Larga vida a las divas de la carretera
A pocos d¨ªas del estreno en Madrid del musical Priscilla, reina del desierto, Tim Chappel, el dise?ador de su vestuario, nos descubre los secretos que han hecho de esta obra un icono.
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?ste no es un espect¨¢culo cualquiera. Entre podios de espejo, boas de pluma, patitos de goma amarilla y metros de peluche, S Moda es el primer medio en adentrarse en un universo que marc¨® una ¨¦poca, los a?os 90. Y si hubo una cinta de culto, ¨¦sta fue Las aventuras de Priscilla, reina del desierto (Stephan Elliott, 1994). ?Cuando nos pusimos a hacer la pel¨ªcula, ten¨ªamos grandes ideas, pero un presupuesto min¨²sculo. Trabajamos much¨ªsimo para sacar partido a materiales baratos como ambientadores, cinta adhesiva y alambre de gallinero?, recuerda Tim Chappel, uno de los dos directores de vestuario. Por aquellos modelos recibi¨® un Oscar en 1995 junto a Lizzy Gardiner. ?Me inspir¨¦ en las mezclas de Vivienne Westwood, en los looks extremos del artista Leigh Bowery (fallecido en 1994) y en Balenciaga?.
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Juanjo Dex ajusta el maillot de gumbie a V¨ªctor Gonz¨¢lez. ?Con el que tengo que cantar, saltar y bailar?, dice el actor.
Mirta Rojo
La espina por no tener dinero para poder llevar a cabo un mayor despliegue de brillos se la quit¨® en 2006 cuando la cinta se transform¨® en musical y volvieron a contar con ellos para vestirla. ?Recreamos las mismas ideas, pero esta vez pudimos permitirnos el lujo de trabajar con un presupuesto de un mill¨®n de euros?.
Por este proyecto, compuesto por 550 trajes y 150 pares de zapatos, tambi¨¦n ganaron un Tony, un Bafta y un Laurence Olivier. ?Algunos modelos son aut¨¦nticas obras de ingenier¨ªa, como los disfraces de cupcakes, tan grandes que se pueden plegar sobre s¨ª mismos. O los enormes tocados del n¨²mero I Will Survive, hechos con materiales de cirug¨ªa muy ligeros para que no partan el cuello con el peso?, a?ade.
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Las 30.000 bombillas LED de la carrocer¨ªa de Priscilla recrean figuras, como la bandera gay.
Mirta Rojo
Todas estas prendas que tenemos delante se ver¨¢n en escena el pr¨®ximo 2 de octubre, cuando se estrene el musical en el Nuevo Alcal¨¢ de Madrid. ?Me he probado todos los modelos para saber c¨®mo funcionan en el escenario?, dice con una amplia sonrisa Juanjo Dex, el jefe de vestuario. ?Incluidos los trajes de las tres divas ¨Clas narradoras de la historia¨C que incluyen arneses valorados en 3.000 euros que las sujetan y les permiten cantar. Con ellos, sobrevuelan el escenario el 80% del espect¨¢culo?. El equipo que permite usar este sistema est¨¢ valorado en 150.000 euros.
En la funci¨®n se realizan 220 cambios de vestuario y maquillaje. ?En una obra as¨ª no queda m¨¢s remedio que ense?ar al reparto a que se caracterice solo?, afirma Laura Rodr¨ªguez Domingo, jefa de maquillaje. ?Para agilizar estas transformaciones, hemos creado 150 m¨¢scaras a medida de cada uno de los actores, en las que trabajamos m¨¢s de un mes. Al estar pintadas, permiten al elenco renovar su aspecto en un m¨¢ximo de 15 segundos?, comenta mientras convierte a V¨ªctor Gonz¨¢lez en una drag.
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Mirta Rojo
?Esta obra muestra la humanidad de tres personas, pero adem¨¢s tiene una puesta en escena incre¨ªble: voces en directo, m¨²sicos que tocan 16 instrumentos y n¨²meros de baile que hacen que salgas con un subid¨®n de energ¨ªa?, asegura Gonz¨¢lez. El actor, cantante y bailar¨ªn ya se ha aprendido las coreograf¨ªas de himnos de la comunidad gay como Go West, de los Pet Shop Boys; Like a Virgin, de Madonna; o It¡¯s Raining Men, de The Weather Girls.
Chappel confirma que el montaje no es solo un espect¨¢culo. ?Se trata de una defensa de la individualidad. Hace poco recib¨ª un mensaje a trav¨¦s de YouTube de un joven homosexual de Europa del Este que me dijo que el musical le ha demostrado que pod¨ªa ser libre y feliz. Eso hace que me d¨¦ cuenta del gran regalo que fue hacer este viaje, de lo maravilloso que es, no solo para m¨ª, sino para el mundo?.
