tener un personaje que ha estado en ambos lados, que sabe lo que es ser mujer y hombre, es casi perfecto para un novelista. Adem¨¢s, crec¨ª en los 70 y entonces hab¨ªa mucha discusi¨®n sobre si el sexo es algo solo biol¨®gico o est¨¢ culturalmente determinado. Solo hay que pensar en la androginia y en el glam rock de aquella ¨¦poca.
No tiene dificultad adoptando la voz de mujeres cuando escribe.
Bueno, es un reto meterse en la cabeza de cualquier personaje y no es f¨¢cil para un hombre escribir desde el punto de vista de una chica. No lo hago sin preocuparme, pero lo importante es recordar que escribes sobre una mujer, no sobre todas. Y tratar de no generalizar nunca.
?En qu¨¦ trabaja ahora?
Escribo historias cortas. Mi pr¨®ximo libro ser¨¢ de relatos, algunos nuevos y otros que se han ido publicando.
As¨ª que no tendremos que esperar 10 a?os hasta su pr¨®xima publicaci¨®n.
Bueno, ?la verdad es que conmigo nunca se sabe!
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