Fuera tab¨²s: diez veces que la ficci¨®n se atrevi¨® a mostrar la masturbaci¨®n femenina

No todos los actores se atreven a sugerir cambios en un guion de ficci¨®n. M¨¢s a¨²n si el guionista que lo firma es tambi¨¦n el productor ejecutivo de la producci¨®n y una de las mentes creativas m¨¢s brillantes del siglo XXI. La bravura se asoma a la haza?a si ese cambio es nada menos que una escena de masturbaci¨®n y eres t¨² qui¨¦n deber¨¢ interpretarlo de ser escuchado. Pero Maggie es mucha Gyllenhaal. La actriz de filmes como El caballero oscuro ha desvelado en una charla con The Hollywood Reporter c¨®mo le pidi¨® a David Simon (The Wire) una secuencia de masturbaci¨®n femenina para enriquecer su personaje en la aclamada serie de HBO The Deuce.?¡°Cuando se lo coment¨¦ por primera vez, fingi¨® que escup¨ªa el agua de nuevo en el vaso¡±, asegur¨® Gyllenhaal. La actriz interpreta a una prostituta en el Nueva York de los a?os setenta que, insatisfecha tras un encuentro con un cliente, se da la vuelta y se masturba. Tras terminar de beber, Simon acept¨® la sugerencia de buen grado y fue rodada, pero se qued¨® fuera del primer corte. Cuando la int¨¦rprete supo que hab¨ªa sido desechada, volvi¨® a defender por correo electr¨®nico y en persona la necesidad de incluirla para respetar la personalidad de su rol. Ahora sabemos que dicho momento, finalmente incluido en la primera temporada de la serie, jam¨¢s hubiera llegado a los televisores de todo el mundo de no ser por el compromiso de su protagonista. ¡°Bien. Hemos hecho algo feminista¡±, pens¨® la actriz tras ver el resultado.

Este episodio viene a engrosar el hist¨®rico libro de injusticias concernientes a la representaci¨®n de la sexualidad femenina en Hollywood. En el caso de The Deuce se antoja incluso m¨¢s llamativo, al referirnos a una serie que tiene como trasfondo el origen de la industria del porno y en la que no faltan las escenas de sexo, emitida en una cadena de cable con fama de tomar riesgos y avalada por un creador lejano a militar en el conservadurismo art¨ªstico. ?Por qu¨¦ cuesta tanto entonces mostrar la masturbaci¨®n femenina en una obra de ficci¨®n? Mientras que varias de las pel¨ªculas y series m¨¢s vistas de la actualidad est¨¢n repletas de escenas de sexo gratuito ¨Calgunas respondiendo ¨²nicamente al imaginario viril¨C, la representaci¨®n del placer femenino en solitario sigue siendo un tab¨². Para visibilizar esta carencia, a continuaci¨®n recopilamos algunas de las m¨¢s inolvidables escenas de mujeres teniendo orgasmos por s¨ª mismas. Guionistas, tomad nota:

Sally Hawkins ¨C La forma del agua

El filme m¨¢s premiado de 2018, ganador del ?scar a la mejor pel¨ªcula, puede calificarse de rompedor en cuanto a su tratamiento del sexo. No solo por lo expl¨ªcito de la relaci¨®n entre el monstruo anfibio y la protagonista, sino por mostrar la masturbaci¨®n como parte de la rutina diaria de la limpiadora muda a la que da vida Hawkins. ¡°Nos hemos acostumbrado a no representar la sexualidad femenina, o a representarla de una forma glamurosa y artificial¡±, asegur¨® el director Guillermo del Toro en IndieWire.

Maggie Gyllenhaal ¨C Secretary

No es la primera vez que la actriz de The Deuce debe representar a una mujer masturb¨¢ndose en la ficci¨®n. Ya lo hizo en la subversiva Secretary, interpretando a una secretaria que entabla una relaci¨®n sadomasquista con su jefe (James Spader). De nuevo, la actriz tuvo que corregir a su director (Steven Shainberg) que hab¨ªa previsto que su personaje se masturbara sentada en el v¨¢ter del ba?o de la oficina. ¡°Yo le dije, ¡®?Qu¨¦! ?C¨®mo puede tocarse de esa forma?¡¯¡±, coment¨® Gyllenhaal en una entrevista con The Independent, desvelando el desconocimiento del cineasta. Finalmente, la escena se hizo con la actriz de pie.

Phoebe Waller Bridge ¨C Fleabag

La actriz y guionista brit¨¢nica (de obligado visionado su ¨²ltimo proyecto, Killing Eve) se hizo un nombre en la ficci¨®n con esta sitcom en la que cuenta las desventuras sexuales de una treintea?era en Londres. Uno de sus momentos m¨¢s divertidos tiene lugar en su cama, cuando aprovecha para masturbarse mientras su chico duerme. ?Qu¨¦ utiliza para excitarse? Un v¨ªdeo de Barack Obama pronunciando un discurso. ¡°S¨ª, estaba en el gui¨®n original¡±, declar¨® Waller Bridge al respecto de este gag en Rolling Stone. ¡°Ella buscaba algo con lo que distraerse tras un mal polvo as¨ª que pone las noticias y bien¡­ es Obama, ?qui¨¦n puede culparla?¡±. Su contempor¨¢nea, Lena Dunham, tambi¨¦n escribi¨® una secuencia para el personaje de Marnie (Allison Williams) en Girls. No tan original como esta, claro.