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Laura Rod¨ªguez dedica dos horas a ense?ar a Gonz¨¢lez a transformarse en drag.
Mirta Rojo
Exigencias de una diva. Priscilla, el autob¨²s, es la otra estrella del montaje. ?Para que pudiera entrar en el teatro, tuvimos que partir la fachada, quitar las puertas de la entrada y las del patio de butacas, adem¨¢s de las molduras del techo, porque rozaba con ellas?, recuerda Juanjo Rivero, productor y gestor del Nuevo Alcal¨¢. ?Tambi¨¦n limamos las columnas hasta dejar visible la estructura del edificio, y el escenario ha necesitado un refuerzo?, dicen los t¨¦cnicos. Ella es una diva sobredimensionada y est¨¢ orgullosa de ello. L¨®gico, si eres el bus protagonista del musical.
Al llegar, la impresi¨®n es de que act¨²a para nosotros. Rueda por el escenario presumiendo de una carrocer¨ªa que deslumbra gracias a las 30.000 bombillas LED que la cubren. Su atractivo es innegable. ?Es la pieza escenogr¨¢fica con m¨¢s tecnolog¨ªa del mundo. Est¨¢ valorada en 2,3 millones de euros?, nos cuenta Rivero. ?Tiene 25 motores para mover sus casi 10 toneladas de peso. Adem¨¢s de plataformas, elevadores¡ y todo esto sin un solo cable, ya que funciona con bater¨ªas independientes que podr¨ªan hacer mover 200 coches?, explica. ?Para mayor seguridad, tuvimos que comprar una patente militar para que ning¨²n hacker o radiofrecuencia pueda intervenir en su manejo y perjudicar al elenco?.
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Casi magia Arriba, m¨¢scara a medida de cada miembro del elenco, que utilizan para cambiar de maquillaje en 20 segundos.
Mirta Rojo
Tener a Priscilla ya justifica parte de los tres millones de euros que la productora invirti¨® para traer a Espa?a el espect¨¢culo original que aterriza en Madrid, desde Londres, tras ser visto por tres millones de espectadores en Nueva York, Canad¨¢, Suecia, Australia, Italia y Argentina. ?Y no tener que fabricarlo todo de cero ha abaratado mucho los costes?, apunta Rivero.
Arranca el motor. El autocar est¨¢ deseando atravesar Australia, donde se desarrolla la trama, conducido por ?dos drags, Felicia y Mitzi, y una transexual, Bernardette. Cada una de una generaci¨®n diferente. Todas se suben al veh¨ªculo para emprender un viaje en el que encontrarse a s¨ª mismas?, nos cuenta Manolo Pe?a, quien ha sido elegido para interpretar a la mayor de todas. Un papel con el que el actor rompe con el personaje al que todo el mundo le asocia, Mauricio Colmenero, de la serie A¨ªda. ?Ten¨ªa muchas ganas de hacer un musical, no hay int¨¦rprete que no sue?e con hacer uno. Adem¨¢s, con Bernardette he cambiado de registro de la forma m¨¢s radical posible, pasando de ser un hom¨®fobo a un transexual?. No es la primera vez que Pe?a interpreta a una mujer. ?En televisi¨®n tambi¨¦n he sido do?a Eulalia, la madre de Mauricio. Una anciana que estaba en una silla de ruedas, por lo que poco me ha servido para preparar este papel?.
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Cada mes se consumen 40 barras de labios y un kilo de purpurina.
Mirta Rojo
Ahora le toca un nuevo reto, actuar cada d¨ªa subido a unos tacones. ?Y, sobre todo, bailar con ellos. Afortunadamente, el equipo se ha apiadado de m¨ª y no son de aguja. Al pon¨¦rmelos por primera vez, record¨¦ mi infancia, cuando jugaba con unos zancos hechos con latas y rememor¨¦ esa p¨¦rdida de equilibrio?. Est¨¢ ilusionado y disfruta repasando los vestidos de su personaje. ?Ella est¨¢ un poco pasada de tuerca?, afirma con humor. ?Y si me preguntas c¨®mo la veo m¨¢s guapa, es con un modelazo terracota con apliques de leopardo y unas gafas doradas que ser¨¢n su gran hit de temporada?, dice entre risas. Pero puntualiza: ??ste no es un espect¨¢culo de drags, sino que explica con mucha alegr¨ªa su humanidad y su forma de hacer frente a la vida?.
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Zapatos de medio tac¨®n
Mirta Rojo
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El equipo de moda prepara la siguiente prueba, un vestido hecho con dos grandes botas.
Mirta Rojo
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Todo el elenco cambia de imagen cada cinco minutos para cantar y bailar 25 ¨¦xitos de la m¨²sica disco.
Mirta Rojo
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