Natalie Portman ¨C Cisne Negro

Seg¨²n cont¨® la actriz, la escena en cuesti¨®n le hizo pasar un rato ¡°muy desagradable¡± cuando acudi¨® a ver la pel¨ªcula en compa?¨ªa de sus padres. Suponemos que el ?scar posterior hizo que el apuro valiera la pena, pero al contrario que el resto de su interpretaci¨®n en este drama de Darren Aronofsky, la ¡®irrealidad¡¯ de su orgasmo ha sido muy criticada por parecerse demasiado a la t¨ªpica fantas¨ªa masculina hecha realidad. Un reproche tambi¨¦n achacable a la sobreactuada Elena Anaya en aquella recordada secuencia del sof¨¢ (y solo disponible actualmente en la red en webs pornogr¨¢ficas) de Luc¨ªa y el sexo.

Ilana Glazer ¨C Broad City

Esta serie de comedia ha hecho grandes cosas en favor de la representaci¨®n feminista y sin complejos de la mujer actual. Tambi¨¦n en el apartado de la sexualidad, contando con sketches tan hilarantes como este en el que Glazer prepara un ritual premasturbaci¨®n compuesto por velas, ostras, m¨²sica sugerente y la disposici¨®n boca abajo de los retratos familiares que pululan por la habitaci¨®n. ¡°Estas mujeres est¨¢n cachondas. Pero no cachondas seg¨²n el criterio masculino. Empezando por su vagina, no por la mirada de un hombre hacia ellas¡±, explic¨® la actriz.

Victoria Abril ¨C ??tame!

Una ba?era. El submarinista de juguete que desaf¨ªa la corriente hasta toparse con un obst¨¢culo insalvable. La sonrisa de Abril. Una de las escenas m¨¢s ic¨®nicas del cineasta manchego ¨Cy por tanto de la historia de nuestro cine¨C no pod¨ªa quedarse fuera de esta lista.

Beth Behrs ¨C Dos chicas sin blanca

Es especialmente complicado encontrar secuencias de masturbaci¨®n en las cadenas generalistas estadounidenses. M¨¢s a¨²n si hablamos de comedias dirigidas a grandes espectros de p¨²blico. Por eso es relevante la existencia de esta secuencia, sugerente pero efectiva. Max (Kate Dennings) quiere presentarle un chico a su compa?era de piso Caroline (Beth Behrs). Creyendo que el piso esta vac¨ªo, Max abre la puerta del ba?o y se encuentra a Caroline abierta de piernas en la ba?era. ¡°No me mires de esa forma. Ni que fuera la ¨²nica persona en el mundo que se masturba¡±, replica la joven, obviando el hecho de que su inter¨¦s rom¨¢ntico este testigo de lo ocurrido.

Naomi Watts ¨C Mulholland Drive

En la considerada como mejor pel¨ªcula de lo que llevamos de siglo, Naomi Watts se masturba pensando en el personaje de Laura Harring exhibiendo una mezcla de confusi¨®n, ira y desesperaci¨®n. La experiencia religiosa y simb¨®lica termina con convulsiones y l¨¢grimas, muchas l¨¢grimas, hasta que el sonido de un tel¨¦fono la interrumpe. David Lynch no pod¨ªa firmar una escena de sexualidad convencional.

Joan Allen ¨C Pleasantville

Algo capaz de convertir el blanco y negro en color. As¨ª de importante puede ser para una mujer adulta descubrir la masturbaci¨®n, seg¨²n el filme de Gary Ross que representa de manera expl¨ªcita y literal la met¨¢fora. Tras ser su propia hija (Reese Witherspoon) quien le descubra las maravillas de ¡®encerrarse en el ba?o¡¯ por primera vez en su vida, el personaje de Allen (y el espectador) ve cada escena restante de su monocrom¨¢tica existencia con un liberador tecnicolor.

Isabelle Huppert ¨C Elle

Paul Verhoeven, que firm¨® en los noventa una joya del cine trash meets porno con Showgirls, decidi¨® alimentar su historial de transgresor con su alabada ¨²ltima pel¨ªcula. La ejecutiva de clase alta protagonista, que le dio un Globo de Oro a la actriz francesa, provoca al espectador desnudando a uno de sus empleados o masturb¨¢ndose mientras observa a su vecino con unos prism¨¢ticos. ¡°Es esta actitud tipo ¡®No es algo importante¡¯ en lo que respecta a la masturbaci¨®n femenina la que se echa de menos en la mayor¨ªa de las pel¨ªculas¡±, sostiene a ra¨ªz de esta secuencia la revista Little White Lies.